No lo podían creer los dirigentes. Y más de alguno vio en la ausencia de autoridades del Ministerio del Trabajo la prueba de que la Reforma Laboral se ha ido transformando en un tema que causa desasosiego.
El seminario se realizó el viernes pasado bajo el título “El nuevo modelo laboral en Chile”, organizado por la Universidad Alberto Hurtado, RH Management y el Instituto de Seguridad del Trabajo, en la sede de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Los dirigentes de la CUT llegaron. También los representantes del sector privado. Pero las cabezas del Ministerio del Trabajo brillaron por su ausencia. La ministra Javiera Blanco se excusó porque debió viajar a Argentina y se suponía que la reemplazaba el subsecretario Francisco Díaz, quien también se disculpó, pasándole la posta al subsecretario de Previsión Social, Marcos Barraza, el que se decretó enfermo. Finalmente, acudió a la cita el asesor de Barraza, Pedro Aravena.
Esto habría causado molestia entre los dirigentes sindicales. La presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, fiel a su disciplina, no se salió de cuadro; sin embargo, el que estuvo francamente rupturista fue el vicepresidente de la multisindical, Nolberto Díaz.
De ahí que la marcha convocada para hoy pretende presionar al gobierno para que cumpla su promesa de enviar el proyecto de Reforma Laboral. La ministra Blanco había dicho que se mandaría la iniciativa legal en octubre, pero el ministro Álvaro Elizalde salió ampliando el plazo a una fecha más ambigua: cuarto trimestre de este año. En Hacienda, en tanto, hay varios que están por desactivarla.
