
ProCultura y filtraciones irrumpen en cumbre presidencial de la Semana de la Construcción
La CChC —que entregó 60 propuestas para enfrentar el déficit habitacional— reunió a seis presidenciables para discutir sobre infraestructura y vivienda. Si bien las concesiones, los campamentos y el gasto público estuvieron en el centro, la contingencia política marcó el tono del debate.
En el marco de la Semana de la Construcción, organizada por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), seis de los principales aspirantes a La Moneda participaron este martes en un panel que, si bien tenía por objetivo abordar materias de infraestructura, vivienda y gasto público, terminó girando en parte hacia temas que hoy remecen el debate político: el caso ProCultura, las filtraciones y las acusaciones de espionaje.
Desde las 8:30 de la mañana, los candidatos Evelyn Matthei (Chile Vamos), José Antonio Kast (Partido Republicano), Carolina Tohá (Socialismo Democrático), Johannes Kaiser (PNL), Jeannette Jara (PC) y Gonzalo Winter (Frente Amplio), fueron llegando al centro de eventos Metropolitan Santiago para participar en la instancia.
La actividad no sólo reunió por primera vez a las cartas mejor posicionadas en las encuestas, sino que generó un espacio inédito de contraste de ideas. Si bien fue inevitable abordar la contigencia, el foco también estuvo puesto en las 60 propuestas que la CChC entregó a los presidenciables para enfrentar déficit habitacional.
El formato del encuentro no contemplaba debate directo, pero las tensiones afloraron pronto. Fue la candidata comunista, Jeannette Jara, quien marcó el tono al citar una de las recomendaciones de la CChC: “Ningún país avanza desde la división”. Mirando directamente a Kast y Kaiser, cuestionó la falta de apoyo a reformas clave como la de pensiones y criticó lo que calificó como “dichos para la galería”.
Concesiones y gasto público en el centro
Más allá de las fricciones, los temas sectoriales también ocuparon un lugar central. Winter defendió el uso estratégico de concesiones para obras públicas, señalando que “hay casos en que pueden acelerar proyectos, pero también situaciones donde terminan costando más al Estado”. A la vez, propuso que el Estado cuente con una empresa pública de construcción.
Los dichos de Winter fueron celebrados irónicamente por Kaiser. Consultado posteriormente por el impacto que tendrá en su sector no realizar primarias —a las cuales les restó importancia en términos de visibilidad—, el diputado dijo que será un “round super interesante, entre, por ejemplo, Jara, que tiene una visión estatista, y Winter, que se declaró partidario de las concesiones”. A su juicio, —dijo, con una leve sonrisa— “otra victoria cultural para los libertarios”.
Matthei, en tanto, puso el foco en la “grasa del Estado” y sostuvo que “Argentina antes de crecer recortó fuertemente (…). Chile está lleno de grasa”. En ese sentido, apuntó a la denominada “permisología” que enfrentan los proyectos de inversión. En la misma línea, Kast enfatizó que hay una coincidencia entre todos los candidatos, “que quien más traba la pelota es el Estado” y valoró que Jara manifestara disposición a reformar el Consejo de Monumentos Nacionales, esperando que esa mirada se amplíe hacia otras instituciones estatales.
Carolina Tohá, por su parte, advirtió sobre las inconsistencias en las propuestas económicas de la derecha: “Uno no puede recaudar menos y gastar más, y todos los candidatos de derecha proponen estrategias que proponen recaudar mucho menos y al lado propuestas que significan gastar mucho más”. Según la exministra, eso va en contra de la matemática simple y llamó a tener sentido de realidad.
En el marco del debate central, los postulantes a La Moneda debatieron sobre el grave déficit habitacional que afecta al país, la reactivación del sector de la construcción, la excepción transitoria del IVA para la vivienda y reformas al sistema de permisos. También se discutió la necesidad de una política habitacional robusta que permita construir entre 15 mil y 20 mil viviendas anuales. Con un déficit cercano al millón de viviendas, un aumento del 50% en el precio del suelo y más de 130 mil familias viviendo en campamentos, los candidatos coincidieron en la urgencia de tomar medidas concretas para reactivar el rubro y garantizar el derecho a la vivienda digna.
