Coctelería
Kato Tasty Caos: fusión de sabores y diseño de autor en Isidora Goyenechea
Entre luces rojas, murales provocadores y cócteles inspirados en Asia, Kato Tasty Caos invita a vivir una experiencia donde el orden y el caos se encuentran en cada plato y trago. Una nueva propuesta que promete sorprender en el corazón de Las Condes.
Kato Tasty Caos se instaló en el lugar que antes ocupaba La Panera Rosa, en la calle Isidora Goyenechea, Las Condes. La propuesta del nuevo restobar es una fusión gastronómica que combina lo asiático con un enfoque street food, destacando por su diseño interior cuidado y la atención al detalle, tal como lo explicitan en su carta física y también en sus redes sociales.
La cocina se define como “Street Food Sofisticado”. Su carta mezcla platos icónicos de Asia con un giro propio, demostrando el “caos” creativo de sabores. Por ejemplo, el Tuk Tuk Pad Thai lleva fideos de arroz, salsa de maní, camarones salteados y un huevo frito encima: una delicia. También ofrecen ramen clásico, katsu sando, wantanes, rolls, nigiris y otros.

Créditos: @sibekay
El espacio ha sido remodelado para ser visualmente llamativo y funcional, con una buena terraza y varias mesas en el interior, además de algunas sillas en la barra para disfrutar los diferentes cócteles de la carta. El lugar cuenta con iluminación en tonos rojos y mobiliario negro que crean un ambiente intrigante, visible incluso desde la calle. Y un lindo mural de Javier Barriga —de esas figuras femeninas de espaldas— calza perfecto con la identidad de Kató.

Créditos: @sibekay
El equipo de Kato Tasty Caos se muestra entusiasta en estos primeros días de apertura y ya tiene claro su público objetivo: el lugar estará abierto de lunes a domingo y se enfocará especialmente en captar a los oficinistas del sector que buscan una experiencia de almuerzo eficiente (de aproximadamente 35 minutos). También apuestan por el público de la tarde-noche, con una cuidada y estudiada mocktelería, coctelería de autor y clásica, junto con destilados interesantes como sake, ginjaponés y de otros países, whisky japonés y de otros orígenes, tequila, vodka, pisco y cervezas.
Probamos dos mocktails: La Mist, que contiene syrup de lychee, syrup de cereza, bebida de lychee, solución cítrica y tónica. Es dulce, pero no empalagoso; tiene ese sabor del lychee un poco untuoso y cremoso gracias a la espuma que genera la bebida. Además, su presentación es hermosa.

Créditos: @sibekay
El segundo, Patiperro, lleva infusión de chai, agua de coco, miel de yuzu, vinagre de arroz y agua de azahar. Incluye un encurtido de bambú que aporta carácter. Es fresco por el agua de coco, dulce y untuoso; el vinagre de arroz equilibra y lo interesante es que deja una sensación similar a la del gin, lo que hace pensar que realmente es un gran mocktail.
Luego probamos el Siempre Zen, presentado por el jefe de barra, Ramiro Miranda. Es uno de los cócteles recomendados y contiene gin infusionado en flor de mariposa, licor de sauco, cold brew de té verde y syrup de nori, wakame y pepino. Su presentación es preciosa: los tonos morados y rojos potencian las ganas de probarlo, más aún con los sabores que ofrece. Es elegante, suave, con buena potencia alcohólica y un toque de picor.

Créditos: @sibekay
También nos presentaron el Órale Wey San, que combina tequila, mezcal, sake, cordial de piña asada y tónica. La copa elegida acompaña perfectamente la intención del cóctel: se perciben el mezcal y el tequila, el ahumado de la piña realza los sabores y la nota “amielada” del cordial aporta frescura y equilibrio.

Créditos: @sibekay
Para cerrar, conocimos el Osaka Midnight, que contiene whisky japonés, licor de café, syrup de café, café turco y aceite de sésamo negro. Aunque es una reinterpretación del Espresso Martini, tan de moda, la presentación —en una taza junto al ibrik— ya llama la atención. El sabor, menos dulce que el clásico espresso (algo que se agradece), se aleja de lo convencional. El aceite de sésamo, junto al café achocolatado, da la impresión de saborear un postre de mousse de chocolate con aceite de oliva y sal: perfecto para cerrar una cena.

Créditos: @sibekay
Esperamos que Kato Tasty Caos mantenga la audacia en este camino que recién comienza. Su “caos” creativo es precisamente el ingrediente que necesita el sector, prometiendo desordenar —de manera refrescante— la estructurada coctelería y gastronomía a la que estábamos habituados en Isidora Goyenechea.