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Efemérides: la hazaña olímpica de un equitador nacional

Efemérides: la hazaña olímpica de un equitador nacional

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Además, el nacimiento de uno de los mejores jugadores extranjeros que han militado en nuestro país.


3 DE AGOSTO DE 1916: Nació en Buenos Aires José Manuel Moreno, el inolvidable “Charro”, quien destacó en su carrera como uno de los mejores jugadores en la historia de River Plate y que contó con pasos en el fútbol mexicano, colombiano, uruguayo y chileno. En nuestro país, Moreno jugó solo una temporada: 22 partidos (8 goles) en el campeonato de 1949, con Universidad Católica, que lo hizo coincidir con la primera consagración de los cruzados en nuestro profesionalismo. Fue dotado de una extraordinaria técnica, la cual matizó con una (a veces) licenciosa vida privada, que aumentó su leyenda, debido a sus múltiples logros como jugador. En la selección argentina Moreno formó parte de los seleccionados argentinos campeones de 1941 y 1947. Su palmarés exhibe tres títulos de liga con River Plate, uno en España (club mexicano), el citado en la UC y dos coronas con Independiente de Medellín, cuando frisaba los cuarenta años de edad. Su vínculo con el fútbol chileno no se dio solo por su paso en Universidad Católica: en 1962 fue entrenador de Colo Colo, aunque sin proyectar su talento como jugador a la dirección técnica. Falleció el 26 de agosto de 1978.

VIDEO CON UN RESEÑA BIOGRÁFICO DEL CHARRO:

3 DE AGOSTO DE 1952: El jinete nacional Óscar Cristi conquistó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Helsinki 1952, tras concluir segundo en el Gran Premio de Las Naciones, cuando derribó solamente un obstáculo montando a “Bambi”, su fiel caballo que lo acompañó en la exitosa gesta olímpica finlandesa. Ya en los primeros Juegos Panamericanos de Buenos Aires, en 1951, la equitación chilena cosechó seis medallas de oro, anticipando lo que se vio en los campos ecuestres de Helsinki, un año después. En la jornada final por la medalla de oro olímpica, Cristi se enfrentó a notables exponentes europeos como el francés Jacques D’Oriola o el alemán Thienemann. Y fue precisamente el galo quien cumplió un recorrido perfecto, finalizando sin penalizaciones. Al chileno le correspondió salir en tercer lugar y cuando parecía que culminaba un recorrido perfecto (que en caso de igualdad con D’Oriola le hubiese significado el oro), los cascos de “Bambi” rozaron casi imperceptiblemente un cajón que tras desmoronarse le dieron al nacional una penalización de 4 puntos, que a la luz de los demás resultados le valieron la medalla plateada.

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