
Fuga del sicario: Pagó 2.5 millones de pesos a taxista para que lo llevara a Iquique
Según TVN, el conductor se presentó voluntariamente ante la policía, al reconocer a su pasajero como el sujeto que quedó en libertad pocas horas después de ser formalizado ante el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago. Su destino final, dijo al chofer, era Perú.
En el paso Colchane, según fuentes policiales, se perdería la pista del sicario del Tren de Aragua (TDA) Alberto Carlos Mejía Hernández (antes identificado como Osmar Ferrer Ramírez), el cual, según informó TVN anoche, pagó 2.5 millones de pesos a un taxista de Santiago, a fin de que este lo llevara urgente hasta Iquique.
Esa ciudad del norte, como es sabido, es una de las primeras en las cuales se instaló el Tren de Aragua en Chile y, de hecho, recién la semana pasada se dieron a conocer las severas penas a las que fue condenada la célula que era dirigida allí por Carlos González Vaca (más conocido como “Estrella”), el cual deberá cumplir cadena perpetua y 42 años adicionales, por los numerosos delitos que la justicia acreditó que había cometido.
Iquique, además, es estratégica para el TDA, porque al menos desde 2021 dicho grupo controla el tráfico de migrantes desde Bolivia hacia Chile en las inmediaciones de Colchane y prácticamente todos los miembros del grupo que han estado implicados en acciones delictivas en el centro sur del país -incluyendo a varios de los implicados en el crimen del teniente Ronald Ojeda- han huido por allí y, en menor medida, por las inmediaciones de Chacalluta (al norte de Arica).
De hecho, según la versión emitida por TVN, el taxista -que se acercó voluntariamente a la policía, al reconocer al sicario en las imágenes de televisión- dijo a las autoridades que el imputado, de 19 años, le había comentado que pensaba llegar a Perú, por lo cual se activaron las instancias de cooperación que posee la PDI con la Policía Nacional de ese país.
A esas alturas, como se indica al inicio, existe la convicción a nivel de fuentes policiales de que Mejía viajó a Colchane con el fin de cruzar hacia Pisiga (Bolivia), por lo cual en toda esa zona se han intensificado los operativos.
Otro antecedente que se despejó respecto de la fuga es el relativo a los dos sujetos jóvenes que esperaban a Mejía cuando este salió de la cárcel de Santiago 1. Según indicaron fuentes policiales, ambos sujetos estaban detenidos por otros delitos y fueron liberados en la misma jornada, por lo cual es probable que se hubieran conocido mientras estaban al interior del penal, luego de lo cual caminaron juntos por varias cuadras, tras lo cual se perdió el rastro del sicario.
Ambos fueron interrogados y coincidieron en señalar que Mejía decía que necesitaba dinero urgente, el cual evidentemente consiguió. A ese respecto, como explicó una fuente policial, si efectivamente obtuvo 2.5 millones de pesos de parte de la organización (y seguramente más) significa entonces que, pese a su corta edad, se trata de un sujeto muy importante al interior de la misma.
Cabe indicar que luego del homicidio por encargo de José Felipe Reyes Ossa, más conocido como “El rey de Meiggs”, asesinado el 19 de junio en Ñuñoa, Mejía y sus dos coimputado (Yonder Emilio Blanco Véliz y Neomar Andrés Arismendi Duarte) recibieron un pago de 4.5 millones de pesos, muy distante de los 30 millones que se les habían ofrecido inicialmente, pues el “trabajo” consistía en secuestrar a Reyes, no asesinarlo.
Con el dinero, los tres huyeron a Osorno, donde se escondieron hasta el 9 de julio, cuando regresaron a Santiago y fueron detenidos, luego de lo cual fueron formalizados y, en un hecho aún no aclarado, Mejía fue dejado en libertad pocas horas después.
Personas vinculadas al caso señalan que el viaje al sur probablemente tenía como objetivo inicial huir hacia Argentina por las inmediaciones del paso Puyehue, pero al creer que no eran buscados en Santiago optaron por regresar a la capital, donde fueron aprehendidos.