
Chile apunta a récord mundial con el mayor intercambio de ropa para promover consumo sostenible
El 25 de octubre, The Ropantic Show liderará en La Moneda un intento de Récord Guinness con el mayor intercambio de ropa del mundo, buscando visibilizar el consumo responsable, promover la moda circular y reducir los más de 572 mil toneladas de residuos textiles que genera Chile cada año.
En las últimas dos décadas, el consumo de ropa en Chile se disparó un 233 %, de acuerdo con cifras del Ministerio del Medio Ambiente. Mientras en 2015 una persona adquiría en promedio 13 prendas al año, para 2020 la cifra ya se había cuadruplicado, llegando a 50 prendas anuales por habitante.
Chile importa cada año cerca de 123 mil toneladas de ropa usada, lo que lo posiciona como el cuarto mayor importador a nivel mundial. Sin embargo, gran parte de estas prendas no encuentra un segundo uso: cerca del 60 % termina acumulada en vertederos ilegales, principalmente en el desierto de Atacama. Allí, montañas de textiles desechados —provenientes de excedentes comerciales e importaciones— forman paisajes tan extensos que hoy son visibles incluso desde imágenes satelitales.
Bajo este contexto, el próximo 25 de octubre, el Centro Cultural La Moneda será escenario de una iniciativa inédita en Chile. Ese día, el colectivo The Ropantic Show intentará romper el Récord Guinness del mayor intercambio de ropa del mundo, con el objetivo de promover nuevas formas de consumo que ayuden a prevenir la generación de residuos textiles.
María José Gómez, fundadora de Ropantic Show, explica que “dimos la vuelta al mundo por las montañas de ropa en el desierto; que nos reconozcan hoy por la solución”. Así, este evento buscará establecer un titulo inicial de 2000 personas, auditado por la autoridad internacional “Guinness World Records” quien formalizo la postulación previamente.
Moda circular y consumo responsable
The Ropantic Show es un proyecto de innovación social que, durante más de 14 años, ha impulsado el intercambio masivo de ropa en España y Chile, consolidando un modelo de consumo sostenible que además es escalable y rentable.
Su enfoque se basa en la colaboración con marcas, instituciones gubernamentales y organizaciones civiles, llevando la moda circular a municipios, tiendas y universidades. Como señalan, “el desafío necesita de todos, porque todos nos ponemos ropa día a día y eso deja huella”.
Esta edición récord forma parte del Programa Nacional de Prevención de Residuos Textiles 2026, liderado por The Ropantic Show con el respaldo de CORFO, el Ministerio del Medio Ambiente y diversas instituciones colaboradoras.
Moda sostenible y creatividad para repensar la ropa en Chile
En Chile, cada persona consume en promedio 32 kilos de textiles al año, lo que genera más de 572 mil toneladas de residuos, de los cuales apenas se recicla un 1%. Ante este escenario, el evento ofrece una experiencia inmersiva que incluye intercambio gratuito de prendas seleccionadas, talleres de reparación y reciclaje creativo, y charlas con referentes del diseño local, políticas públicas e industrias creativas.
La iniciativa apunta a transformar los hábitos de consumo y mostrar que la moda puede ser un espacio de empatía, conexión y comunidad. “Queremos seducir al consumidor con experiencias educativas, dinámicas y estéticamente cuidadas, que permitan reconectar con el valor de las prendas y el trabajo detrás de ellas”, afirma Gómez.
Asimismo, para Gómez el arte, el diseño y la creatividad son un aspecto fundamental en esta iniciativa. “Juega un papel fundamental porque la estética es el primer contacto que te invita a avanzar. La creatividad y el arte te mantienen atento en lúdica y reflexión. El buen diseño permite hacer de esta experiencia una producción eficiente y sostenible en el tiempo”, explica.
El encuentro en La Moneda trasciende la moda sostenible: se configura como una plataforma para repensar cómo consumimos y nos relacionamos con la ropa, ofreciendo desde una red nacional de intercambio hasta material audiovisual educativo, capacitaciones en eco-diseño y espacios colaborativos que integran oficios, ciudadanía y creatividad.
A través de estas experiencias colectivas, creativas y conscientes, se busca impulsar un cambio de paradigma en el consumo textil, porque, como afirma Gómez, “”Nuestro bienestar es Colectivo”.