
¿Es necesario poner límites en una relación de pareja?
Los límites son pautas que marcan lo que resulta aceptable en nuestras relaciones y tienen como propósito resguardar la salud física y emocional de las personas. Desde esta perspectiva, resulta fundamental establecer parámetros claros tanto en el ámbito personal como en la vida en pareja. Solo así es posible construir un vínculo amoroso honesto y responsable, que se sostenga en el respeto mutuo y contribuya al bienestar compartido.
El valor personal no puede quedar condicionado por un lazo afectivo que trasgreda los propios límites. Para evitarlo, es necesario sostener una conversación sincera que permita a la pareja expresar aquello que no se está dispuesto a transar: situaciones, experiencias, valores o principios.
Cuando, a pesar del dialogo, las transgresiones se repiten en el tiempo, llega el momento de tomar decisiones que, en ocasiones, pueden derivar en la ruptura del vínculo. Aunque este proceso pueda resultar doloroso, es preferible asumir ese costo antes que poner en riesgo la autoestima y el autoconcepto, aspectos esenciales a lo largo de la vida.
Existe una responsabilidad personal que nos invita a reconocer nuestros propios límites: hasta dónde estamos dispuestos a ceder y cuánto podemos transar. Tener claridad sobre ello es clave para luego expresarlo y vivir en coherencia.
Poner límites en una relación de pareja no solo es beneficioso en el presente, sino que también abre la posibilidad de construir un vínculo sólido, basado en la responsabilidad afectiva tanto con uno mismo como con la otra persona.
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