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GHB: La peligrosa droga de sumisión que reaparece tras el caso Manuel Monsalve BRAGA www.freepik.es

GHB: La peligrosa droga de sumisión que reaparece tras el caso Manuel Monsalve

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El GHB, también llamado “Buenas noches, Cenicienta”, reaparece en la polémica tras ser hallado en el celular de Manuel Monsalve. Es conocida por su uso en delitos sexuales debido a sus potentes efectos sedantes.


Resumen
Síntesis generada con OpenAI
El GHB, conocido como “Buenas noches, Cenicienta” o “la droga del violador”, es una sustancia depresora del sistema nervioso que reapareció en la agenda pública tras ser buscada en el celular del subsecretario Manuel Monsalve. Utilizada para cometer delitos sexuales, suele mezclarse con otras drogas para potenciar sus efectos sedantes. Es incolora, inodora e insípida, lo que facilita su uso en bebidas sin que la víctima lo note. Provoca pérdida de conciencia, amnesia y, en dosis altas, puede causar coma o incluso la muerte.
Desarrollado por El Mostrador

El GHB (gamma-hidroxibutirato) es una droga sintética altamente peligrosa y utilizada con fines delictivos. Su nombre vuelve a ocupar titulares luego de que se informara que esta sustancia, conocida como “Buenas noches, Cenicienta” o “la droga del violador”, fue buscada en el celular del exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, según antecedentes investigados por la policía.

Esta droga ha sido protagonista de numerosos casos de abuso en todo el mundo por su capacidad de anular la voluntad de las víctimas. El medio brasileño UOL reveló en una investigación que “Buenas noches, Cenicienta” no es una única sustancia, sino una mezcla de diferentes compuestos, entre ellos el GHB, usados para sedar y agredir sexualmente a personas, en su mayoría mujeres, sin que estas puedan recordar lo sucedido.

Origen y composición

El GHB fue sintetizado por primera vez en los años 60 en Francia, con fines médicos. Se empleó como anestésico y más adelante como tratamiento para trastornos del sueño, como la narcolepsia. No obstante, su potencial para el abuso llevó a su restricción en muchos países.

En el contexto delictivo, se presenta generalmente como un líquido transparente, insípido e inodoro, lo que lo hace ideal para mezclarlo en bebidas sin que la víctima se percate. Suele combinarse con otras sustancias como ketamina, benzodiacepinas, escopolamina y flunitrazepam para potenciar sus efectos sedantes.

Efectos en el cuerpo

El GHB actúa como depresor del sistema nervioso central. Los efectos comienzan rápidamente —entre 10 y 20 minutos tras la ingestión— y pueden durar más de una hora, dependiendo de la dosis y si se combina con alcohol u otras drogas.

Entre sus efectos más comunes se encuentran:

Mareo y confusión

Náuseas, vómitos

Somnolencia extrema o pérdida de conciencia

Pérdida de memoria (amnesia)

Reducción del control motor

En casos severos, dificultad respiratoria, coma o incluso muerte

Estas características lo convierten en un arma ideal para delitos sexuales, ya que incapacita a la víctima y borra todo recuerdo del hecho.

El caso Monsalve y el regreso a la agenda pública

La preocupación por esta droga volvió a instalarse en la discusión pública luego de conocerse que la policía detectó búsquedas relacionadas con “Buenas noches, Cenicienta” en el teléfono del alto funcionario Manuel Monsalve. Aunque las autoridades han evitado entregar detalles del caso, el tema ha generado alarma por la peligrosidad de este tipo de sustancias.

Según el medio brasileño UOL, “Boa Noite, Cinderela” es una expresión común en Sudamérica para referirse al uso premeditado de fármacos o drogas ilegales con el fin de dopar y agredir sexualmente a las víctimas, especialmente en fiestas, bares o situaciones sociales.

Prevención y conciencia

Frente a esta amenaza, las autoridades y organizaciones civiles recomiendan extremar precauciones:

  • No aceptar bebidas de desconocidos.
  • Evitar dejar los vasos sin vigilancia.
  • Prestar atención a cambios súbitos de conciencia o estado físico en entornos sociales.

Además, es crucial denunciar cualquier sospecha de intoxicación o abuso, y acudir a centros médicos lo antes posible si se cree haber sido víctima de este tipo de droga.

La reaparición del GHB en la agenda pública recuerda la urgente necesidad de fortalecer la prevención, la educación y la denuncia frente a este tipo de delitos. Es fundamental que la ciudadanía esté informada sobre los riesgos de estas sustancias y que las autoridades refuercen los controles en espacios de alta concurrencia. Cuidarnos entre todos, promover entornos seguros y no normalizar conductas de riesgo son pasos esenciales para enfrentar este problema, que sigue afectando principalmente a mujeres y jóvenes en contextos de vulnerabilidad.

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