
Oasis chileno se convierte en la segunda ciudad del país con más buses eléctricos
Copiapó se convirtió en la primera ciudad de Sudamérica con un sistema de transporte público 100% eléctrico. Con 121 buses de origen chino, el proyecto beneficiará a 25 mil personas al día y marca un paso clave hacia la meta de carbono-neutralidad de Chile al 2050.
En el oasis de Copiapó, en el corazón del desierto chileno de Atacama, uno de los más áridos del mundo, inició este jueves la operación de 121 buses eléctricos, todos de origen chino.
En la ceremonia realizada en el Parque El Petril, uno de los pulmones verdes en este territorio desértico, el alcalde de Copiapó, Maglio Cicardini, recibió una gigantografía que representaba una llave de un bus entregada por el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz.
“Copiapó enfrentaba ciertas particularidades. Una ciudad importante, capital regional, y había visto un detrimento muy significativo del transporte público mayor. Necesitábamos tener una transformación importante, un impulso al transporte colectivo”, explicó a Xinhua Muñoz.
El ministro apuntó que esta transformación es “enorme” y se enmarca en un trabajo colaborativo público-privado que permite que Copiapó se transforme en la segunda ciudad del país con más buses eléctricos, tras la capital de Santiago.
“Permite que sea la primera ciudad de Sudamérica que tenga completamente resuelto el problema de movilidad con buses eléctricos y también la transforma en la décima región de las 16 (de Chile) que ya cuenta con buses eléctricos”, detalló el ministro.
Estos buses, que beneficiarán a unas 25.000 personas al día y fueron fabricados por la marca china King Long, llegaron en una flota el pasado 18 de julio desde la metrópoli china de Shanghai hasta la terminal del Puerto de San Antonio, en el centro del país, tras lo que viajaron en caravana hasta Santiago para ser conducidos en oleadas hasta Copiapó.
El subsecretario de Transportes, Jorge Daza, destacó que los fabricantes de origen chino de estos buses han permitido expandir estas máquinas a las regiones del país austral gracias a sus precios competitivos.
Del total de conductores de la nueva flota, la mitad son mujeres. Una de ellas es Severina Huanca, de 51 años de edad y nacionalidad boliviana, que vive hace seis años en Chile y representa a la numerosa población migrante que habita en el norte del país sudamericano.
“Para mí es un orgullo tener estos buses eléctricos. Yo nunca había pensado en que iba a manejar un bus eléctrico (…) estoy orgullosa de este momento, que yo esté como conductora”, señaló Severina a Xinhua.
Explicó que durante tres años manejó un colectivo (taxi local) y postuló en la municipalidad para ser parte de este hito histórico. “Yo empezaba a manejar temblando el primer día. El segundo ya no, y el tercero ya conocía el bus cómo se manejaba”, detalló sobre su experiencia con el vehículo eléctrico.
“Me siento orgullosa también porque son buses que no contaminan”, agregó.
Copiapó, que acoge a unos 170.000 habitantes en la región de Atacama, es una ciudad minera, el pilar económico en el país, por lo que este territorio y sus alrededores han sido embestidos por la contaminación.
Estos buses eléctricos ayudarán a disminuir la contaminación en el aire y beneficiarán la calidad de vida de sus habitantes, según señalaron diversas autoridades en la puesta en marcha de esta flota.
Chile tiene el compromiso de ser carbono-neutral en 2050 y, en materia de transporte, que todos los vehículos que ingresen al país sean de cero emisiones para 2035.
En la actualidad, en el país circulan más de 3.400 autobuses eléctricos en el transporte público, de ellos 3.125 en la capital, Santiago.