“Jóvenes tienen razón en estar molestos con el CAE”, dice y apunta a culpas de Banco Estado
El ex Presidente asegura que está dispuesto a competir en primarias y sobre el tema previsional asegura que requiere importantes cambios, como introducir el «cálculo actuarial», que significa considerar la real esperanza de vida que tienen las personas según su situación socioeconómica y así mejorar las pensiones. «No he dicho que las AFP no dan para más», afirmó.
Luego de entregar una declaración pública en la que reconoció su disposición a ser candidato presidencial, el ex Presidente Ricardo Lagos, conversó con Radio Cooperativa, donde aclaró su posición y afirmó que está dispuesto a ir a elecciones primarias. “Eso está fuera de discusión, si para ser candidatos en un país lo normal es hacerlo hoy a través de primarias que son legales”, dijo. Al mismo tiempo, sobre las razones para explicitar sus intenciones un año y medio antes de terminar el actual Gobierno, Lagos explicó:
“No es fácil hacer esa declaración, la hice porque me salió de adentro. No podía aceptar que el tema de debate sea si se atreve Lagos o no se atreve (…) no estoy sacando cuentas menores. No son las encuestas las que me guían a tomar esta actitud, es un camino difícil, pero lo hago en la convicción de que es una forma de ayudar a Chile”, manifestó.
Respecto de la continuidad de las reformas de la Nueva Mayoría en una eventual segunda administración suya, el ex Jefe de Estado aseguró que “el compromiso es continuar con esas reformas, muchas de las cuales van a estar en pleno proceso» y acotó que «siempre yo digo que se construye sobre lo que dejó el antecesor. Siempre he estado apoyando lo que me parece que hay que apoyar, y siempre las cosas son perfectibles”.
Lagos no esquivó la reticencia que despierta en el electorado más juvenil: «Creo que es sano en un país una juventud protestataria. Porque quiere decir que quieren introducir cambios y en toda sociedad es bueno siempre que esté cmbiando. Lo segundo, creo que los jóvenes, como todo joven, tienen que construir su propia épica. Y cada generación tiene su propia épica. Cuando yo tenía 20 años y me hablaban de Pedro Aguirre Cerda, algo que había ocurrido 20 años antes, para mí era historia. Y, por lo tanto, para la gran mayoría de los jóvenes, este señor que dicen que no sé qué cosa hizo en la dictadura de Pinochet, es pura historia»
En este sentido respondió a una de las críticas más repetidas hacia su Gobierno: la implementación del Crédito con Aval del Estado (CAE) para financiar la educación superior.
«Creo que los jóvenes tienen razón al estar molestos con el CAE. Yo si fuera jóven estaría contra el CAE. ¿Por qué? Porque el CAE se hace en un momento en que no hay recursos para que esos jóvenes puedan ir a la universidad. Con el agravante que, con el sistema que había, muchos de esos jóvenes después encontraron que tenían una educación que no era a la que aspiraban y que no les permitía insertarse. Y en consecuencia la modalidad que se había establecido, me parece importante, era cuánto de su ingreso usted iba a destinar a pagar. Y ahí hubo un error de cálculo garrafal», reconoció.
Sobre el tema de las pensiones, el ex Presidente sacó a relucir sus conocimientos de economía para explicar su posición: «Hoy hay un cuadro absolutamente distinto. Y yo creo que sería lamentable que el esfuerzo que se hizo cuando hubo la cadena nacional de la Presidenta… los dos ex Presidentes, yo y el Presidente Frei, respaldamos esa iniciativa como un primer paso. Pero creo que hay un tema que no está en el debate: los cálculos actuariales. El cálculo actuarial quiere decir que usted va a pagar una pensión y calcula cuál es la esperanza de vida en ese momento en el país. Entonces, todos los que llegan a los 60 años, de ahí para adelante, ¿qué esperanza de vida tienen? Y eso se va actualizando de acuerdo a lo que van indicando las cifras y obviamente la población va envejeciendo», explicó.
«¿Cual es el problema? Que la gente más modesta vive menos tiempo que la gente más acomodada, entonces si a usted le dicen la esperanza de vida, después de los 60 años, son 20 años más, esos 20 años más esconden una diferencia: los más modestos van a vivir 17 años más y los más ricos 25. Entonces, esos tres años menos se usan para pagarles a los que viven 25», agregó.
Pero, finalmente, sobre este tema enfatizó: «No he dicho que las AFP no den para más, pero hay que introducir cambios», afirmó.
