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Santiago Cafiero, diputado argentino: “El experimento liberal libertario de Milei fracasó, ya está” MUNDO

Santiago Cafiero, diputado argentino: “El experimento liberal libertario de Milei fracasó, ya está”

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Francisca Castillo
Por : Francisca Castillo Periodista El Mostrador
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El parlamentario trasandino señaló que, además de los impactos sociales de la política macroeconómica y el escándalo de corrupción que involucra a Karina Milei, la unidad de la oposición también fue elemento clave en la derrota que sufrió el Gobierno en las elecciones legislativas de Buenos Aires.


El diputado peronista y excanciller de Argentina, Santiago Cafiero, analizó el escenario político en el país trasandino y los factores que incidieron en los resultados de las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, que significaron una importante derrota para el Gobierno de Javier Milei. 

El pasado domingo, los peronistas se impusieron con un 47,25% de los votos, superando por más de 13 puntos el resultado de la alianza entre la Libertad Avanza y el PRO, que obtuvieron un 33,72%.  

En conversación con El Mostrador, el parlamentario señaló que, además de los impactos sociales de la política macroeconómica y el escándalo de corrupción que involucra a la hermana del líder libertario, Karina Milei, la unidad de la oposición también fue incidente. 

“Una cosa que no es menos cierta, los intendentes peronistas, el gobernador peronista, son, en definitiva, los que le ponen rostro y los que dan respuesta al impacto social negativo de las políticas de Milei en la Argentina”, dijo. 

Asimismo, Cafiero aseguró que, si bien las próximas elecciones legislativas de octubre pueden ser más parejas, no tiene dudas de que el peronismo va a resultar ganador en los comicios.

“Me parece que acá hay una apuesta a un cambio cultural, político y a la construcción de una nueva hegemonía política en Argentina. Esa fue la apuesta de Milei y de los libertarios, que ya ha fracasado”, agregó. Esto, a propósito de cómo estas tendencias podrían repetirse en las elecciones presidenciales chilenas, y los errores que llevaron a la derecha tradicional argentina a caer en la irrelevancia tras el pacto electoral con la Libertad Avanza. 

-¿Cuáles fueron los factores que incidieron en el resultado de las elecciones legislativas en Buenos Aires?
-Por un lado, lo que hay que entender es que el Gobierno ya venía mal hace rato. La política macro, que es una política anclada en un ajuste fiscal muy fuerte, por supuesto que tiene un costo social alto. ¿Cuál es el costo social? Recortes de programas, por ejemplo, para enfermos oncológicos o el de subsidios y prestaciones a personas con discapacidad.

En ese marco además, se conocen audios donde un abogado personal del presidente Milei está autoincriminándose con respecto a la sobrefacturación de medicamentos para personas con discapacidad. Es decir, algo absolutamente indigno, repudiable. Y aparte involucra a la secretaria general de la Presidencia y hermana del presidente, Karina Milei. Él los subía a Martín Menem, que es el presidente de la Cámara de Diputados, cuarta persona en representación pública que tiene la Argentina. Es decir, ha provocado un cimbronazo político muy fuerte cuatro semanas antes de la elección. 

Aparte de esto, lo que ha sucedido es que este modelo de Milei, de control macroeconómico, necesita dólares. En primer lugar, los consiguió a partir de un blanqueo de capitales. A los argentinos que tenían dólares fundamentalmente sin declarar, les abrió una ventana para declararlos y no pagar impuestos. Ese blanqueo le dio fundamentalmente a las reservas del Banco Central aproximadamente 20 mil millones de dólares, que fue a noviembre del año pasado.

Esto ha repercutido en que esos dólares del blanqueo se fueron acabando y entonces el gobierno termina yendo al FMI a buscar un nuevo préstamo de ampliación donde consigue 20 mil millones de dólares, cifra más, cifra menos. ¿Qué sucede? Que sigue teniendo este problema macroeconómico. Hay una corrida cambiaria ya hace tiempo en nuestro país, antes de los audios y antes de la elección. Lo que sucede es que, cuando surgen los audios, se provoca un cimbronazo político y después de todo eso llega la elección de la provincia de Buenos Aires.

