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¿Por qué es importante nuestra gastronomía? Opinión

¿Por qué es importante nuestra gastronomía?

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Desde el 21 hasta el 26 de noviembre, se vivió la Trilogía Gastronómica 2025, que reunió tres grandes eventos: el Torneo Intercontinental de Asadores WBQA en Viña del Mar; el 1er Encuentro Internacional de Gastronomía, Turismo y Sabores (Engatusa) en Santiago; y la Ruta y Premios Enoturismo Chile 2025 en la Región de O’Higgins. Cada actividad cumplió el mismo objetivo: relevar el rol que la gastronomía cumple en nuestro turismo. Sin embargo, ¿por qué se debe destacar?

Chile ha resaltado por sus vinos y maridajes. Por ejemplo, la Viña Santa Rita fue elegida la mejor viña del mundo en el ranking 2025 de Forbes; la Viña Casas del Bosque fue reconocida por séptima vez consecutiva en el Top 50 de los World’s Best Vineyards y —por si fuera poco— obtuvo el premio Best Of Wine Tourism 2025 para su restaurante Botánico; mientras que Concha y Toro, en 2021, fue galardonada por The Drinks Business por sus logros durante un momento complejo, como lo fue la pandemia. Es en este punto donde digo: “al lado de una buena copa de vino, debe existir una buena gastronomía”.

La gastronomía muchas veces pasa a segundo plano en el turismo, pero su papel es fundamental. Según el Perfil del Turista Extranjero 2023, realizado por la Subsecretaría de Turismo, el gasto promedio de un turista argentino es de 63,3 dólares diarios y su permanencia promedio es de 8,6 días. Cuando se divide la estructura del gasto total, nos damos cuenta de que los restaurantes o similares perciben el 24,6% de este.

Por otra parte, el turista brasileño tiene un gasto promedio diario de 112,1 dólares y su permanencia es de aproximadamente 7,6 días. ¿En qué gasta el turista brasileño? El 24,2% corresponde a restaurantes o similares. Menciono solo estos dos casos porque —en lo que va del año 2025— Chile ha recibido a más de 1.700.000 turistas argentinos y 251.210 turistas brasileños. Por lo tanto, decir que el rubro gastronómico no es importante para nuestra economía es simplemente mentir.

No quiero quedarme solamente con las cifras, porque la gastronomía aporta más que números: aporta experiencias, aporta identidad, es clave para saber quiénes somos y en qué nos destacamos como chilenos. Cuando uno visita Argentina, come el asado argentino, la milanesa o las pizzas argentinas, por dar algunos ejemplos. No obstante, ¿qué podemos ofrecer nosotros a los turistas extranjeros? ¿Solamente salmón o existen más variedades? Claramente hay más opciones, y cada región destaca por tener su propio sello e identidad. Pero, para eso, debemos creernos el cuento.

Cada vez que hablo con algún gastrónomo, me dice: “nosotros no tenemos nada que envidiar a los platos de otros lugares del mundo”, “Chile tiene un potencial gastronómico enorme”, tenemos un embajador internacional de peso, nuestro vino, por lo mismo, como ya he dicho muchas veces, es el momento de hablar de maridaje. Ahora viene la pregunta: ¿cómo lo hacemos?

La Trilogía Gastronómica 2025 buscó justamente ese fin. Si hablamos de Engatusa, logramos convocar un grupo diverso de especialistas desde la mesa “Chile te quiero comer” logramos comprometer y vincular a la academia, influenciadores, chefs y restaurantes contando además con más de 50 expositores nacionales y decenas de actividades, como foros, cooking shows, charlas magistrales, conversatorios y mercados gastronómicos. No obstante, también se logró el buscado compromiso entre los gremios, las universidades y medios para seguir potenciando el “Menú de Chile”, que reflejará la diversidad culinaria de nuestro territorio.

Nuestro Chile es una despensa reconocida y una agropotencia alimentaria que permite reflejarla en nuestros platos y en la experiencia de vivir nuestro hermoso país. Demás está decir que, si bien el menú de Chile será desarrollado por las tres instancias ya mencionadas, será la ciudadanía quién dé el último veredicto. El encuentro además tuvo un excelente recibimiento por parte de Brasil —país invitado—, que decidió llevárselo a su territorio.

Sin duda, nuestra gastronomía es algo de lo que debemos sentirnos orgullosos, y colaborando entre todos podremos darle el lugar que se merece en el turismo. Es un arduo trabajo y viene desarrollándose desde hace años, pero es gratificante ver —más allá del cargo— que nuestros platos típicos cada vez se ven más en las mesas de los restaurantes.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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