Investigación
Relaciones peligrosas: Fiscalía acusa que exministra Vivanco recibió casi 70 millones en coimas
La Fiscalía aseguró que Vivanco falló a favor del consorcio Belaz Movitec, pese a su vínculo con los imputados, y obtuvo pagos por poco más de $69 millones. El último, recibido por ella en la oficina de Mario Vargas y Eduardo Lagos, lugar que visitó en más de una ocasión.
En una verdadera bomba de racimo que amenaza con desbaratar una red de influyentes y poderosos miembros del Poder Judicial se han convertido los antecedentes entregados en la audiencia de formalización de los abogados Mario Vargas y Eduardo Lagos, representantes del consorcio chileno bielorruso Belaz Movitec (CBM), y de la pareja de la exmagistrada Ángela Vivanco, Gonzalo Migueles, formalización que comenzó ayer y que se extenderá por todo el fin de semana, al menos.
En medio de las acusaciones en contra de los imputados por lavado de activos, cohecho y soborno, en el marco del caso “Muñeca Bielorrusa”, fue la propia Fiscal Regional de Los Lagos, Carmen Gloria Wittwer, la encargada de subrayar que detrás de esta red de soborno se encontraba la exmagistrada Ángela Vivanco, a quien el Ministerio Público busca perseguir penalmente, a través de una querella de capítulos que interpuso en su contra esta semana y que ayer fue admitida a trámite en la Corte de Apelaciones de Santiago.
“Vivanco intervino y resolvió en razón de su cargo a favor de Belaz Movitec, tanto en el recurso como en las posteriores peticiones del proceso de ejecución, con infracción a sus deberes estatutarios como magistrada del máximo tribunal, en la medida que no declaró su inhabilidad de oficio respecto de los imputados Vargas y Lagos”, apuntó Wittwer al comienzo de la audiencia.
Si bien la participación de Ángela Vivanco ha sido descrita como fundamental para lograr el pago de Codelco por más de 17 mil millones de pesos en favor del consorcio chileno-bielorruso CBM, lo cierto es que su participación directa en el sofisticado mecanismo de traspaso de fondos para ocultar las coimas no estaba del todo clara. Incluso ella misma aseguró, luego de la detención de su conviviente, que mantenía una economía separada y que ninguno intervenía en el trabajo del otro. “Yo siempre he tenido respeto de él”, sostuvo.
Los hechos, sin embargo, dicen otra cosa. Hasta ahora se sabía que la exministra de la Suprema recibió al menos $57 millones en dos pagos, a través de las cuentas de su pareja y testaferro, Gonzalo Migueles. Uno de ellos por $45 millones, recibidos por este último el 17 de junio de 2024, luego de diversos movimientos que incluyen una casa de cambio y el pago a dos conservadores de Bienes Raíces –Sergio Yáber, de Puente Alto, y Yamil Najle, de Chillán–, quienes luego reembolsaron el total del dinero a la pareja de Vivanco.
El otro desembolso se realizó el 18 de diciembre de 2023, por la suma de US$ 14.000 dólares, equivalentes a poco más de 12 millones de pesos en ese tiempo, luego que la Tercera Sala de la Corte Suprema fallara a favor de CBM, con voto favorable de Vivanco, obligando a Codelco a pagar más de $4 mil millones a la empresa binacional por el costo de mantener sus maquinarias sin movimiento. Parte de este dinero fue utilizado por la pareja Migueles-Vivanco para viajar a Buenos Aires y Brasil, según la Fiscalía.
Pese a que Vivanco logró borrar los mensajes contenidos en su celular, según se expuso en la audiencia de formalización, la indagatoria pudo comprobar la existencia de un tercer pago de características muy distintas a los anteriores, donde la persona encargada de recibir el dinero habría sido la propia exvocera de la Corte Suprema. Según datos aportados por la Fiscalía, el pago se concretó en la oficina de Mario Vargas y Eduardo Lagos, abogados de Belaz Movitec, el 04 de julio de 2023.
“Ella sabía todo”
En efecto, la fiscal Wittwer confirmó que ese día, a eso de las 15:00 horas, la propia exministra del máximo tribunal del país fue a retirar el dinero a las oficinas de los abogados de Belaz Movitec, en El Regidor 66, piso 14, Las Condes, la misma jornada en que fue acogido por la Corte Suprema un recurso de protección interpuesto por la empresa chileno-bielorrusa en contra de Codelco.
“El mismo día de la sentencia, en horas de la tarde, la exministra Vivanco concurrió a la oficina de los abogados Lagos y Vargas, donde le hicieron entrega de una retribución económica por su voto favorable a los intereses de Belaz Movitec, con infracción de deberes del cargo en el fallo de la apelación del recurso de protección”, sostuvo la fiscal del caso.
