
Copa #ElBalónNoTieneGénero: un espacio para el fútbol femenino escolar
La capital de O’Higgins recibió la primera edición de la Copa #ElBalónNoTieneGénero, un torneo escolar que reunió a 84 niñas de seis colegios de la región y que busca visibilizar el fútbol femenino como espacio de inclusión y desarrollo.
En medio de la efervescencia futbolera que vive el país de cara a la Copa Mundial Sub-20, Rancagua fue escenario de la primera versión de la Copa #ElBalónNoTieneGénero, un torneo escolar que busca abrir espacios seguros y libres de prejuicios para que niñas de la región puedan jugar fútbol y disfrutar del deporte.
El certamen, organizado por la Fundación Fútbol Más con el apoyo de Fundación Olivo, reunió a 84 jugadoras de seis establecimientos educacionales de Rancagua, Machalí y Graneros, quienes llegaron acompañadas de sus barras y familiares a las canchas de Futball 7 de la capital regional.
La iniciativa nació en Santiago hace tres años y aterrizó por primera vez en O’Higgins, con la motivación de entregar confianza y protagonismo a las niñas futbolistas.
Un torneo con identidad
Más allá de los goles y resultados, la Copa buscó visibilizar el rol de las niñas en el deporte y romper con el estigma de que el fútbol es solo cosa de hombres. Diego Leficura, coordinador regional de Fundación Fútbol Más, señaló que “nos hemos encontrado con una participación promedio del 50% de niñas en los programas, lo que nos llevó a tomar la decisión de hacer esta gran Copa. Así, podríamos visibilizar el fútbol femenino, darles un espacio de participación a nuestras niñas y que ellas se sintieran protagonistas fuera y dentro de la cancha”.
La jornada contó también con la presencia de autoridades regionales, quienes valoraron la iniciativa en un mes marcado por el fútbol. El seremi de Economía, Darío García, recalcó la envergadura que tiene hoy entregarle el protagonismo a las niñas y mujeres dentro del fútbol, ya que para ellos “el deporte, el fútbol, es turismo y desarrollo económico local”.
A sus palabras, se sumaron las de Nayadeth Ahumada, quien remarcó la relevancia que es romper con el estigma de que solo los niños juegan al fútbol, además de “fomentar, a través del juego, el respeto, el trabajo en equipo y también a la participación”.
Romper estigmas y abrir oportunidades
El campeonato concluyó con la premiación de los tres primeros lugares y la entrega de la “Tarjeta Verde”, un reconocimiento especial al equipo que mejor representó los valores de respeto, solidaridad y alegría que impulsa Fundación Fútbol Más.
De esta forma, Rancagua no solo se vistió de fútbol a la espera del Mundial Sub-20, sino que también dio un paso importante en la promoción del deporte femenino escolar, reafirmando que, tal como lo dice el nombre del torneo, el balón no tiene género.