
Expira el histórico acuerdo nuclear con Irán, pero la contienda atómica prevalece
Ya estaba moribundo desde la retirada unilateral de Estados Unidos en 2018 y la reimposición de sus sanciones contra Irán. Ahora la República Islámica considera que ya no está sujeta a limitaciones sobre su programa nuclear, como establecía el convenio.
El acuerdo nuclear de 2015, firmado entre Irán y las potencias mundiales, llegó a su fin este sábado, pero la contienda respecto al programa atómico de Teherán vuelve al punto cero, con las sanciones previas al pacto restablecidas en su contra.
Una década después de la ratificación en la ONU del histórico acuerdo nuclear firmado entre Irán, por un lado, y Alemania, Francia, Reino Unido, Rusia, China y Estados Unidos, por otro, el pacto que prometía poner fin a años de pugna sobre el programa atómico de Teherán expiró.
Con ello, la República Islámica considera que ya no está sujeta a limitaciones sobre su programa nuclear, como establecía el convenio.
“Todas las disposiciones del acuerdo, incluidas las restricciones previstas para el programa nuclear iraní y los mecanismos relacionados, se consideran terminadas”, señaló el Ministerio de Exteriores iraní en un comunicado.
Al hacer énfasis en el fin del acuerdo nuclear y sus mecanismos, la cartera de Exteriores iraní hizo referencia también al dispositivo que permitió a Francia, Alemania y Reino Unido (E3) restaurar automáticamente las sanciones de la ONU contra el país persa el pasado 28 de septiembre.
Los tres países europeos adoptaron la medida a finales de agosto, al considerar que Irán no había cumplido con sus compromisos en el acuerdo nuclear, incluido el límite de enriquecimiento de uranio del 3,67 %, que Teherán ha superado, alcanzando el 60 %.
“Las acciones hostiles de Alemania, Reino Unido y Francia (…) que, con mala fe y sin respetar los procedimientos legales, intentaron restablecer resoluciones derogadas del Consejo de Seguridad, no deben considerarse en modo alguno con valor o efecto jurídico y ejecutivo”, aseveró el aparato diplomático iraní.
Al recordar que Rusia y China, como miembros permanentes del Consejo de Seguridad, rechazaron la iniciativa del E3 para restaurar las sanciones antiiraníes, el Ministerio de Exteriores de Irán llamó a los Estados miembros de la ONU a que “no reconozcan ni den efecto legal a los intentos de los tres países europeos”.
Estas sanciones internacionales establecen un embargo de armas y el congelamiento de activos, y autorizan inspecciones de aviones y buques iraníes en aguas internacionales, además de imponer limitaciones bancarias y financieras. Con ello, el país persa y el mundo regresan al punto cero, es decir, a la misma situación en la que estaban antes de la firma del acuerdo nuclear.
Acuerdo fracasado
Aunque el acuerdo nuclear expiró hoy, pero ya estaba moribundo desde la retirada unilateral de Estados Unidos en 2018 y la reimposición de sus sanciones contra Irán.
El Ministerio de Exteriores iraní recordó hoy esa acción, volvió a culpar a Washington por el fracaso del pacto nuclear y denunció el incumplimiento de compromisos por parte de Europa posteriormente.
“Estas acciones socavaron la credibilidad y efectividad del acuerdo nuclear, que en sus primeros años había demostrado ser un logro significativo de la diplomacia multilateral”, destacó el Ministerio de Exteriores iraní en su comunicado de este sábado.
Tras la salida de EE. UU. del acuerdo, Irán respondió meses más tarde con la reducción gradual de sus compromisos, llegando a almacenar 440 kilos de uranio altamente enriquecido hasta antes de la guerra de 12 días con Israel en junio pasado, en la que se involucró también Washington con bombardeos contra tres instalaciones nucleares iraníes.
Este conflicto tuvo lugar en medio de las negociaciones nucleares entre Irán y EE.UU., las cuales han quedado estancadas desde entonces.
Ante la falta de pasos diplomáticos concretos para sellar un nuevo acuerdo, los países europeos decidieron activar las sanciones de la ONU contra el país persa, aunque insistieron en que la vía diplomática sigue abierta, algo a lo que Teherán también se ha mostrado dispuesto.
Ali Vaez, director del Proyecto Irán del centro de investigación International Crisis Group, considera que la muerte del acuerdo nuclear firmado hace una década no es del todo mala.
“Es bueno que el acuerdo nuclear haya muerto. Por fin, ambas partes pueden pasar página y proponer nuevas ideas”, escribió en X.