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Cinco hitos que calentarán los ánimos en 2013

Cinco hitos que calentarán los ánimos en 2013

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El calendario dice que el año comienza en enero, pero en Chile, para el mundo de los negocios y la política el año verdaderamente comienza en marzo cuando los chicos vuelven a clases y los poderosos vuelven de vacaciones.

Este año promete ser tanto o más explosivo que los últimos dos, especialmente con elecciones presidenciales en carpeta. Acá cinco hitos que amenazan con dominar la agenda y que indudablemente calentarán los ánimos.

La Polar: el juicio económico más esperado en décadas              

Este año se vivirá el capítulo final de una historia que comenzó con un hecho esencial enviado el 9 de junio de 2011 a la Superintendencia de Valores reconociendo graves irregularidades en la cartera de créditos.

Nadie sospechó que se trataría de un millón de clientes repactados sin autorización y que afectaría a todos los chilenos que cotizan en las AFP, dueñas al momento de estallar el fraude de un 24 % de la multitienda.

En junio vence el plazo para que el Ministerio Público concluya la investigación y en agosto comenzaría el juicio oral del que se considera el mayor fraude de una sociedad anónima abierta desde la crisis bancaria de 1983.

Según el Fiscal José Morales, a cargo de la investigación, la duración del juicio no será mayor a tres meses y las penas podrían superar los 15 años considerando la gravedad de los delitos. Uso ilegítimo de información privilegiada, lavado de activos, entrega de información falsa al mercado, entrega de información falsa para suscribir créditos e infracción a la Ley de Bancos.

El primero de los peritajes encargados por la Fiscalía de Alta Complejidad en el marco del caso La Polar concluyó que todas las gerencias corporativas sabían de las repactaciones unilaterales. Son nueve los formalizados: Pablo Alcalde, ex presidente de la multitienda; Julián Moreno, ex gerente de productos financieros; María Isabel Farah, ex gerenta de administración; Nicolás Ramírez, ex gerente general; Santiago Grage, ex gerente de finanzas; Pablo Fuenzalida May; el ex gerente general interino de la multitienda, Martín González; la ex gerenta de créditos de La Polar, Marta Bahamondes Arriagada, y el jefe de proyectos y análisis, Ismael Tapia Vidal.

Será un hito histórico. En Chile las penas de cárcel a los altos ejecutivos no han sido frecuentes ni menos en tan alto número como se espera que ocurra en este caso.  

BTG-Celfin, Munita-BCP e IM Trust-Itaú y la competencia con LarrainVial y la banca comercial  

Este año se verá en la cancha el resultado de las alianzas de Celfin y BTG Pactual; IM Trust y Banco de Crédito del Perú y Munita, Cruzat y Claro con Itaú. La competencia principal no será entre ellos, sino con los bancos comerciales a los que les disputarán clientes para los grandes negocios corporativos, léase fusiones y adquisiciones, aperturas en bolsa o aumentos de capital.

El primer ejemplo es Cencosud, compañía a la cual Celfin (con las espaldas de BTG) asesora en el aumento de capital por US$ 1.740 millones, pero le va a prestar US$ 700 millones para suscribir gran parte de lo que le corresponde (US$ 1.000 millones). Cosa que antes no podía.

Los bancos grandes como Santander, Chile o BCI tendrán que salir a proteger su tradicional nicho de negocios ahora amenazado por estos nuevos actores capaces de llevarse el negocio completo. Asesoría y crédito en un sólo paquete. LarraínVial también tendrá que pelear más duro para seguir siendo un actor dominante el negocio de las finanzas corporativas

Y como consecuencia veremos un mercado más competitivo en el que los clientes tendrán un mayor abanico donde elegir. Como contrapartida, las corredoras tradicionales se verían beneficiadas en el negocio de administración de altos patrimonios. Dicen que no es el foco de Itaú, ni del Banco de Crédito del Perú y a BTG le gustan los grandes los negocios corporativos. LarraínVial, Moneda Asset, el BICE y la corredora del BCI recibirían a esos clientes acostumbrados a una atención personalizada, a su ejecutivo con dedicación exclusiva.    

Campañas políticas: revisión a los impuestos, las Isapre y las AFP                

La campaña presidencial que se avecina no será como otras. Todos los candidatos concuerdan en que Chile es un país desigual, por lo que deberán apuntar a soluciones y no a diagnósticos.

