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“Enmienda Kennedy 2.0”: la gran preocupación del mundo militar por anuncios sobre Israel PAÍS Foto: AgenciaUNO

“Enmienda Kennedy 2.0”: la gran preocupación del mundo militar por anuncios sobre Israel

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Andrés Cárdenas Guzmán
Por : Andrés Cárdenas Guzmán Periodista El Mostrador
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El Presidente Boric anunció medidas que afectan la relación con Israel, como el respaldo al embargo de armas en España y la diversificación de proveedores en Defensa. Expertos advierten sobre el impacto en contratos vigentes y la reacción del lobby israelí en Washington.


La principal preocupación del mundo militar chileno sería una “Enmienda Kennedy II”, esta vez no como una oposición a la dictadura de Pinochet desde el Congreso de Estados Unidos, sino impulsada desde la Casa Blanca –eventualmente por Donald Trump–, como represalia al progresivo deterioro de las relaciones diplomáticas entre el Gobierno del Presidente Gabriel Boric e Israel.

Impulsada en 1976 por el senador demócrata Edward Kennedy, la Enmienda Kennedy fue una disposición legal que prohibió la venta y entrega de armas y asistencia militar de Estados Unidos a Chile, debido a las violaciones de los derechos humanos. La medida transformó a Kennedy en un símbolo de la oposición internacional a la dictadura chilena y condicionó las relaciones bilaterales durante más de una década, incluso en momentos de tensiones fronterizas con países vecinos –como con Argentina en 1978–.

La enmienda solo fue levantada en 1990, tras el retorno de la democracia y el compromiso chileno de resolver el caso del asesinato del excanciller Orlando Letelier.

Hoy, los rumores sobre un posible rompimiento de relaciones diplomáticas con Israel están descartados, tras la última Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric, que, además de abordar la contingencia nacional, estuvo marcada por anuncios internacionales que trascendieron el ámbito de las Relaciones Exteriores e incluyeron –nuevamente, luego del retiro de los agregados militares en Tel Aviv– a la Defensa Nacional.

Primero, el Mandatario, reiterando su condena al accionar del Gobierno de Benjamin Netanyahu en Gaza, decidió patrocinar y poner urgencia al proyecto de ley que prohíbe la importación de productos producidos en “territorios ilegalmente ocupados”.

Y añadió: “He instruido a la ministra de Defensa (Adriana Delpiano) que a la brevedad me presente un plan de diversificación de nuestras relaciones comerciales en materia de defensa, que nos permita dejar de depender de la industria israelí en toda área. En este sentido, respaldamos la propuesta adoptada por el Gobierno de España de decretar un embargo de armas al Gobierno de Israel”.

Expertos consultados por El Mostrador advierten que esta medida podría provocar una reacción adversa de Estados Unidos, que ya veía con inquietud los rumores de un eventual quiebre de relaciones diplomáticas con Israel. Previo a la Cuenta Pública, el sitio The Media Line publicó que Washington estaba considerando sumar el antecedente para excluir a Chile del Programa de Exención de Visas (visa Waiver), aumentar aranceles e, incluso, cerrar su consulado en Santiago. Pero no solo eso.

“Lobby israelí en EE.UU.”

El anuncio del Presidente Boric fue aplaudido en el Congreso –excepto por representantes del Partido Social Cristiano, quienes desplegaron una bandera de Israel como muestra de rechazo– y al menos el proyecto sobre la limitación a la importación de productos contaría con un amplio respaldo que no es solo oficialista.

“Yo aplaudo el proyecto que busca restringir la importación de productos de territorios ocupados”, comentó el senador Francisco Chahuán (RN) al término de la Cuenta Pública, junto con calificar el apoyo al embargo de armas y el retiro de los agregados militares como medidas que “van en la dirección correcta”.

Pero al interior de las Fuerzas Armadas y del aparato de Defensa el anuncio ha sido recibido con reserva. Según fuentes vinculadas al ámbito castrense, existe inquietud ante una eventual represalia por parte de Estados Unidos, aliado y socio estratégico de Israel.

Gilberto Aranda, profesor del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, recalca que, por un lado, Trump ignoró a su aliado israelí en su visita a Oriente Medio en mayo pasado, pero también ha manifestado una clara posición respecto a terceros países.

Esta semana, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, reafirmó el compromiso de su país con el pueblo judío durante la Conferencia Internacional sobre el Combate al Antisemitismo, organizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel. “Hemos implementado una nueva política de visas para evitar el ingreso de extranjeros que fomenten el odio contra nuestra comunidad judía”, declaró Rubio.

El profesor Aranda pone el foco en la importancia de que el Presidente Boric haya hecho una distinción entre el pueblo de Israel y el Gobierno de Netanyahu, además de condenar los atentados de Hamas. Respecto a eventuales represalias, pese a que no se rompieron relaciones diplomáticas –según el académico–, “Estados Unidos podría hacerlo, porque hay un lobby israelí (incidencia israelí sobre la política exterior de EE.UU.) muy intenso y ya hay una posición tomada por el Gobierno de Trump”.

En ese sentido, Aranda dice tener la impresión de que al mundo uniformado y ligado a las Fuerzas Armadas no le va a gustar el anuncio de la diversificación de relaciones comerciales en materia de defensa. “El código es que las relaciones con Israel a nivel militar van a cambiar, van a transformarse, se va a ir por otro lado. Entonces, a los militares, a los uniformados, no les va a gustar. Es un frente interno”, afirma.

