70% de los padres usa el celular frente a sus hijos: una práctica que podría afectar su salud mental

Leer un mensaje, revisar las redes sociales o contestar un correo, un gesto cotidiano. Sin embargo, puede tener efectos profundos en el bienestar emocional de los más pequeños.

Según una investigación publicada en JAMA Pediatrics, el 70% de los padres utiliza el teléfono móvil frente a sus hijos pequeños, una práctica que podría tener consecuencias negativas en su desarrollo emocional y cognitivo.

El fenómeno, conocido como “technoference”, hace referencia a la interferencia que produce la tecnología en las interacciones cara a cara, especialmente entre padres e hijos. La investigación fue liderada por Marcelo Toledo-Vargas, kinesiólogo chileno e investigador de la Universidad de La Frontera, quien analizó datos de más de 14.900 niños en 10 países y revisó más de 6.000 estudios sobre el tema.

Ansiedad, desapego y dificultades cognitivas

El estudio reveló que cuando los adultos usan pantallas frente a niños menores de cinco años, aumentan las conductas problemáticas, la ansiedad y disminuye el apego emocional. También se detectaron dificultades en el desarrollo cognitivo de los menores.

Aunque muchos padres recurren al celular por razones prácticas —trabajo, información, contención emocional o gestión del hogar—, los expertos recomiendan identificar momentos clave donde la presencia activa es fundamental, como la hora de la comida, el juego o antes de dormir.

“Todos necesitamos desconectarnos a veces. Pero hay momentos clave —como las comidas, el juego o antes de dormir— donde estar presente hace una diferencia enorme”, señala el autor.

Desde una perspectiva científica, el estudio destaca que incluso pequeñas distracciones repetidas pueden acumular un efecto.

¿Cómo abordar el uso del celular frente a los hijos?

Aunque el estudio no busca culpabilizar a los padres, sí invita a una reflexión sobre el equilibrio entre tecnología y crianza. Algunas recomendaciones clave son:

• Evitar el uso del celular durante las comidas, el juego y la hora de dormir.

• Ser conscientes del ejemplo: los niños también aprenden hábitos digitales observando.

• Establecer “momentos sin pantallas” en familia.

• Usar el celular con intención, no por impulso.