El abanico de temas económicos se abrirá como nunca. Hay consenso en que una reforma tributaria será el primer punto en discusión y que abarcará desde un nuevo aumento de impuestos a las empresas hasta la eliminación del Fondo de Utilidades Tributables o FUT que acumulan las compañías cuando no retiran utilidades y que ya apareció en la discusión del ajuste tributario en el Parlamento. El sistema de AFP estará sí o sí en la discusión.

Las alertas se prendieron con los bajos montos de las pensiones y las palabras de Joaquín Vial, el consejero del Banco Central, quien afirmó que el 60 % de los primeros pensionados recibirán cerca de $ 150 mil mensuales. En la discusión saldrá nuevamente la creación de una AFP estatal y la incorporación de elementos solidarios para complementar las cuentas de capitalización individual. Es muy probable que la reforma a la ley de isapres no se haga en el Parlamento, sino en las campañas.

Lo anticipó el ministro de Salud, Jaime Mañalich, porque se trata de un tema con demasiadas aristas. Puede haber consenso en un IPC de la salud y un plan mínimo garantizado, pero ya está en tela de juicio la integración vertical que se da en varias Isapre que son dueñas de clínicas, centros ambulatorios y laboratorios, cosa la ley prohíbe y para lo cual se creó una figura que separa legalmente ambos negocios, aunque en la realidad sus propietarios son los mismos.

La energía no quedará fuera. Cómo Chile va a aumentar su producción eléctrica, con qué tipo de energía, qué instancias resolverán el futuro de los proyectos serán parte de un debate que promete soluciones concretas y no frases hechas, sin sustancia, para la galería. HydroAysén es lo primero en la agenda.    

El dilema que no da para más: la fortaleza del peso.  

Ha pasado el tiempo sin que nadie le ponga el cascabel al gato. Los exportadores no cobre afirman que en los últimos dos años los menores retornos por el bajo precio del dólar alcanzan a US$ 3.334 millones.

Y en 2013 serán unos US$ 1.666 millones si todo se mantiene como está. Un escenario que no toma en cuenta el alza en el costo de la electricidad ni de la mano de obra que, además, escasea en la producción frutícola.

El tipo de cambio real —agregan— se ubica un 2,4 % por debajo del valor de la intervención de 2010. Para los expertos la solución no está en el Banco Central, porque se trata de una medida aislada. Las miradas apuntan a Teatinos 120, piso 12, al escritorio del ministro de Hacienda, Felipe Larraín. Él posee la receta, pero no quiere echar mano al principal ingrediente: reducir el gasto fiscal.

Para el Banco Central es un dilema Shakesperiano: intervenir para frenar el peso o subir tasas para enfriar demanda interna Por un lado, está la presión para que intervenga luego que la inflación tocara su nivel más bajo en 3 años, pero las sorprendentes cifras de la demanda interna y el déficit de cuenta corriente hacen pensar que la próxima movida del BC debería ser un aumento de la TPM.

La devaluación que llora en Argentina  

Se huele cada vez más cerca y para muchos es inevitable.

Con un dólar oficial a 5 pesos y a 8 en el mercado informal, la brecha se está volviendo insostenible.

En Argentina los cálculos hablan de que la devaluación que tendrá que aplicar Cristina Kirchner para poner freno a una inflación no pasa de octubre. No es la primera vez; ya ocurrió en 2002, pero la diferencia es que entonces se ponía la lápida a la Ley de Convertibilidad en vigor durante 10 años.

Ahora el escenario es otro: la inflación real se estima en torno al 30 % y los economistas independientes prevén que hasta las elecciones el banco central seguiría financiando al sector público y se seguirían consumiendo reservas.

El tipo de cambio nominal oficial continuaría depreciándose aproximadamente 10 puntos porcentuales por detrás de la inflación y el Gobierno nacional devaluaría diferenciadamente aplicando impuestos sectoriales.

El efecto de una devaluación sería enorme para un gran número de empresas chilenas y de gran tamaño: Cencosud, la primera, ya que casi un 30 % de sus ingresos proviene de Argentina; y más atrás Falabella, CMPC, CCU, LAN, Embotelladora Andina, las viñas Santa Rita, Concha y Toro y Montes.

Hace un par de semanas se vio el impacto de la devaluación venezolana en Masisa, que dijo que sus ventas sufrirán un impacto negativo de US$ 33,1 millones y el patrimonio de la firma se verá disminuido en US$ 137 millones. Las española BBVA y Telefónica están entre las que también anunciaron un impacto millonario en sus resultados por la medida del gobierno de Chávez.

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