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Caso La Polar, ¿quiénes son las verdaderas víctimas?

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Por: Bárbara Salinas, abogada de Accionistas Minoritarios La Polar


Señor Director:

Estando ad portas de una nueva audiencia de formalización en el caso La Polar, la que de seguro refrescará a la opinión pública este escándalo financiero, vale la pena hacer algunas reflexione desde la perspectiva de los accionistas minoritarios.

Ciertamente es legítima y necesaria la labor del SERNAC en la defensa de los derechos de los consumidores, también en lo que respecta a las repactaciones unilaterales que afectaron a clientes morosos de La Polar.

Sin embargo, bien vale preguntarse quiénes son las verdaderas víctimas directas  de este caso.

En los últimos días hemos sabido que de los consumidores repactados, más de dos tercios tienen en su casa un televisor, un electrodoméstico o vestuario comprado con la tarjeta La Polar, que a lo menos no habrían terminado de pagar. Ellos no fueron perjudicados sino que “usados” por la administración anterior para maquillar los balances de la empresa y defraudar al mercado, porque no les servían los clientes “sanos” o cumplidores. De esta forma se presentó y se vendió  al mercado  a la “niña bonita” que no fue.

De otro lado, se encuentran las verdaderas víctimas: cerca de 10.000 accionistas minoritarios que invirtieron sus ahorros, producto del esfuerzo de años, y están viendo sus acciones devaluadas en más de un 90%. Ellos no cayeron en mora, no le deben un peso a nadie. Su pecado fue confiar en un sistema financiero y bursátil débil y permeable. Ellos confiaron en la institucionalidad.

Hoy vemos a una nueva administración que ha dado la cara por hechos y delitos cometidos por otros, además de emprender una labor titánica para asegurar la viabilidad de la compañía y evitar, entre otras cosas, que 7 mil personas se queden sin trabajo. Estos trabajadores también son grandes víctimas de este fraude y están dando una gran pelea para que la empresa salga adelante.

Son estas las reales víctimas de este fraude y esperan que las autoridades entiendan la importancia de enfrentar este caso con una mirada global que permita una solución equilibrada, como ha señalado el propio Ministro de Economía. Los clientes que sí fueron afectados por las repactaciones unilaterales deben ciertamente ser reparados, pero esto no será posible si se pone en riesgo la viabilidad de la empresa, escenario en el que todos pierden.

Queda mucho camino por recorrer en el caso La Polar. En lo inmediato, lo concreto es que sólo una parte menor de los clientes repactados habrían sufrido algún perjuicio real  por el fraude financiero de la anterior administración. Por el contrario, el 100% de los accionistas minoritarios han sido perjudicados directos. Como me enseñó un profesor en la universidad “las cosas son como son y no como las partes quieren que sean”.

Bárbara Salinas Acuña
Abogada Accionistas Minoritarios La Polar

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