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La mirada de DJ Lizz sobre el cuerpo y lo incómodo: “Lo femenino es una herramienta de guerra” CULTURA Créditos: Foro de las artes

La mirada de DJ Lizz sobre el cuerpo y lo incómodo: “Lo femenino es una herramienta de guerra”

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Emilia Aparicio Ulloa
Por : Emilia Aparicio Ulloa Periodista El Mostrador
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La reconocida DJ, cantante y productora será parte de un conversatorio en el marco de la exposición “Ple/bellas” este viernes en Espacio Londres. En esta conversación, Lizz conversa sobre arte, consumo y su faceta de historiadora del arte.


“Mi liberación sexual va de la mano con mi libertad de expresión, no son dos cosas distintas porque no puedo separar mi libertad de expresión que es mi mente de mi cuerpo”, dice la cantante, dj y productora Lizz. La joven de 33 años es cuestionada por su música, su trabajo y su aspecto, ¿Es arte lo que hace? Sus canciones hablan de deseo, amor, sexo, fiestas, plata. En redes, posa en bikini, siempre en tacos, no le da miedo mostrarse con poca ropa. ¿Por qué el cuerpo femenino sexualizado no podría ser considerado arte? Si la observación es sensual y aceptable, ¿Por qué mostrarse no lo sería?

“Yo creo que somos una sociedad mucho más avanzada que en los 80 como para llegar a usar la sensualidad y el poder del Eros como algo tan banal. Yo creo que todos saben exactamente lo que significa ser dueños de nuestra propia sexualidad y sensualidad”, afirma en conversación con El Mostrador.

Lizz es el seudónimo de Elisa Espinoza, DJ, productora y cantante oriunda de Hualpén, en la Región del Biobío, es una de las fundadoras del neo perreo, lleva más de una década trabajando en la escena musical chilena como productora de fiestas de reguetón y creadora de la Chismotek, un evento que ha marcado las noches de Santiago en los últimos años y que ahora está llevando a Madrid, España. Su nombre viene hace un tiempo dando vueltas en el circuito musical, partiendo en fiestas underground hasta llegar a grandes festivales como Creamfields Chile, Coachella (Estados Unidos) y Primavera Sound (España).

Entre la gran cantidad de proyectos que tiene, en sus redes se la ve de tour en Europa o Estados Unidos, ahora está preparando un EP con mezclas de importantes artistas de la música urbana y expresa que solo hace música con artistas mujeres, su último video publicado en Youtube es la canción “Pulp Fiction”, donde canta junto a Main Costa & Pochi , en dos semanas ya suma más de 77 mil reproducciones.

“Yo no aparecí ayer llegando de Conce. Yo, y muchas personas de los años 90 y 2000, pusimos los cimientos para lo que es hoy el arte en Chile. Nacimos desde el underground, y hay muchos artistas tanto visuales como músicos de ese tiempo, por ejemplo, Javiera Mena, para mencionar a alguien que la gente pueda reconocer, que pusimos los primeros ladrillos para construir la generación actual. El contexto artístico-cultural, la apertura, la libertad de expresión pero hay gente que me acaba de conocer y cree que yo aparecí ayer”, manifiesta.

La Dualidad: Elisa Espinoza vs DJ Lizz

DJ Lizz se mueve en una intersección de la cultura chilena donde el arte, la academia y opinión pública colisionan. Conocida por su proyecto musical y su estética desafiante, la artista revela la dualidad estratégica de su personaje: por un lado, la “DJ hipersexualizada que viaja por el mundo” y por otro, Elisa Espinoza, la historiadora del arte que estudió literatura en Inglaterra e Historia del Arte en la Universidad de Chile.

Esta tensión es palpable con su reciente invitación a un conversatorio sobre la exposición Ple/bellas de las cinco artistas Alexia Apablaza, Emilia Moren, Vanessa Fuentes, Antonia Moena Burgos y Paz Uribe, bajo la curaduría de Mauricio Bravo Carreño. La muestra desafía las normativas rígidas que a menudo impone un feminismo masificado sobre los cuerpos, reivindicando un atractivo inorgánico, híbrido y electrizante que circula tanto en el mercado como en las redes sociales.

