No es la televisión pública francesa la que tiene en la mañana a un historiador de izquierda, con un cientista político conservador analizando los movimientos sociales. Es el canal de Andrónico Luksic, quien por más de media hora le dio espacio a Gabriel Salazar, junto a Gonzalo Müller, quienes marcaron un peak de sintonía. ¿Qué pasa con las supuestas audiencias ñoñas de las dueñas de casa que se arrancan del conflicto?
El viernes, minutos antes que terminara la edición de “Bienvenidos”, el matinal de Canal 13, el equipo hizo un contacto con Martín Cárcamo, el animador que se recuperaba en su casa de un resfrío y fue reemplazado toda la semana por Julio César Rodríguez. En medio de los saludos y las bromas, Tonka Tomicic no se contuvo y con la cara casi pegada a la cámara gritó “Martín, hoy día ganamos!”.
Más que ganar un día en el rating de ese horario, que se pelea por décimas con TVN, fue la alegría por el resultado de una apuesta del 13. Entre principios de marzo y la primera quincena de agosto “Bienvenidos” marcó 6,8 puntos de sintonía promedio, y Buenos Días a Todos, el acorazado del canal público 7,4 puntos.
El viernes 26, el espacio que conduce Tonka Tomicic ganó con 7,5 puntos promedio. Lo inusual es que el peak de sintonía estuvo cuando salió al aire un panel en el que los invitados fueron el historiador de izquierda Gabriel Salazar y el analista político de la UDI, Gonzalo Müller. Ellos, junto a la ex modelo, Paulo Ramírez y Julio César Rodríguez, se dedicaron media hora, a discutir sobre lo que explicaría el movimiento social que por estos días capta la atención de todo el país. Al interior del equipo cuentan que Salazar estaba especialmente sorprendido de ser invitado por la estación, cuya propiedad está ligada a la familia Luksic.
Paralelamente, TVN abordó el mismo tema, a la misma hora. Pero la invitada fue la esposa del Presidente, Cecilia Morel. Con mesura y claridad, la orientadora familiar expuso el mensaje del Gobierno.
La presencia de Morel sin contraparte en el estudio de TVN, puede interpretarse como un gesto de la red pública, luego de las críticas desde sectores oficialistas a la cobertura que ha hecho la estación de las movilizaciones estudiantiles.
Lo de Bienvenidos, el viernes, no fue una apuesta al azar. “El equipo se ha dado cuenta que a los espacios de debate les ha ido muy bien”, dicen al interior del programa. No es casualidad que dos de los segmentos por los que el programa haya trascendido la pantalla para propagarse en redes sociales, tuvieran que ver con la contingencia más dura.
[cita]Según Arturo Arriagada, investigador de la Universidad Diego Portales, “las audiencias quieren saber de qué se trata todo esto que ven en las noticias y que nadie se los explica en más detalle o lo entienden porque les afecta directamente. Ha sido interesante la apuesta de Canal 13. Contrastar opiniones, en lenguaje simple, es una jugada inteligente por parte del ex- canal del angelito. Es una buena lectura poner esos temas de conversación en un contexto no tan grave y en un formato reducido como un noticiero, pero no por ello poco serio”. [/cita]
Uno ocurrió el 17 de agosto. El panel tenía en directo a las madres de los estudiantes en huelga de hambre y repentinamente un apoderado irrumpió en el estudio para dar un mensaje al Gobierno. La decisión fue dejarlo hablar en pantalla.
Dos días después, el 19, la producción invitó a Francisco Figueroa, Vicepresidente de la FECH y a Ena Von Baer, ex vocera y ahora en el Senado. Los dos tuvieron más de media hora para exponer sus puntos de vista. El segmento tiene más de cien mil visitas en Youtube y para el público, la gran perdedora fue la ex ministra.
Con estos datos a la vista es posible preguntarse qué está pasando con las audiencias, o más precisamente con las dueñas de casa, que representan el público mayoritario de los matinales, que hasta ahora se usaban como parodia perfecta de la televisión desechable.
Según Arturo Arriagada, investigador de la Universidad Diego Portales, “las audiencias quieren saber de qué se trata todo esto que ven en las noticias y que nadie se los explica en más detalle o lo entienden porque les afecta directamente. Ha sido interesante la apuesta de Canal 13. Contrastar opiniones, en lenguaje simple, es una jugada inteligente por parte del ex- canal del angelito. Es una buena lectura poner esos temas de conversación en un contexto no tan grave y en un formato reducido como un noticiero, pero no por ello poco serio”.
Los puestos clave del equipo que produce Bienvenidos son ocupados por gente que pasó años en Buenos Días a Todos, la competencia de TVN. La productora general es Jacqueline Cepeda, quién se formó en el equipo de Mauricio Correa, igual que Pablo Manríquez, el director en el switch de Bienvenidos. También está el productor de despachos Leo Castillo, que hacía la misma función en el programa de TVN.
También era del equipo de Juan Carlos “el tata” Díaz, productor de “Buenos Días a Todos”, la periodista Carolina Román, quién ahora es la editora periodística de “Bienvenidos”, el puesto desde donde en buena medida se diseñan los contenidos. Román está en el switch ayudando a los conductores vía sonoprompter con las preguntas y los tiempos. “En el canal están muy contentos con esta apuesta editorial, sienten que le da peso a la mañana”, dice una fuente al interior del programa.
La semana pasada se publicaron los resultados del “Primer Estudio de Evaluación de Rostros y Contenidos de Matinales de TV Abierta”, hecho por la consultora Drive Chile. Buenos Días a Todos, según los encuestados, sigue siendo el más visto por un 44% y Bienvenidos se sitúa detrás de “Gente como Tú” de CHV, con un 23%.
Pero el mismo estudio dice que el matinal de Canal 13 es evaluado con un 50% de las preferencias por su “desempeño general”. Tonka Tomicic es la conductora preferida de la gente encuestada, con un 52%.
Para Arturo Arriagada, quien cursa un doctorado en Sociología en la London School of Economics, la “cercanía” de los rostros es un punto esencial en el interés que pueda generar un determinado tema: “Cuando estos segmentos de debate son liderados por gente que las audiencias consideran cercanas, es más fácil captar el interés de gente que no necesariamente se interesa en el análisis de Tolerancia Cero u otros programas que aparecen como más lejanos a la vida cotidiana”.
El académico asegura que los más atentos a este fenómeno que están cristalizando los matinales deberían ser los noticieros de televisión abierta.
“Independiente de los altos niveles de confianza que los chilenos tienen en los noticieros televisivos, sin querer los ´debates matinales´ desafían el concepto periodístico de “noticia” y a los noticieros -basados en el qué, quién, dónde, cuándo, etc.- como un insumo relevante a la hora de formar una opinión. Eso sí, hay que considerar que las audiencias de matinales tienen una relación con el tiempo distinta a aquellas que ven los noticieros”.
