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Desde el Colegio Médico y 15 sociedades científicas pidieron al Gobierno, entre otras medidas urgentes, suspender el permiso de vacaciones, vigente hasta el 31 de marzo, incentivos a las empresas para implementar teletrabajo y diferir horarios en las que no tengan esa opción, además de limitar las actividades de alto riesgo en espacios cerrados. Paralelamente, insistieron en que es imperativo mejorar la comunicación de riesgo hacia las personas, y la estrategia de Testeo, Trazabilidad y Aislamiento, «la medida más relevante para cortar la cadena de transmisión sin someter a la población a medidas restrictivas con baja aceptación y adherencia».
Especialistas de la salud agrupados en 15 sociedades científicas de Chile, hicieron pública una carta con algunas recomendaciones urgentes en el contexto de lo que calificaron como una «frágil situación sanitaria» a causa de la pandemia de COVID-19. La alerta en buena parte proviene de las cifras conocidas en las últimas horas, que consignan un 94 % de ocupación de camas críticas y, en el caso de la Región Metropolitana, la presencia de 10 mil casos activos. Un volumen muy cercano al que se registró el año pasado, en el punto más alto de la emergencia.
Los médicos y científicos, agrupados en la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, la Sociedad Chilena de Medicina de Urgencia, la Sociedad Chilena de Infectología, la Sociedad Chilena de Epidemiología y la Sociedad Chilena de Infectología, entre otras, además del Colegio Médico, advirtieron sobre el «difícil momento epidemiológico y sanitario que atravesamos», según consigna la misiva que se puede revisar aquí
Las y los especialistas alertaron sobre las limitaciones de la capacidad hospitalaria que, a pesar de un plan de expansión que contempla el Minsal, podría verse superada. Pero, sobre todo, llamaron la atención respecto a «un aumento permanente en la cantidad de nuevos casos, a lo que se suma un escenario de mayor movilidad, modificaciones del plan ‘Paso a paso’ con apertura de casinos de juego, cines y restaurantes, y un futuro cambio estacional que nos obliga a estar preparados a implementar medidas con urgencia», expresaron.
En este sentido, pidieron a las autoridades implementar cambios en el plan Paso a Paso para priorizar contener lo que definieron como una ola de gran magnitud, que debe contenerse a tiempo. Por eso, pidieron a las autoridades «privilegiar lo sanitario en el plan ‘Paso a Paso’, limitando las actividades de alto riesgo en espacios cerrados y con poca ventilación y permitir aquellas de bajo riesgo en espacios abiertos y ventilados, manteniendo una coherencia entre las actividades productivas y las libertades individuales», puntualizaron, en referencia a ciudades cercanas con distintos grados de restricciones, como Viña del Mar y Valparaíso, y al funcionamiento de negocios de afluencia masiva, como centros comerciales o cines.
Por otra parte, desde las sociedades científicas, recordaron que es necesario endurecer las restricciones a los viajeros y suspender el permiso de vacaciones, que está vigente hasta el 31 de marzo y que «ha tenido un enorme impacto en la movilidad de las personas y, con ello, en la grave situación epidemiológica actual», dijeron.
Conscientes del dilema que implica conjugar la emergencia sanitaria con el funcionamiento de la economía, los especialistas propusieron «establecer incentivos o subsidios que faciliten la obligación de las empresas de adoptar protocolos COVID-19 en los lugares de trabajo y/o implementen teletrabajo, y diferir horarios de ingreso en empresas que no tengan opciones de mantener el teletrabajo», plantearon.
Por cierto, estas recomendaciones incluyen fortalecer aún más la estrategia de «Testeo, Trazabilidad y Aislamiento», que consideraron «la medida más relevante para cortar la cadena de transmisión sin someter a la población a medidas restrictivas con baja aceptación y adherencia».
Por último, la carta consigna que «como Colegio Médico y sociedades científicas estamos muy preocupados por la magnitud de esta ola y sus potenciales consecuencias. De no tornar medidas más efectivas en el control de casos en estos momentos, podemos lamentar no solo más enfermos graves y muertes, sino tener que afrontar la posibilidad latente de no poder atender a todos los pacientes que lo requieran», enfatizaron.
