Tras críticas por su salida del Mineduc
«Le pone la firma al programa y posteriormente se desentiende de las cosas que están ahí. Que se me diga desleal, entonces Ignacio Walker es el más desleal de los desleales. La piedra en el zapato del Gobierno no es la oposición, está en su coalición y no son los partidos, son figuras como Walker que han bloqueado proyectos importantes para el Gobierno». indicó el militante de Revolución Democrática.
El conflicto que se desarrolló tras la renuncia de dos hombres claves del Mineduc, pertenecientes al partido del diputado Giorgio Jackson, hoy sumó la respuesta de Crispi ante el emplazamiento de Walker respecto a la salida de RD desde el gobierno. La queja de Walker surge tanto porque les habían abierto un espacio al interior del Mineduc como también por haberse omitido en la competencia por un cupo parlamentario para Santiago, cuando fue electo Jackson.
Crispi calificó a Walker como «el más desleal de los desleales con la Presidenta». «Le pone la firma al programa y posteriormente se desentiende de las cosas que están ahí. Que se me diga desleal, entonces Ignacio Walker es el más desleal de los desleales. La piedra en el zapato del Gobierno no es la oposición, está en su coalición y no son los partidos, son figuras como Walker que han bloqueado proyectos importantes para el Gobierno», dijo en T13 Radio.
«Cuando hay traición se supone que hubo un acuerdo que traicionamos, pero eso no ocurrió (…). ¿Quiénes son los que, en los momentos más críticos de la Reforma Educacional, han salido a poner los pechos a las balas? Somos nosotros, en los momentos más duros del proyecto de inclusión salimos a entregar volantes», agregó Crispi.
Estas declaraciones se dan en el marco de la discusión por la Reforma a la Educación Superior, uno de los proyectos primarios para el Gobierno de la Nueva Mayoría. Materia en la que el senador Walker ha sido activo y crítico, no sólo con esta reforma, sino también con la de educación escolar y la gratuidad.
A pocos meses de iniciado el Gobierno de la Nueva Mayoría, Walker ya marcaba sus puntos de divergencia con la reforma: «Nunca pensé que íbamos a transformar el Mineduc en un gestor inmobiliario», dijo a El Mercurio en junio del 2014. Días después desde La Moneda daban una señal clara de desaprobación a sus palabras y lo «amenazaban por convivencia».
Además, en el marco de la discusión por la Gratuidad Universitaria, desde un inicio Walker enfatizó que no estaba de acuerdo en que hubiera gratuidad universal, sino que esta debería estar focalizada en aquellos que tienen menos recursos. «Soy gradualista y no partidario de las metas inalcanzables», señaló el 10 de septiembre de 2015. Este año ratificó su postura y señaló que «creo en una gratuidad en la medida de lo posible».
Otro punto de distanciamiento que perfiló desde el inicio del proyecto de reforma es la penalización del lucro. A pesar de que ha señalado estar en contra de que se lucre en la educación ha sido claro en que el tope en cuanto a las sanciones es quitar la personalidad jurídica a la institución que incurra en la falta, pero de ninguna manera cárcel para quien lucre, tanto a nivel de educación superior como a nivel de educación escolar.
Además, no solo ha marcado su disidencia a nivel de materia educacional, también lo hizo al criticar el actuar de La Moneda ante el caso Caval, su posición ante el proyecto de aborto bajo tres causales y al sentenciar que «en muchos sentidos la Concertación no ha muerto».
