La originalidad de post rock asiático de Jambinai, la alternativa que trae Womad Chile al globalizado K-Pop
Juntar la melodía rockera del bajo, batería y guitarra con piezas milenarias sur coreanas con más de 15 siglos de historia al borde de la extinción en una creación melancólica inaudita en el escenario musical del país asiático es lo que hace el grupo Jambinai. En febrero, sus tres integrantes llegan a Chile para el Festival Womad donde presentaran las canciones de su nuevo disco Hermitage, lanzado en el año pasado.
Los sures coreanos Ilwoo Lee, Bomi Kim y Eun Young Sim formaron el grupo Jambinai en 2009. La propuesta inicial de post rock asiático acabó por dar paso a una nueva estética alternativa y contemporánea como resultado de la mezcla con los instrumentos tradicionales de la cultura de raíz coreana.
Tal como ocurre en varios países es raro encontrar alguien en Corea que conozca un Piri por ejemplo, la flauta tradicional de coreana. Otro instrumento milenario y por veces olvidado es el Haegeum, una especie de violín. Quizás más conocido por la cultura popular pero poco utilizado es el Geomungo, instrumento que se parece a una mezcla entre arpa y cítara de 11 cuerdas. El gran valor de Jambinai es que on estos instrumentos históricos logra sonidos actuales, que por primera vez en Chile, el público nacional tendrá la oportunidad de escucharlos en la tercera versión del Womad Chile.
Formalmente, su estilo tiene que ver con el post rock y el hardcore, con pasajes sonoros de alta estridencia, pero siempre en contrapunto con el paisaje milenario que sugieren esos mencionados instrumentos ancestrales de su país y que en vivo configuran un sonido moderno y entrañable a la vez.
Los tres integrantes del grupo son jóvenes pero siempre valoraron y manifestaron interés por la música tradicional. Ilwoo Lee, en conversación con El Mostrador C+C cuenta que por ejemplo aprendió a tocar estos instrumentos milenarios cuando apenas era un adolescente. Al mismo tiempo que su interés por el rock florecía, él experimentaba combinaciones hasta que supo manejar bien las dos sonoridades.
“He tocado instrumentos tradicionales coreanos desde que tenía 13 años de edad, y la guitarra desde que tenía 15. De verdad no es fácil para nosotros hacer esa mezcla entre instrumentos muy antiguos con actuales, es una sonoridad difícil de manejar, pero como yo empecé desde muy temprano a trabajar con los dos tipos de música al mismo tiempo crecí habituado a experimentar esa combinación”, explica.
El resultado de las experimentaciones de Lee sirvió para que crear una identidad única junto con el trabajo de Bomi Kim y Eun Young Sim, que provocó una innovación llena de personalidad en el mercado musical sur coreano. El grupo lanzó el primer disco «Jambinai» en agosto de 2010, y en 2012 siguieron con el aún más exitoso «Difference». El segundo disco fue aclamado por la crítica especializada en todo el mundo, como la «exquisita complejidad de una mezcla» que los torna un fenómeno único. “Difference” llegó a también a ganar en la categoría “Mejor Álbum Crossover”, en los Korean Music Awards de 2013.
La recepción de la música de Jambinai fue tan buena en términos de crítica que no dejó a nadie indiferente, sin embargo el mercado musical de Corea del Sur siguió dominado por el fenómeno K-Pop. Cuestión no necesariamente mala según Jamimbai. La música pop sur coreana consiguió en los últimos años conquistar audiencias en una escala global como nunca se había hecho antes con la música de Asia. «Esa visibilidad fue una cosa muy buena», conforme agrega Lee, aunque sea apenas un género entre muchos otros que hay en Corea.
“La amplia difusión del K-Pop es por un lado bueno para divulgar la música coreana. Pero es una oportunidad única para el propio K-Pop. Corea no tiene sólo eso, sino que también todo el tipo de género musical con variedades muy ricas de escuchar y explorar como hacemos nosotros”, señala Lee.
Mientras que el K-Pop -hecho para vender masivamente- viene conquistando un espacio cada vez más evidente y recibe los principales aportes financieros, el trío de Jambinai lucha para lograr mantenerse en la escena nacional e proyectarse internacionalmente como una alternativa musical que valora la tradición pero sin dejar las marcas actuales que hacen sus canciones obtengan éxito.
“Lo que pasa es que actualmente el foco de la industria cultural en Corea ahora sólo se valora el K-Pop. Eso debido a que es muy popular en el extranjero. Tiene una base de fans inmensa y hace un montón de dinero al gobierno. Proyectos como el nuestro no son muy rentables ya que nuestra música busca una alianza con el tradicional pero no es música popular. Son pocas personas que aprecian nuestra música”, revela.
La tradición coreana es algo que asegura el trío no es muy apreciada por la gente de su país. Aunque existe un reconocimiento por parte de las audiencias de que la historia sur coreana es rica y puede servir de inspiración para músicos como Jambinai, en el contexto actual se hace un poco difícil impulsarse. Así mismo el grupo ha abierto una ventana en lo que puede ser una alternativa para cambiar ese escenario.
“La gente no adora la tradición. Pero eso debido a que la tradición es algo que está estancado en el pasado. Pero no desprecian tampoco el legado de Corea que es algo importante. Por lo tanto mantener la tradición viva y también a desarrollar una manera comunicar ella a través de la música con la gente moderna es un desafío. Pero la tradición en su forma original está estancada y, así, seguro que va a desaparecer”, explica.
La mezcla de rock con instrumentos milenarios de la música de Jambinai para algunos tienes referencias trágicas y melancólicas, debido que el contenido de las letras exploran sentimientos extremos como miedo, tristeza, dolor y rabia. Algunas tragedias de la vida real sirven de base para el proceso de composición, una manera que encuentran para expresar sus sentimientos como artista frente a los acontecimientos que les provoca indignación.
“La canción ‘They Keep Silence’, por ejemplo, que está en el segundo disco narra la tragedia del transbordador marítimo en Sewol. Hace poco más de dos años hubo un accidente terrible en el mar. Un transbordador se hundió y muchos pasajeros se ahogaron y el gobierno no hizo nada al respecto. Nosotros reaccionamos y protestamos en contra a la inercia de las autoridades públicas acerca del ocurrido y la falta de aporte a las familias de los muertos. Así que pensé que como artista necesitaba para expresar mi rabia sobre eso. Así que escribí la canción”, expone el músico.
La música original de Jambinai es otra de las grandes sorpresa de la world music de Womad Chile 2017
