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Polémica por millonario gasto en F-16: Gobierno afirma que se trata de una operación que estaba postergada desde inicio de año por la pandemia MERCADOS

Polémica por millonario gasto en F-16: Gobierno afirma que se trata de una operación que estaba postergada desde inicio de año por la pandemia

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El subsecretario de Defensa Cristián de la Maza salió al paso del polémico anuncio conocido ayer acerca de la decisión, por parte de la Agencia de Cooperación en Seguridad de Defensa de Departamento de Defensa de EE.UU. (DSCA en sus siglas en inglés), de aprobar una posible venta militar extranjera al gobierno de Chile de equipos y servicios relacionados para la Modernización de Aviones F-16 por un costo estimado de US$ 634.70 millones.


Este jueves se dio a conocer que el departamento de Estado de Estados Unidos aprobó el plan de Chile para adquirir equipamiento que actualice y mejore la capacidad de su flota de aviones F-16, por un monto total de 634.7 millones de dólares. El anuncio fue realizado por la Agencia de Cooperación en Seguridad de Defensa (DCSA) a través de un comunicado, indicando que el acuerdo comprende al menos 24 puntos, desde nuevo armamento y equipos de comunicación, hasta partes de repuesto y servicios de capacitación.

Ante la noticia el subsecretario de Defensa, Cristián de La Maza, salió a dar explicaciones por la polémica noticia. A través de un comunicado, el funcionario de Gobierno señaló que el proyecto de actualización tecnológica de los actuales aviones F16 de la FACH comenzó el 2012 y, si bien se encuentra validado técnicamente y estaba a la espera de asignación de recursos, «a inicios de 2020 se tomó la decisión de postergarlo debido a la emergencia sanitaria y la necesidad de priorizar recursos del Estado en otras áreas más urgentes».

En la misiva se explica además que los precios indicados en el comunicado de la Agencia de Cooperación en Seguridad de Defensa (DCSA) «son referenciales y mayores a los considerados en el proyecto del Ministerio de Defensa el que, a su vez, consideraba fases y pagos parciales en un período mayor a 9 años».

Cabe mencionar que, de acuerdo al documento de la DCSA, la adquisición contempla 19 sistemas de visualización montados en los cascos de los pilotos (HMD), que les permite ver los instrumentos de navegación sin necesidad de bajar la vista al tablero, y 6 bombas inertes MK-82 de 227 kilos cada una, usadas para entrenamientos.

Autorización del Senado

«El 22 de agosto del año 2006, presenté un proyecto de ley que confiere atribución exclusiva al Senado para autorizar la compra o venta de material bélico, el que se encuentra durmiendo en la Comisión de Defensa, por lo que hoy he pedido a su presidente, Pedro Araya, lo ponga en tabla a la brevedad». Con esta declaración el senador Alejandro Navarro exigió, a raíz de la contingencia, que se pida autorización a la Cámara Alta para este tipo de adquisiciones.

De acuerdo al senador por la Región del Biobío, “dicha Reforma Constitucional, establece como artículo único: Agrégase un nuevo N° 11 al Artículo 53 de la Constitución Política de la República de Chile: “Autorizar la compra o venta, importación o exportación, de armamento y equipamiento militar, al inicio de cada legislatura ordinaria, previa propuesta del Presidente de la República”

«Pues es necesario que todos estos gastos se transparenten y los chilenos y chilenas sepan cómo se gasta el dinero en las Fuerzas Armadas en democracia», agregó Navarro. Por ello, continuó, «el Senado debe autorizar la compra de material bélico. Pues cuando se gastan más de 600 millones de dólares en refaccionar aviones de guerra como los F-16, cuando hay prioridades más importantes como políticas sociales en salud, educación, previsión, vivienda y en medio de una pandemia histórica, es claro que estas compras deben ser transparentadas a través de una ley».

Navarro finalizó señalando que, “el World Factbook de la CIA, aquella famosa página web de la agencia estadounidense que muestra los gastos e ingresos generales de todos los países del orbe, indica que Chile destina un 1.9% (año 2018) de su Producto Interno Bruto en asuntos militares, lo que lo sitúa en el lugar 49° en el mundo”.

“Esto lo confirma el Banco Mundial y distintos organismos a nivel internacional, que también ratifican que países como Finlandia, Noruega o Suecia, gastan apenas un 1.4, 1.6 y 1.0% de su PIB respectivamente en esta materia. Por ello, es hora de que el Senado vise las compras de material bélico, por lo que esperamos nuestro proyecto ingresado el año 2006 sea discutido a la brevedad. Todo el país estará de acuerdo”, sentenció el senador y fundador del Foro Latinoamericano de DDHH.

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