Las posturas de los candidatos en la segunda vuelta electoral en Argentina, Javier Milei y Sergio Massa, y lo que provocan en los votantes, son tema en la prensa en alemán de esta semana.
“Rabia vs. miedo”, titula el diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung un artículo sobre el panorama en Argentina antes de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales
“Muchos argentinos están desesperados, y eso es utilizado por los candidatos en la campaña electoral. (…) En medio de esta crisis, se libra una batalla por la presidencia en la segunda economía más grande de Sudamérica entre el candidato del gobierno y ministro de Economía, Sergio Massa, y el populista libertario Javier Milei. Muchos observadores describen las elecciones del domingo como las más importantes desde la vuelta de la democracia. En las últimas encuestas, los dos candidatos iban cabeza con cabeza, más recientemente con ligera ventaja para Milei.
Hace una semana que no se permite la publicación de encuestas. Argentina está volando a ciegas en lo que respecta a las elecciones, y su economía continúa cayendo en picada. (…) El casi 30 por ciento de los electores que votaron por Milei en la primera vuelta no quieren el cambio prometido por la oposición conservadora tradicional, sino el cambio radical que propone el libertario de extrema derecha. (…)
Pero los planes de Milei, su inexperiencia política y su imprevisibilidad asustan a muchos argentinos, y no sólo a quienes reciben beneficios sociales del Estado. Massa sabe abordar bien ese miedo. (…) Para la segunda vuelta, Massa recibió ayuda de los expertos de la campaña del presidente brasileño, Lula da Silva. La campaña negativa contra Milei se convirtió en la principal estrategia en la fase final.
Massa apenas tiene éxitos que demostrar. En el último debate televisivo, mientras Milei a menudo parecía irritado, Massa se mostró como un estadista decidido y tranquilo. Según la mayoría de los analistas, Massa salió victorioso del debate. Pero eso fue el domingo pasado. Y una semana es larga en Argentina.”
El periódico Zeit Online se plantea esa pregunta, y la responde del siguiente modo:
“Los mayores desafíos políticos de Argentina son de orden económico: el país ha estado sumergido en una profunda crisis económica durante años. (…) En la primera mitad del siglo XX, Argentina todavía era considerada uno de los países más ricos del mundo. Hoy, alrededor del 40 por ciento de la población vive en la pobreza. La corrupción, una gran economía sumergida y el inflado aparato estatal también se consideran problemas importantes en Argentina. (…)
El resultado de la segunda vuelta es difícil de predecir. Algunas encuestas actuales dan una ligera ventaja a Sergio Massa, quien, o largo de su carrera tomó diferentes rumbos políticos y asumió varios cargos.
Milei es considerado un populista de derecha, y se autodenomina ‘anarcocapitalista’. (…) Entre otras cosas, cuestionó la información difundida por organizaciones de derechos humanos de que hasta 30.000 personas habrían desaparecido durante la dictadura.
“Una historieta se vuelve un asunto político”
El matutino suizo Neue Zürcher Zeitung aborda la aparición en 2024 de una serie de Netflix sobre la historieta “El eternauta”, escrita por Héctor Oesterheld, secuestrado y asesinado por la junta militar, en el marco de la negación de la cifra de desaparecidos en la dictadura militar (1976-1983) por parte del candidato Javier Milei y su candidata a vicepresidenta, Victoria Villarruel.
Javier Milei quiere poner fin a la aparentemente interminable miseria económica de Argentina. Durante las actuaciones posa con una motosierra ruidosa y muestra cómo quiere proceder. Victoria Villarruel también quiere un cambio en la política de la memoria. Desde el fin de la dictadura militar en 1983, los gobiernos de derecha y de izquierda han adherido a un consenso: la dictadura militar de 1976 a 1983 fue el capítulo más sangriento de la historia argentina. Y el recuerdo de esto sigue vivo en las obras de arte, incluido el cómic más famoso de Argentina, ‘El Eternauta’, escrita por Héctor Oesterheld, uno de los desaparecidos.
Pero a Victoria Villarruel la persiguen otros recuerdos. Ella creció en una familia de oficiales del Ejército que ocuparon altos cargos en la junta militar de la dictadura. Su abuelo tenía amistad con los fascistas españoles y ella las tiene ahora con el partido español de extrema derecha Vox. (…) Los Montoneros mataron a 1.500 personas en sus ataques, entre ellos 600 civiles. Según el informe de Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP) , encargada por el gobierno argentino, la junta militar es responsable de la desaparición de hasta 30.000 personas entre 1976 y 1983.
De Oesterheld solo se sabe que fue secuestrado en 1977 y ejecutado en 1978. También sus cuatro hijas, que se habían unido a la organización guerrillera Montoneros, fueron asesinadas por las fuerzas de la dictadura cívico-militar.”
Texto de Cristina Papaleo