
Los nuevos detalles del prófugo Martín de los Santos: su detención es inminente
Martín de los Santos, acusado de atacar brutalmente al conserje Guillermo Oyarzún, se encuentra prófugo en Brasil tras evadir una orden de detención en Chile. La Fiscalía activó alerta azul con Interpol y evalúa extradición. La abogada de la víctima califica el hecho como homicidio frustrado.
La Fiscalía Metropolitana Oriente y la Policía de Investigaciones (PDI) investigan a Martín de los Santos (32), acusado de agredir al conserje Guillermo Oyarzún (71) en mayo. Actualmente prófugo, se confirmó que De los Santos se encuentra en Brasil, tras eludir una orden de detención vigente en Chile.
La defensa del imputado solicitó que asistiera por Zoom a la audiencia del 23 de junio, argumentando razones de seguridad tras agresiones sufridas en las inmediaciones del Centro de Justicia luego de una audiencia previa. Sin embargo, la Fiscalía descubrió que el imputado había viajado a Brasil antes de la audiencia y que su comparecencia telemática se realizó desde ese país. Aunque contaba con un pasaje de regreso para el 22 de junio, no lo utilizó, confirmándose así su fuga.
En respuesta, según reporta el diario El Mercurio, la Fiscalía solicitó a la PDI emitir una alerta azul, activando la colaboración de Interpol y la Policía Federal de Brasil. Según fuentes investigativas, hasta ayer no se registraron movimientos del imputado desde Brasil hacia otro país.
Los encargados del caso estiman que su captura sería sencilla, dada la falta de redes de apoyo internacional, aunque advierten que su repatriación podría requerir un proceso de extradición.
Una vez detenido y trasladado a Chile, De los Santos cumpliría prisión preventiva en Santiago, en un módulo para primerizos. Este proceso incluirá un control de detención para garantizar sus derechos constitucionales.
La abogada de la víctima, Marlén Quintanilla, ha calificado los hechos como homicidio frustrado, detallando que el imputado atacó violentamente a Oyarzún mientras este realizaba una revisión de rutina en el perímetro. Según su relato, De los Santos propinó golpes intensos, especialmente en el rostro, sin provocación alguna.