La suma total que habría recibido Ángela Vivanco –en efectivo, se presume– bordearía los US$ 15.600.
De acuerdo con los antecedentes recopilados por el Ministerio Público, al día siguiente la exsuprema le pasó el dinero a su pareja, quien lo cambió a moneda nacional en la sucursal El Rodeo del banco BCI, recibiendo 12 millones 331 mil pesos, suma que fue depositada en total en su cuenta corriente del mismo banco, la cual ese día estaba con un saldo negativo de 10.790 pesos. Con el dinero, indicó la Fiscalía, Migueles pagó una deuda de tarjeta de crédito por casi 7 millones de pesos. A su línea de sobregiro, en tanto, depositó 5 millones 869 mil pesos.
Considerando este y los otros dos pagos, la exmagistrada habría recibido poco más de $69 millones. Los antecedentes presentados en la audiencia, en todo caso, incorporan otras reuniones que hasta ahora no estaban en el radar de la opinión pública y que sitúan a Vivanco en la oficina de los abogados del consorcio chileno-bielorruso en fechas clave.
El fiscal Marco Muñoz Becker, de hecho, aseguró que en la tramitación de la causa se detectaron posicionamientos georreferenciados de los involucrados –Vivanco, Migueles, Vargas y Lagos– que darían cuenta de encuentros entre ellos, en fechas especiales, y que según antecedentes de la Fiscalía corresponderían a “hitos clave” del proceso judicial.
Dentro de las reuniones mencionadas, el fiscal destacó una en particular, realizada el 1 de julio de 2023, también en la oficina de los abogados que representaban a Belaz Movitec, donde nuevamente acudió Ángela Vivanco.
La cita se realizó dos días después de una tramitación exprés realizada por los abogados de CBM, quienes ingresaron una orden de no innovar en la Corte Suprema, órgano que ordenó dar cuenta de la misma “conjuntamente con todo lo ordenado precedentemente”. Esta frase generó confusión, debido a que no se había ordenado nada en forma previa.
La causa finalmente quedó en acuerdo; es decir, lista para ser fallada, pero su tramitación, según el fiscal Marco Muñoz, se realizó de manera “subterránea”, pues ingresó el 28 de junio, apareció en tabla el día 30 –“sin conocimiento de nadie”, dijo– y, luego, se decretó una orden de no innovar.
Esta maniobra judicial –agregó el fiscal– afectó el debido proceso. “Codelco ni se enteró de que esta causa ingresó y, el día 30, se estaba conociendo y fallando. ¿Por qué es importante esto? Porque ni siquiera tuvo tiempo, por ejemplo, para hacer valer alguna inhabilidad, como pudo haberlo hecho debido a los nexos entre el señor Vargas y la señora Vivanco, que eran de público conocimiento”, explicó el persecutor, perteneciente al Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) de la Fiscalía Regional de Los Lagos.
Muñoz agregó que Vivanco, de acuerdo con el informe de la comisión de ética de la Corte Suprema, “tenía conocimiento previo de las causas del consorcio Belaz Movitec que se verían ese 30 de junio del año 2023 en la sala que presidía”. Según el fiscal, la información que manejaba la ministra provenía de la misma relatora. “Ella (Vivanco) sabía todo lo que pasaba”, aseguró.
No fue la única vez que Vivanco estuvo en las oficinas de los abogados de Belaz Movitec. El 5 de marzo de 2024, entre las 15:15 y las 17:10 de la tarde, su teléfono fue posicionado en una antena cercana a la oficina de Mario Vargas y Eduardo Lagos, ubicada en el número 19 de la calle San Crescente.
La visita de la magistrada se realizó dos días antes de que se resolviera un recurso de queja interpuesto por CMB, votado favorablemente por ella, y que obligó a Codelco al pago de reajustes e impuestos por la desmovilización de las maquinarias. La sentencia reportó a la compañía $157.644.438 por concepto de reajustes y $868.957.558 por concepto de impuesto al valor agregado.
Cabe consignar que la influencia de Vivanco, tal como señaló la Unidad de Investigación de El Mostrador en un reportaje, no solo afectó a su círculo más cercano, sino que también se extendió a Copiapó, donde supervisó personalmente el proceso judicial a través de llamadas, correos electrónicos y viajes a la ciudad, conducta calificada por la Fiscalía como “insólita” y “singular”.
Por cierto, fueron varias las reuniones en casa de la ministra Vivanco donde acudieron los abogados de la empresa chileno-bielorrusa. En uno de esas visitas, incluso, el Ministerio Público determinó que Vargas y Lagos ingresaron un recurso de queja ante la Suprema desde el propio domicilio de la magistrada, el 9 de febrero de 2024.