-Que tiene una relevancia particular en términos de representación…
-Es una elección provincial, es decir, se eligen diputados, senadores, concejales de la provincia y de los 135 municipios de la provincia. Pasa que el impacto es nacional, porque es el 38% del padrón y es el 40% del aparato productivo de la Argentina. Es muy potente. 

Y aparte, quien lidera y quien ganó es el principal dirigente opositor, el gobernador Axel Kicillof como figura política, y el peronismo como partido. Después de este resultado se termina de parar como líder práctico, si se quiere. Como líder simbólico puede quedar Cristina Kirchner, pero como líder práctico y con proyecciones, Axel Kicillof.

Por supuesto, los mercados que venían sosteniendo este modelo de financiación de la economía de la Argentina puntualmente, que creían en Milei, bueno, acaban de ver que el modelo tiene menos apoyo político de lo que ellos creían. Y entonces empieza esta semana con muchas turbulencias que van a seguir por varios días.

-Más allá de los errores del Gobierno, ¿qué tanto de pragmatismo hubo en el peronismo? ¿Se puede repetir la tendencia en las elecciones de octubre? 
-Fuimos juntos. Siempre cuando el peronismo pierde elecciones, como perdimos en el 2023, corre un fantasma de desunión y de desintegración. No pasó. Nadie se ha ido. Algunos gobernadores de algunas provincias han tenido actitudes más esquivas con lo que eran las directivas más fuertes del partido, que eran la de sostener una oposición dura a Milei, y han tenido procesos más de negociación.

Pero hoy ya vemos que empiezan a volver al redil partidario. ¿La unidad ha sido un factor? Sí, por supuesto, ha sido un factor. Es la unidad, el trabajo del territorio. Y también una cosa que no es menos cierta: los intendentes peronistas, el gobernador peronista, son, en definitiva, los que le ponen rostro y los que dan respuesta al impacto social negativo de las políticas de Milei en la Argentina. Eso es lo que está pasando. 

Milei descontinúa programas sociales, son los intendentes los que rearman un programa municipal para tratar de amortiguar lo que acaban de perder sus ciudadanos, sus vecinos. Y lo mismo pasa en la provincia de Buenos Aires. 

-¿Podría existir una crisis de gobernabilidad si el Gobierno queda disminuido también en las próximas elecciones legislativas nacionales? 
-Yo creo que esta tendencia se va a repetir en octubre. No sé si por el mismo margen, pienso que no. Va a ser una elección más pareja. Pero no tengo dudas de que el peronismo va a ganar en octubre. Al menos en la provincia de Buenos Aires seguro, y en otras provincias también. 

Viene cosechando derrotas hace tiempo Javier Milei. Pero bueno, la envergadura de la provincia de Buenos Aires y también el despertar, de algún modo, el peronismo para construir una nueva expectativa, una nueva esperanza, se provocaron ahora.

-¿Y en cuanto a la gobernabilidad?
-Hoy la gobernabilidad está garantizada. Javier Milei decidió tener un Gobierno frágil. En dos años consecutivos no envió el Presupuesto Nacional al Congreso para que se vote. Y es una decisión del Gobierno, no es una decisión de la oposición. Al revés, nosotros pedimos que envíen el Presupuesto de la Nación. Y no lo hacen.

Me parece que acá hay una apuesta a un cambio de régimen muy fuerte, hay una apuesta a un cambio cultural, político y a la construcción de una nueva hegemonía política en Argentina. Esa fue la apuesta de Milei y de los libertarios que ya ha fracasado.

La retórica al principio parecía simpática, parecía disruptiva, parecía que era una retórica dirigida a los políticos y aquellos que tenían privilegios. Y después nos damos cuenta de que esa retórica también la utiliza para pelear con un nene autista en las redes sociales, o con familiares de personas con discapacidad. Es decir, no usa la retórica ante los poderosos. Eso quizás en su momento le dio algún rédito, hoy ya no, ya es parte de su forma de comunicarse que ya cansó a la sociedad argentina. 

-¿Cuál es su análisis respecto a las decisiones políticas de la derecha tradicional, del macrismo, y de lo difuminados que quedaron al ingresar al Gobierno? ¿Qué lecciones se pueden sacar de lo que se está viendo en Argentina? 
-Hoy quedaron en una situación simbiótica, el PRO y el partido Mauricio Macri, están dentro de la alianza electoral para octubre. De hecho, el domingo pasado también compitieron en una misma alianza electoral. A mí me parece que hoy ya han quedado en una situación muy simbiótica y que no van a tener posibilidad de salirse a tiempo, por lo menos, porque la verdad es que viene una elección para octubre y ellos ya están en la boleta, ya se cerró esa lista.

