
PPD se cuadra con acusación constitucional pero se mantiene fuerte crítica interna a la conducción de Quintana
Representantes de todas las bancadas del sector se reunieron para estudiar el escenario político generado con la presentación, decidiendo continuar con el libelo. Sin embargo, aún persiste la polémica que provocó el timonel del PPD con sus dichos contrarios a la acusación.
Aunque la intervención del senador Guido Girardi aplacó la molestia que generaron en el PPD, y particularmente en su bancada de diputados, las declaraciones del timonel del partido, Jaime Quintana —criticando la acusación constitucional presentada en contra del ministro Harald Beyer—, lo cierto es que no consiguió cerrar el capítulo.
Si bien la Concertación decidió dar vuelta la página y abocarse por completo a la defensa del libelo acusatorio, en la tienda no se ha superado el episodio, sólo se está postergando. En ese contexto el senador Ricardo Lagos Weber hizo un llamado perentorio a que el máximo dirigente de su colectividad demuestre “que puede dar una buena conducción, ya que hasta el momento eso es muy criticado”. Por lo pronto, pasado el medio día, se consensuó el discurso con el cual se enfrentará al gobierno, enfatizando que se “consiguió la unidad más amplia de los últimos tiempos para terminar con el lucro en la educación”.
Representantes de todas las bancadas de la oposición se reunieron pasado el medio día en las dependencias de la Cámara, en Santiago. A la cita llegaron la diputada Alejandra Sepúlveda (PRI), sus pares de la DC Ricardo Rincón, el PS Marcelo Schilling, los PPD Marco Antonio Núñez y Tucapel Jiménez, y Sergio Aguiló de Izquierda Ciudadana. En la reunión se analizó el escenario provocado por la presentación de la acusación y el hecho que desde la propia oposición hayan salido voces contrarias a la misma. Sin embargo, se concluyó de que lo mejor, pese a los reparos que aún puedan existir, ha sido el alineamiento del sector con la decisión adoptada. Lo importante ahora es dar una fuerte señal de unidad.
Más allá de la contingencia interna que enfrenta el PPD tras las declaraciones de su presidente, la oposición quiere demostrar la seriedad de la ofensiva y que el sector está unido frente a la misma, ya que el objetivo final es “terminar con el lucro en la educación”. Ello, porque las declaraciones de Quintana provocaron que saliera a la luz el que ha sido un débil flanco de la oposición durante este gobierno: la dificultad de lograr la unidad de criterio y, por tanto, orden, frente a definiciones importantes.
Si bien la idea es intentar enfocar el debate en que es necesario terminar con el lucro en la educación, la actuación de Quintana no se está pasando por alto. No sólo porque la molestia entre algunos diputados va in crescendo, sino también porque nuevos actores se han sumado a la dura crítica que se le ha hecho a la gestión del senador, que aún no cumple un año a la cabeza del PPD.
Ese es el caso de su compañero de bancada, el senador Ricardo Lagos Weber, quien se refirió al tema en duros términos: “En los últimos días hemos visto una conducción errática al interior del partido, lo que ha desembocado en una fuerte disputa entre la bancada de diputados con el presidente” De allí que, a su juicio, lo que se debe hacer es “dejar actuar a la bancada para que ellos puedan decidir y ejercer su rol y ellos deben decidir lo que se debe hacer y cómo deben votar”.
Asimismo, Lagos Weber estima que “la discusión central en esta materia es sobre el lucro y claramente es un tema que va a marcar la discusión y el debate presidencial que se viene”. Pero en un tono mucho más áspero añadió que “espero que el presidente logre encausar los ánimos al interior del partido y demostrar que puede dar una buena conducción, ya que hasta el momento eso es muy criticado tanto interna como externamente al PPD. Ahora debemos mostrar un partido unido frente a la plantilla parlamentaria que debemos levantar para apoyar a la presidenta Bachelet”.
Igualmente el senador aborda el tema del mea culpa al que han hecho alusión no sólo Quintana, sino también otras figuras, señalando que “si de mea culpa se trata, sería bueno saber por qué aquellos parlamentarios que hoy rasgan vestiduras por la no fiscalización del lucro en gobiernos anteriores, respondan por qué no ejercieron su función fiscalizadora respecto del lucro cuando eran diputados”.