Señor Director:
Mucho se habla de “derecho a la Salud”, pero en la constitución de 1980, que heredamos de la Dictadura de Pinochet, ésta no figura como derecho, sólo se garantiza el “acceso a la Salud”, a demás de eso tal como se hace con otros derechos (educación, vivienda) el lucro con la Salud, es cada día mayor, ya sea en el ámbito de las ISAPREs, con ganancias de más de 70 mil millones en 2017 y sólo a Marzo de 2018 más de 34.196 millones de pesos, como la centralización de servicios en CESFAM y Hospitales, las concesiones hospitalarias, las compra de camas a Clínicas y un suma y sigue eterno. Por lo demás, sabemos que es un sistema in equitativo, donde aproximadamente el 80% de la población se atiende a través de FONASA y un 20% en ISAPRES, pero son estas últimas las que tienen casi al 60% de los médicos/as trabajando para ellos, dejando así a la Salud Pública desprovista de profesionales. Se considera que la brecha de especialistas, supera los 4.000 facultativos a nivel país.
El problema de las ISAPREs, no es sólo que se lleve a la mayoría de los médicos/as, si no que también tiene a la población más sana, porque al momento de recibir a alguien en ella, la selecciona por su riesgo de enfermar, siendo rechazados/as si tienen alguna enfermedad preexistente; también se lleva a la población joven y de mayores ingresos. Agreguémonos que se llevan más del 50% de los recursos disponibles en salud, ya sea a través de las cotizaciones de sus afiliados/as, bonos, como el traspaso desde el sector público a través de la modalidad libre elección (MLE, compra de bonos desde pacientes FONASA a las clínicas privadas).
Por último, entendemos que nuestra lucha por la Salud, es una lucha contra el Capitalismo, un sistema económico depredador que no solo detona las causantes de un mal vivir en aspecto desde la salud, sino también a las mujeres manifestándose por las condiciones patriarcales que se manifiestan dentro del capitalismo, viviendas indignas y un sin numero de determinantes sociales , por lo que sólo con la transformación del sistema económico y político vamos a avanzar hacia una vida digna donde tengamos salud integral.
Tamara Ahumada Jofre
Cerro Navia