Además de su recorrido por el circuito musical como DJ Lizz poco se sabe que trabajo en el MAC de Quinta Normal, escribió textos curatoriales para artistas como Margarita Dittborn y realizó clases de gestión cultural. A pesar de que le pidieron un conversatorio “relajado”, DJ Lizz planeó con anticipación sobre lo que hablará. “Yo no me baso solo en lo que yo pienso, me baso en lo que he leído, lo que he aprendido, en mis escritores favoritos”, asegura.

La base de su exposición se centra en tres conceptos que, a su juicio, se conectan con el “apocalipsis” y el “fin del mundo”, durante el conversatorio que se realizará este viernes en Espacio Londres a las 18.00 horas, hablará del Eros, basándose en Georges Bataille, la reproductibilidad técnica de Walter Benjamin y lo sublime. 

En ese sentido, la artista se plantea varias preguntas que van más allá de la conversación que se realizará esta tarde, sino que desde sus canciones y su imagen.

¿”Qué es el Eros hoy actualmente para nosotros? ¿Es una herramienta de guerra? ¿Una herramienta de poder? ¿O es un recurso subjetivo inspirado en las nuevas tendencias actuales del capitalismo, de lo que la lleva, de que si me pongo esta ropa, me miran más?”, se pregunta.

El cuerpo femenino como “Herramienta de Guerra”

El debate sobre si la belleza es poder es una de las preguntas que se viene pensando hace años en el arte y Lizz reflexiona constantemente sobre estas problemáticas a través de sus proyectos. La DJ es crítica con el consumo y producción de arte actual, “se ha perdido mucho lo que es la introspección y la reflexión visual”.

No puede ser que, por ejemplo, la Luli solo sea eso que estoy viendo, hay algo detrás, ¿me entiendes? Porque alguien que porta la voz de una generación no se puede dar por sentado. Aunque sea algo cringe o ridículo, lo que sea, es una figura de poder, y ese poder se lo dio la gente. ¿Y por qué se lo dio la gente? Porque claramente hay algo significativo en lo que hace. Y para mí, lo significativo de las figuras femeninas en la escena erradica en que son pocas las mujeres que se vuelven portavoz de nuestras propias voces acalladas. Aunque sea la Luli, la Marlen Olivarí, aunque sea yo, aunque sea quien sea, representan a todas las mujeres de voces acalladas y que se vuelven portavoz de esa voz: esa voz que es un eco en la sociedad. Una opinión que nunca fue dicha, un comentario, algo que nunca se mostró”, menciona. 

En ese sentido, la artista busca generar “fisuras” o “pequeños quiebres” desde dentro de un sistema que considera “aborrecedor, lleno de capitalismo, de egocentrismo, de individualidad, de opresión, de censura, de falsa democracia”

“En una fisura entra aire, entra luz, te molesta, pero todavía no sabes exactamente por qué se provocó. Cuando ya son tantas las fisuras que, de repente, ese muro se rompe y nace un nuevo concepto, una nueva concepción de lo que realmente puede ser el futuro de las nuevas generaciones. Y eso es algo que se devela, porque no puede ser que tanta gente que sí piensa un poco más allá crea que lo que yo he estado haciendo no es significativo”, expresa.

Además, reflexiona sobre el lugar que ocupa el cuerpo femenino en la historia y en la cultura contemporánea. Para la artista, lejos de ser un territorio neutral, el cuerpo de la mujer sigue siendo leído como un espacio cargado de tabú y tensión. 

“El cuerpo de la mujer era visto como una obscenidad, una aberración, causaba incomodidad, y el cuerpo del hombre no”, afirma.

Desde esa premisa, Lizz plantea una idea central en su trabajo.

“El cuerpo femenino es una herramienta de guerra para mí. La feminidad, lo femenino, lo exuberante, es una herramienta de guerra, basándonos desde el principio en que es un cuerpo que genera incomodidad”. Esa incomodidad, asegura, no es un efecto colateral, sino un motor de transformación. “Solo en la incomodidad existe el cambio”.

Finalmente, DJ Lizz critica la “subjetividad” de la era actual. Insta a las nuevas generaciones a ser objetivas para defenderse de las críticas: por ejemplo, en lugar de culpar al reggaetón por el narcotráfico, un pensamiento objetivo se enfocaría en la mala educación y la pobreza como las causas reales. Su arte, concluye, no es individual: “Esta sociedad no se construye en individuos, se construye en colectividad y en comunidad”.

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