La subvención por asistencia entrega recursos que pueden variar mensualmente, cuestión que no responde a las necesidades del colegio en donde la gran mayoría de los costos son fijos (salarios docentes, directivos).
Por estos días se discute en el Congreso un proyecto de Ley que “crea una subvención escolar especial para la clase media”. La iniciativa del Gobierno ha sido criticada por la mayoría de los expertos en la materia (salvo los investigadores asociados a centros de estudio partidarios del oficialismo), los que —en términos simples— cuestionan el proyecto por:
En relación a este último punto, el proyecto en cuestión es otro paso en una carrera que ha aumentado de manera importante los recursos destinados a las escuelas, pero sin ninguna preocupación por la estructura de costos de los establecimientos.
[cita]La subvención por asistencia entrega recursos que pueden variar mensualmente, cuestión que no responde a las necesidades del colegio en donde la gran mayoría de los costos son fijos (salarios docentes, directivos).[/cita]
La subvención por asistencia entrega recursos que pueden variar mensualmente, cuestión que no responde a las necesidades del colegio en donde la gran mayoría de los costos son fijos (salarios docentes, directivos).
Asimismo, el actual método de financiamiento perjudica a las zonas de baja densidad poblacional y a aquellas donde la asistencia varía por razones no atribuibles a las escuelas (condiciones climáticas, geográficas, vulnerabilidad, etc.). Por otra parte, entregar un monto igual por alumno, independiente del tamaño del establecimiento, resulta tremendamente injusto para los colegios de menor matrícula, donde el costo por estudiante es más alto.
Educación 2020 ha denunciado esta situación en reiteradas ocasiones, proponiendo a las autoridades respectivas (Ministerio y Congreso) una nueva estructura de financiamiento que refleje de mejor manera la estructura de costos de los establecimientos, manteniendo el estímulo para aumentar matrícula e incentivar asistencia.
Nuestra propuesta combina un subsidio a la oferta (costos fijos) y a la demanda (por asistencia), pero de manera compuesta. Esto quiere decir que del total de recursos que va a recibir un establecimiento por parte del Estado, el 60 % lo recibiría por costos fijos (aula, establecimiento y sostenedor), y el otro 40 % a través de subvenciones por asistencia.
Los componentes de nuestra propuesta son:
Resulta lamentable que este tema no haya sido recogido y continuemos inyectando recursos mediante un sistema que ha demostrado reiteradamente su ineficiencia. Nuestra propuesta busca impulsar un debate que termine con la lógica del “parche”, en donde aumentamos el valor de la subvención sin considerar los gastos, deudas y condiciones de las escuelas del país.
Sres. Senadores es su turno.