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«El tiempo no es tan importante como llegar a la verdad»

Ayer las polémicas palabras del comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, tuvieron inmediata respuesta del presidente de la Corte Suprema, Marcos Libedinsky; del titular del tribunal de alzada, Juan González, y del presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, Diego Simpertegui.


Luego del terremoto político causado por el comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, con sus declaraciones en las que llamó a que los procesos por casos de violaciones a los derechos humanos no se eternizaran, y con ello el envío de dos mensajes, uno al Ejecutivo y otro al Poder Judicial, las interpretaciones dan para todo.



El presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, el ministro de corte Diego Simpertegui, puso el punto sobre las íes respecto a las palabras del militar.



El juez apuntó a que la "prontitud de las resoluciones judiciales siempre es mejor cuando se colabora… si no hay demora», dijo, en abierta alusión a la falta de colaboración de los imputados en los procesos.



Simpertegui agregó que debido a la naturaleza de los casos, donde en muchos de ellos hay involucrado personal de los servicios de inteligencia, resulta difícil esa prontitud. Sin embargo enfatizó que "el tiempo que pase (durante la tramitación de los procesos) no es tan importante como llegar a la verdad".



Los dichos de Simpertegui, sin duda, abundan en precisión, en comparación a los emitidos por el presidente de la Corte Suprema, Marcos Libedinsky, a la salida del palacio de tribunales.



La cabeza del máximo tribunal no quiso polemizar con Cheyre, e indicó que reconocía la legitimidad de la preocupación que podía tener con respecto a las personas pertenecientes a su institución.



«Lo razonable es que en verdad no se puede avanzar muy rápido en procesos como éstos que son complicados, porque son hechos que sucedieron hace mucho tiempo», manifestó Libedinsky.



Culpan a la policía



En tanto, el presidente de la Corte de Apelaciones de Santiago, Juan González, fue más allá e indirectamente responsabilizó a la policía de la lentitud de los procesos.



"La justicia obra de acuerdo con los antecedentes que le proporcionan los organismos policiales, de manera que no siempre se le puede atribuir a los tribunales y jueces la demora en la tramitación de los asuntos. Se trata de hacer lo que se puede", sostuvo González.



Inquirido sobre si los dichos de Cheyre podrían rayar en la deliberación, González dijo que en Chile existe «plena democracia, por lo que cualquiera puede emitir su opinión. Ahora que tenga base o no es una cosa distinta».

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