Entonces, si existe esa ruptura o esa salida del Gobierno de la gente de Macri, será posterior a la elección, una elección donde se pierde. ¿Qué prestigio va a tener alguien que abandona el barco en las malas? Siempre dicen que son las ratas los que abandonan el barco cuando se está hundiendo. Me parece que han quedado en un muy mal lugar.

De hecho, hoy hay un gran debate en ese sector de derecha, sobre qué ha pasado, por qué decidieron tan mal, quién tomó la decisión de ir en esta alianza electoral. Macri se mantiene en silencio, pero lo cierto es que fue una autorización de él poder avanzar ahí.

-¿Cómo se proyecta el liderazgo de Axel Kicillof pensando en las próximas elecciones presidenciales?
-Sí, yo creo que Kicillof va a ser el candidato del peronismo. No tengo duda, y el peronismo va a llegar muy bien a la elección del 2027. Va a llegar con gobernadores, va a llegar con presencia en todo el territorio nacional. Bueno, falta mucho, hay que trabajarlo, por supuesto, pero el peronismo va a ser el que pueda reconstruir una esperanza en la sociedad argentina que hoy se ha perdido.

-¿Qué reflexiones sacan desde su sector en función de lo que realmente puede, en términos materiales, hacer la ultraderecha en el poder? 
-El experimento liberal libertario de Milei en la Argentina fracasó, ya está. Y no fracasó solamente por la última elección. Y tampoco fracasó porque la casta y la política fue eficiente, porque no lo fue, no fue eficiente en ponerle un freno.

El programa de gobierno de la Ley Bases, Milei la pudo sacar a pesar de tener muy pocos diputados. Logró sacarla con acuerdos. Y muchos de estos sectores que se corrieron a tiempo, en su momento lo apoyaron.

Pero es un modelo que no se aplica a nuestras sociedades. Y también lo digo para Chile, no se aplica, no va a funcionar. Hoy el mundo busca otra cosa, busca modelos de desarrollo con autonomía, que tengan que ver con la incorporación de la ciencia y la tecnología. Los modelos extractivistas, de exportación de recursos naturales, no hay ningún país que hoy esté liderando una discusión que sea de esas características. No funciona.

Hoy los modelos son modelos de desarrollo, son modelos que invierten en ciencia y tecnología, que invierten en educación. Esos son los países ricos hoy. Los países que lideran.

En la Argentina, por ejemplo, se descontinuó el programa de energía nuclear y de aplicaciones nucleares. La Argentina hace 70 años que tiene esos programas. Es líder en generar radioisótopos para tratar el cáncer de mama o el cáncer de útero. Todo eso está descontinuado, de hecho han recortado los programas de ciencia y tecnología. Se pelea con las universidades. 

-Pero el centro del debate es el equilibrio fiscal…
-Ojo, porque suena bonito el “vamos a hacer un equilibrio fiscal”, pero cuidado, porque ese equilibrio fiscal a veces, si uno no logra fomentar exportaciones de calidad con valor agregado, solo cae en los recortes. Y cuando solo caes en una política de recorte y das servicios públicos ineficientes, después te quedas sin futuro.

La Argentina, en el altar del equilibrio fiscal, está sacrificando el futuro a los argentinos, porque recortás a las universidades, recortás los programas de salud, recortás los programas de ciencia y tecnología.

Yo creo que ese es un debate de futuro y que el peronismo lo debe tomar. El peronismo muchas veces lo subestima y creo que nosotros como Gobierno lamentablemente lo subestimamos. No porque no lo entendiéramos, sino porque no teníamos las herramientas necesarias para hacerlo. Pero eso es un debate hacia adelante.

Cómo lográs ser eficiente en tus cuentas públicas sin descuidar el futuro, sin descuidar prácticas que son necesarias y sin dar prestaciones de servicios públicos de calidad. Si no, todo se termina reduciendo a un hiperconsumismo e individualismo, sociedades que no desarrollan a su comunidad. Terminan siendo experimentos.

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