El desafío de construir nuevas prestaciones de salud para el futuro
Señor director:
Si para 2050 más de 2.100 millones de personas tendrán más de 60 años según la OMS, estamos frente a una realidad mundial que exige repensar cómo se organiza la gestión sanitaria. A nivel nacional, nuestro sistema ya convive con listas de espera extensas, presión financiera y equipos clínicos sobreexigidos. En ese contexto, seguir entendiendo los hospitales como lo hemos hecho siempre y no como parte de un ecosistema sanitario interconectado limita nuestra capacidad de respuesta.
En el reciente libro Hacia el futuro de los hospitales, del destacado doctor Jordi Serrano-Pons, sobre la realidad del sistema de salud español – en muchos casos referente para los países de Latinoamérica -, éste nos ofrece elementos que Chile debiese considerar. La propuesta es avanzar hacia instituciones de salud híbridas, interoperables y conectadas en un ecosistema sanitario. Las nuevas tecnologías deben apuntar a complementar la labor del personal de salud, optimizar procesos y avanzar hacia modelos más preventivos y personalizados. A esto se suma la necesidad de generar, sistematizar y analizar datos de manera rigurosa, lo que permitirá desarrollar modelos predictivos capaces de planificar con mayor precisión, mejorar la eficiencia operativa y orientar decisiones con un mejor balance costo–beneficio.
Pero esto requiere de transformar la forma en que gestionamos la salud. Si abordamos el futuro con las prácticas actuales, seguiremos tensionando un sistema que ya muestra signos de agotamiento. Necesitamos apertura para trabajar de manera distinta, integrar la tecnología a procesos rediseñados, fortalecer la formación continua e incorporar activamente al personal clínico en la toma de decisiones. Sobre todo, mantener al centro al factor humano en la atención sanitaria, no podremos resolver nuestros desafíos si sólo escuchamos a la tecnología.
Héctor Fuenzalida Cruz
Director de Desarrollo e Innovación
Atrys Chile