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Las veces en que Yasna Provoste dio cuenta de su poderío en la DC PAÍS

Las veces en que Yasna Provoste dio cuenta de su poderío en la DC

Raúl Espina
Por : Raúl Espina Periodista de El Mostrador
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Son varios los episodios que dan cuenta del poderío que ostenta la senadora Yasna Provoste al interior de la Democracia Cristiana (DC), reflejo de su liderazgo y redes de influencia, que la vinculan con el mundo de la centroizquierda y, por cierto, el oficialismo. Y es que al menos desde su derrota en la elección presidencial y la llegada de Gabriel Boric a La Moneda, que en la DC no está claro cómo recuperará su crisis de identidad y relato. Un partido conflictuado y dividido entre un sector más progresista y otro que apuesta a perfilarse a partir de sus diferencias con la izquierda y la derecha.


“No hay contrapeso a Yasna Provoste en la Democracia Cristiana (DC)”. Con estas palabras, el senador Matías Walker  -que materializó su salida del partido en noviembre pasado- buscaba dar cuenta del alto grado de poder y de influencia que, a su juicio, la parlamentaria posee al interior de la colectividad que la tuvo de candidata presidencial en las elecciones de 2021. El proceso de aquella campaña pudo influir en la consolidación de un liderazgo que ha permitido que hoy, y tal como lo admiten varias fuentes falangistas, la senadora Provoste no tenga contrapeso dentro de su colectividad.

En medio de este debate, el senador Francisco Huenchumilla dijo este fin de semana que “no era bueno personalizar los debates políticos”, porque desde los 90 hacia adelante, a juicio del parlamentario, “se pudede nombrar entre 10 y 15 personas que siempre tuvieron una gran influencia en el partido, entre ellos también la familia Walker”. En tal sentido, Huenchumilla cree que decir que Provoste ejerce una especie de “rol autoritario” en la DC es algo que “no corresponde a una visión objetiva,  porque la DC ha tenido grandes liderazgos y personas muy influyentes -unas más que otras- y, por lo tanto, siempre van a existir ese tipo de liderazgos”.

En cuanto a la disputa de carácter personal que enfrentarían las senadoras Provoste y Rincón, para un importante referente al interior de la colectividad, la pugna entre ambas parlamentarias “es algo que viene desde la última campaña presidencial, cuando Ximena Rincón tuvo que bajar su candidatura, lo que coincidió con la nominación de Yasna Provoste”, sostuvo. Desde entonces, Rincón experimentaría una antipatía por Provoste cada vez menos solapada, una que se intensificó con la campaña de cara al plebiscito constitucional, que fue una verdadera revancha para Rincón. “Las dos trataban de pasarse cuentas permanentemente y eso lo condicionaba todo. Más allá de las tesis políticas, hay un tema de vendettas personales y egos”, agregaron fuentes cercanas al partido.

Al respecto, hay voces al interior de la tienda que piensan que Provoste “representa sin duda una mirada más a la izquierda del partido. Una línea que se siente más cómoda con la mirada ideológica del Gobierno”. Pero esta supuesta “cercanía ideológica” de Provoste y su sector -encabezado por el senador Francisco Huenchumilla- con el oficialismo ha debido convivir con otros discursos que apuntan mucho más hacia el centro, produciendo constantes discrepancias, con el otro grupo conformado por la mesa directiva y la bancada de diputadas y diputados, entre otros.

“Existió animadversión entre los senadores de la DC”, dijo un militante refiriéndose a los conflictos protagonizados por Yasna Provoste y Ximena Rincón, esta última, ahora en la bancada del movimiento Demócrata. Según detallaron en la tienda, las senadoras tienen una “cuenta pendiente entre ellas y un enfrentamiento, que a esta altura es un enfrentamiento de tipo personal”. Si bien, desde el partido se esforzaron por no trasladar ese enfrentamiento a la bancada y a los comités parlamentarios en el Congreso, la lucha entre ambos liderazgos escaló hasta contribuir a gatillar a fines del año pasado una fuerte crisis identitaria y de convivencia interna, donde más de 70 militantes renunciaron al partido. Entre ellos, históricos militantes como Claudio Orrego y René Cortázar, además de los senadores Matías Walker y Ximena Rincón.

