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Inna Moll entra al Top 12 de Miss Universo y consolida el regreso de los concursos de belleza BRAGA Créditos: Miss Universo

Inna Moll entra al Top 12 de Miss Universo y consolida el regreso de los concursos de belleza

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Con Inna Moll, Chile suma otra participación destacada y confirma que la industria local vive un tiempo de revitalización, donde las candidatas se convierten en referentes, logran altos rating e impacto en redes sociales y se vuelve a ser parte de la cultura pop chilena. México ganó esta edición.


La chilena Inna Moll (28) volvió a poner el nombre del país en lo alto al clasificar entre las 12 semifinalistas del Miss Universo 2025, un logro que se enmarca en un momento particular: el renacer del interés por los concursos de belleza en Chile, una industria que en los últimos años ha recuperado protagonismo, audiencia y figuras influyentes.

La 74° edición del certamen, realizada en el Impact Arena de Pak Kret en Bangkok, reunió a más de un centenar de participantes. Entre ellas, Moll —cuyo nombre real es María Ignacia Moll Bilbao— fue destacada desde el inicio, convirtiéndose además en la primera candidata anunciada para el Top 12, un hito celebrado tanto por la organización local como por los seguidores chilenos, que nuevamente respondieron con altos niveles de sintonía.

Un revival de los concursos de belleza

Tras años de menor atención mediática, los concursos de belleza viven en Chile un renacer sostenido. La combinación de redes sociales, mayor profesionalización de las candidatas y la emergencia de participantes carismáticas ha devuelto al Miss Universo Chile un lugar relevante en la conversación pública.

Las últimas representantes —como Celeste Viel, Sofia Depassier, Daniela Nicolás y Emilia Dides antes que ella— lograron proyección mediática, múltiples apariciones televisivas y millones de interacciones digitales. Sus participaciones revivieron el interés por el certamen, impulsando debates, audiencias competitivas y una comunidad activa que sigue cada etapa de la competencia internacional.

Este año, la transmisión de Miss Universo volvió a marcar altas cifras de rating, consolidando la tendencia: Chile ha recuperado el entusiasmo por uno de los eventos televisivos globales más longevos.

Inna Moll: seguridad, experiencia y presencia escénica

 

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Inna Moll se transformó en la candidata ideal para consolidar este repunte. Su desempeño en Bangkok -no exento de polémicas- fue calificado como uno de los más sólidos de la jornada:

  • En traje de baño, mostró dominio técnico y una pasarela segura que destacó entre las participantes.
  • En el desfile de gala, brilló con un estilismo elegante que reforzó su experiencia internacional.

Su actuación no solo le permitió ingresar al Top 12, sino también posicionarse como una de las favoritas regionales en las coberturas especializadas.

Su calma en su participación demostró la experiencia que tiene sobre la pasarela, en donde comenzó de niña. De hecho, a los 18 años, dejó Chile para vivir sola en un departamento con otras modelos. La lejanía de su familia, la competitividad y un ritmo exigente marcaron sus primeros años, pero también  la hicieron más fuerte y disciplinada.

 

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México la ganadora

Los concursos de belleza han vuelto pero con mujeres que sacan la voz. La gran ganadora de la noche fue la representante de México, Fátima Bosch, quien protagonizó uno de los momentos más virales de la edición, cuando fue mandada a callar por el tailandés Nawat Itsaragrisil, encargado de organizar el certamen en Bangkok.

El hecho desató una ola de críticas contra Nawat, incluyendo pronunciamientos de ONU Mujeres y de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum. La delegada de México exigió respeto y el tailandés, que negó haberla insultado pese al video del momento, se disculpó por lo sucedido.

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