Procultura, filtraciones y espionaje: el trasfondo inevitable
Aunque no fue parte del temario oficial, el caso ProCultura —y las aristas que involucran financiamiento irregular, filtraciones y acusaciones de espionaje— sobrevoló toda la jornada, especialmente la posterior conferencia de prensa en la que cada candidato respondió preguntas de la prensa.
Cabe mencionar que la reciente filtración del audio entre Josefina Huneeus —psiquiatra y expareja del líder de la fundación Alberto Larraín— y el Presidente Gabriel Boric generó una estrategia de control de daños de La Moneda que ha buscado criticar la intromisión en conversaciones privadas y el uso de comunicación parcial y descontextualizada, situación que politizaría la justicia.
Desde la derecha, Kaiser desafió al Frente Amplio a llevar sus acusaciones de espionaje a tribunales si realmente creen en ellas. Kast puso el foco en que lo relevante es cómo el oficialismo explica sus vínculos con fundaciones investigadas, no cómo responde a las críticas del Partido Republicano. Esto último, luego de que la timonel frenteamplista, Constanza Martínez, comunicara que su partido evalúa acciones legales contra republicanos, tras los dichos del diputado Cristian Araya, quien los acusó públicamente de funcionar como un “cartel” político.
Si bien ningún candidato mencionó directamente al Presidente Gabriel Boric, sí hubo referencias cruzadas. Jara defendió al Mandatario afirmando que “algunos tratan de construir tesis sin fundamento apuntando al Presidente. Él ha sido claro: aquí caiga quien caiga, esto se debe investigar”. Agregó que las filtraciones “vienen de un solo lado”, y cuestionó que no se haya investigado aún al exministro Andrés Chadwick.
Winter, en tanto, respaldó las investigaciones judiciales, pero fue enfático en señalar que “hay personas que están ilegalmente filtrando cosas para hacer política. De eso no tengo duda”. También calificó como “grave” cualquier eventual confirmación de espionaje ilegal: “Si hay funcionarios que actúan en nombre de la ley y se salen de ella, deben ser señalados con claridad”.
Tohá reforzó la postura oficialista de que el caso debe ser abordado judicialmente, no políticamente: “Toda hipótesis sobre el caso Convenios debe radicarse en tribunales. Que actores políticos intenten encuadrar el caso según sus intereses no aporta”.
Quien también fue aludido por el caso ProCultura fue el gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego. Esta arista involucra fondos otorgados al programa “Quédate”, liderado por el psiquiatra Alberto Larraín, fundador de ProCultura y cercano a Orrego, desde el Consejo Regional Metropolitano.
Matthei evitó ahondar en el impacto del caso ProCultura en La Moneda, aunque deslizó una breve y dura crítica al gobernador: “Quiero señalar que yo no tengo una buena opinión de Claudio Orrego y no la tengo porque ya vimos cómo utilizó imágenes que eran de reuniones para hacer campaña política, y eso no se hace”.
No obstante, Matthei sentenció: “Los chilenos demandan que no haya corrupción y no que estemos sacando partido cuando le toca al otro y haciéndonos los lesos cuando nos toca a nosotros. No puede haber más corrupción y eso significa que tiene que haber cárcel para los corruptos y que condenados nunca más ejerzan cargos públicos. Además, que efectivamente dejemos de contratar a personas que nos caen bien, amigos o camaradas del partido”.
Cabe mencionar que Claudio Orrego respondió a las acusaciones vinculadas al caso ProCultura, asegurando que su campaña fue financiada exclusivamente con créditos públicos. “El que nada hace, nada teme”, declaró, criticando además una publicación de prensa con información que calificó como falsa y malintencionada.