Pero fue en noviembre de 2022, en tanto, tras la solicitud de los senadores Ximena Rincón y Matías Walker de integrar el comité político de la DC, que la senadora Provoste volvió a dar cuenta de su poder en el partido, cerrándoles las puertas de la colectividad y enfatizando en que “no pueden estar con dobles aguas”.

Además, un acuerdo transversal firmado en marzo del 2022 en el Congreso Nacional estableció que Juan Antonio Coloma (UDI) asumiera la presidencia del Senado, y el propio Francisco Huenchumilla la vicepresidencia desde marzo de este año. Para ello, se estableció una serie de acuerdos para las comisiones. Esto sucedió a principios del 2022, mientras Walker y Rincón aún pertenecían a la bancada DC, algo que ya no es así, puesto que renunciaron al partido y este mes decidieron pasar al comité de Evópoli. Frente a esto, apareció recientemente la voz de Yasna Provoste para reclamar que dichos cupos en las comisiones debían ser asumidos por militantes de la DC y que la derecha debía ceder uno de sus cupos para Walker o Rincón. Un problema que estuvo cerca de poner en riesgo el acuerdo administrativo.

Influencias y liderazgos

El liderazgo de Provoste tuvo como hito cuando irrumpió en mayo de 2021, en pleno gobierno de Sebastián Piñera, para impulsar una agenda de “mínimos comunes” que entregara asistencia a las familias más vulnerables del país afectadas por la pandemia. Una propuesta que le permitió a la parlamentaria liderar la agenda y consolidar un liderazgo político en el momento preciso para forzar una primaria presidencial falangista con Paula Narváez y Carlos Maldonado, y entrar a la carrera presidencial.  Y si bien a Rincón le dieron el “premio de consuelo” de ser la presidenta del Senado, a partir de ahí y según lo creen muchos, el vínculo se rompió.

Por su parte, el gran triunfo que obtuvo la senadora Rincón fue en el plebiscito del 4 de septiembre. Provoste, en tanto, afirmó que la apabullante derrota del Apruebo, su opción, en ningún caso significaba una derrota para chilenos y chilenas que buscan un país menos desigual e indolente a las necesidades de las grandes mayorías. “No es que hayamos perdido, es que aún no hemos ganado”, dijo la senadora por Atacama, una política curtida ya en otras derrotas dolorosas, como fue la acusación constitucional (la primera en democracia) que la removió del Ministerio de Educación durante el primer Gobierno de Michelle Bachelet.

La tristeza de Yasna Provoste en septiembre pasado contrastaban con la sonrisa que Ximena Rincón exhibía ante las cámaras. Para integrantes de diversas instancias partidarias de la DC, con toda seguridad Rincón y Provoste dedicaron más de un minuto a pensar en la otra. Y si bien la última batalla fue ganada por Rincón, los conocedores de la interna falangista sostienen que la senadora del Maule no alcanzó a disfrutar del triunfo del Rechazo por demasiado tiempo porque le falló el plan tendiente a crear el Partido Demócrata, que era su gran apuesta personal.

Provoste ha dicho que su tarea ahora es vincular a la DC con las necesidades de la ciudadanía, y que su objetivo es que la falange vuelva a ser ese partido “progresista” que, a su juicio, Chile necesita y merece. “Hay quienes han caminado hacia profundizar esta crisis” planteó la parlamentaria en septiembre de 2022, quien tras la derrota del Apruebo fue clave en el nombramiento del senador Huenchumilla como delegado constitucional de la DC. Ambos senadores mantienen una estrecha sintonía política en el Congreso y, según admiten integrantes de la disidencia falangista, Provoste pudo influir directamente en la nominación que le permitió al parlamentario por la Araucanía reemerger en plena discusión constituyente.

 

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