“Si Trump te pone en el libro de castigo no te saca tan rápido”

El capitán de corbeta (r) Richard Kouyoumdjian, experto en seguridad, defensa y guerras modernas, también valora que el Presidente Boric haya distinguido entre el pueblo israelí y el Gobierno de Netanyahu y que, al mismo tiempo, condenara los ataques de Hamas. No obstante, sostiene que el eventual plan de diversificación sí generará incomodidad en el mundo militar chileno, principalmente, “porque puede terminar impactando la relación con Estados Unidos”.

Kouyoumdjian recalca que salirse de contratos ya firmados será “muy caro”, sobre todo porque, si bien Chile no tiene grandes relaciones comerciales con Israel, sí hay importaciones clave en relación con armas, telecomunicaciones, sistemas de comunicación y de interceptación satelital.

El experto cree que las relaciones diplomáticas van quedando al mínimo y que no habría una represalia por parte de Israel. A su juicio, un anuncio de este tipo, a meses de terminar el Gobierno (de Boric), es “más como una declaración de principios que una realidad, pero el impacto de lo que podría hacer Estados Unidos, no”. Eso, afirma, “puede tener efecto más duradero, porque si Trump te pone en el libro de castigo no te saca tan rápido”.

Sobre la reacción del Ejército, el general (r) John Griffiths, exjefe del Estado Mayor del Ejército y experto en Seguridad y Defensa Nacional, señala que los militares no se incomodan ni se molestan, pero, profesionalmente, deberían dar una opinión técnica ante las siguientes preguntas: “¿Qué es lo que se va a ver afectado?, ¿en qué dimensión de tiempo?, y ¿cuáles van a ser los costos que esto eventualmente podría tener?”.

“En materia de relaciones internacionales, uno puede tener legítimas convicciones, pero al final del día no son mis convicciones personales las que prevalecen en política exterior, sino que es el interés nacional”, destaca el general (r) Griffiths, junto con llamar a no confundir las cosas: “Uno puede ser muy activo internacionalmente y en la diplomacia, pero cuando empiezas a involucrar el ámbito de la Defensa, tienes que irte con mucho cuidado, porque son relaciones estratégicas de largo plazo y que no es fácil mutar de la capacidad A a la capacidad B”.

“No nos olvidemos que tenemos una flota aérea que es completamente norteamericana de F-16”, resalta el militar en retiro, quien también manifiesta su desacuerdo con el reciente retiro de los agregados militares en Tel Aviv. “Se está mandando una señal fuerte y clara de la relación militar con ese país”, dice.

“No es que todo el equipamiento militar de Chile dependa de Israel”

Matiza la eventual reacción castrense la doctora en Ciencias Políticas y Sociales, directora del Centro de Estudios Europeos de la Universidad de Concepción, Paulina Astroza. “Si las Fuerzas Armadas tienen claro que el mundo está cambiando, que el sistema internacional está viviendo transformaciones importantes y que internacionalmente Israel y EE.UU. están provocando reacciones contra ellos, tendrán –como lo ha hecho el Presidente Boric– que reaccionar no por deseos sino de manera pragmática”, asegura.

Ante la búsqueda de nuevos proveedores en materia de Defensa, debido a que la situación se está volviendo cada vez más compleja para Israel, “incomodidad no debería haber sino criterio con visión de mediano y largo plazo y pragmatismo para cuidar nuestro interés nacional”, dice la académica. Astroza, de todas maneras, expresa cautela ante una nueva justificación para terminar con la Visa Waiver o la imposición de nuevos aranceles.

El director de Asuntos Internacionales de la Universidad Finis Terrae, Alberto Rojas, tampoco descarta consecuencias para Chile ante los anuncios de la Cuenta Pública, teniendo en consideración que el principal aliado de Israel a nivel mundial es Estados Unidos. Y que, además, el presidente Donald Trump tiene una estrecha relación con el primer ministro Benjamin Netanyahu, relación que viene de su primer Gobierno. No obstante, dice que es importante señalar que Chile tiene una diversificación de su equipamiento militar que abarca desde Estados Unidos a diferentes países de la Unión Europea, entre otros. “No es que todo el equipamiento militar de Chile dependa de Israel”, precisa.

“Es importante, sin duda, porque existe una relación antigua y estrecha que está siendo cuestionada, y porque el equipamiento israelí es de altísima calidad. Eso, sin mencionar toda la capacitación que las Fuerzas Armadas han recibido a lo largo de estos años en Israel. En todo caso, llama la atención un anuncio de ese tipo, considerando que estamos hablando de un Gobierno al que le quedan diez meses antes para dejar La Moneda”, añade Alberto Rojas.

De todas formas, según el académico, “es muy probable que el próximo Gobierno, que todo indica que va a ser de alguno de los partidos de la actual oposición, modifique esas medidas a poco de llegar al Gobierno, en marzo del próximo año”.

Chile, que alberga la comunidad palestina más numerosa fuera del mundo árabe, con más de 500 mil personas, ha mantenido una postura crítica creciente hacia Israel bajo el Gobierno de Boric. El Mandatario ha impulsado medidas como el retiro de agregados militares de dicho país, la exclusión de este de la Feria Internacional del Aire y del Espacio (Fidae) y su respaldo a las denuncias contra el primer ministro Benjamin Netanyahu ante Cortes internacionales.

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