
El acuerdo para un desarrollo sostenible
Estamos frente a una oportunidad de hacer las cosas bien. Magallanes tiene una oportunidad histórica: su potencial eólico único la posiciona como líder mundial en hidrógeno verde. Pero esa oportunidad debe construirse escuchando al territorio, respetando su patrimonio natural.
En mi reciente visita a Punta Arenas, con motivo del Pacto de Magallanes, tuve la oportunidad de anunciar una gran noticia. Junto a cinco empresas que quieren desarrollar el hidrógeno verde en la Región de Magallanes, nos sentamos a la mesa en un salón de la Delegación Presidencial, en donde también participa el Gobernador Regional y los ministerios de Economía y Energía. El anuncio se trata de la voluntad de avanzar hacia un Acuerdo de Producción Limpia (APL) que tiene como foco la protección de la biodiversidad de la región.
Junto a Nordex Green Hydrogen, Grupo EDF, Consorcio Austral y HNH Energy estamos dando pasos decididos para alcanzar un inédito convenio público-privado para generar las condiciones que permitan contribuir a alcanzar mayores niveles de cuidado de nuestra avifauna, en el marco del desarrollo sostenible de esta industria estratégica para la descarbonización de las industrias que hoy utilizan fuentes fósiles, así como para la reducción de emisiones de GEI, compromiso internacional en la lucha contra la crisis climática.
Este APL incluye varias etapas que se inician a partir de la manifestación de interés de las empresas, para luego avanzar en el diagnóstico, la negociación y la firma. Todo este proceso será organizado por la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático. Este trabajo debería permitir que la disposición territorial de los parques eólicos concilie con las rutas aéreas y sitios de nidificación de aves que vuelan grandes distancias, como también en la viabilidad de la producción eléctrica renovable que requiere la industria.
Cabe recordar que en la región de Magallanes existen al menos cuatro aves migratorias en peligro que requieren de mayor cuidado: canquén colorado, zarapito de pico recto, chorlo de Magallanes y playero ártico. En esta línea, es importante destacar que no solo estamos incluyendo a privados y el Estado, sino también a organizaciones ambientales, como Manomet Conservation Sciences.
Estamos frente a una oportunidad de hacer las cosas bien. Magallanes tiene una oportunidad histórica: su potencial eólico único la posiciona como líder mundial en hidrógeno verde. Pero esa oportunidad debe construirse escuchando al territorio, respetando su patrimonio natural y contribuyendo con estándares de protección ambiental que sean ejemplo para el mundo. El desarrollo sostenible la entendemos de esta manera: así como en el norte de nuestro país la industria del litio contará con salares protegidos, en nuestro sur la industria del hidrógeno verde tendrá un acuerdo voluntario inédito para la protección de la biodiversidad.
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