
Chile vuelve a niveles previos a estallido y pandemia en ranking de competitividad mundial
El país escaló dos posiciones en el índice internacional que evalúa el desempeño económico, la eficiencia gubernamental, la eficacia empresarial y la infraestructura. Se mantiene como líder en América Latina.
Chile avanzó en el Ranking de Competitividad Mundial 2025 del International Institute for Management Development (IMD) de Suiza, elaborado en conjunto con la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile. Tras dos años sin variaciones, el país pasó del puesto 44 al 42 entre 69 economías evaluadas, logrando así recuperar el nivel que mantenía antes del estallido social de 2019 y de la pandemia de Covid-19.
Así lo confirmó Enrique Manzur, vicedecano de la FEN y uno de los investigadores responsables del informe: “Chile vuelve al nivel de competitividad que tenía pre estallido social y pre pandemia, seguimos liderando en la región y superamos el peor período de pérdida de competitividad que registramos en 2022”,
El avance posiciona a Chile justo por detrás de India (41) y por delante de Italia (43). En América Latina, se consolida como la economía más competitiva, por delante de Colombia (54), México (55), Brasil (58), Perú (60), Argentina (62) y Venezuela (69), país que retrocedió hasta el último lugar, superado por Namibia.
Un análisis por áreas
El ranking del IMD mide cuatro grandes pilares: desempeño económico, eficiencia gubernamental, eficiencia en los negocios e infraestructura. Cada uno se desglosa en múltiples subcategorías que permiten identificar las fortalezas y debilidades específicas de cada país.
- Desempeño económico: Chile mostró una mejora significativa en esta área, subiendo del lugar 55 al 44. En los subfactores se registraron alzas en economía doméstica (del 54 al 44), comercio internacional (del 63 al 57) y empleo (del 59 al 47). Sin embargo, hubo retrocesos en inversión internacional (del 21 al 24) y precios (del 24 al 26).
- Eficiencia gubernamental: En esta dimensión, Chile se mantuvo en la posición 30 a nivel global. Destacaron avances en estructura social (del 50 al 41) y finanzas públicas (del 21 al 20). Se mantuvo en el puesto 33 en marco institucional, pero retrocedió en política fiscal (del 36 al 39) y en el marco para los negocios (del 23 al 26).
- Eficiencia en los negocios: En contraste, Chile descendió del lugar 41 al 43. Cayeron prácticas de gestión (del 34 al 40) y actitudes y valores (del 38 al 40). En tanto, se mantuvo el indicador de productividad y eficiencia (62), mientras que hubo una importante mejora en mercado laboral (del 42 al 28) y un leve ascenso en finanzas (del 31 al 30).
- Infraestructura: Este fue el único pilar donde se evidenció una baja general, retrocediendo del puesto 45 al 48. Los subfactores con descensos fueron servicios básicos (del 34 al 36), tecnología (del 31 al 37), salud y medioambiente (del 43 al 44) y educación (del 49 al 51).
Durante la presentación del informe, la FEN de la Universidad de Chile también planteó una serie de desafíos estratégicos para el país. A nivel internacional, se destacó la necesidad de “navegar la guerra comercial, aumentando el valor agregado de las exportaciones y diversificando los destinos”.
En el plano interno, los investigadores llamaron a “aumentar la productividad laboral, potenciando el entrenamiento en nuevas tecnologías” y a “mejorar la seguridad pública, fortaleciendo y apoyando el trabajo de las policías”.
Finalmente, se subrayó la importancia de avanzar en calidad educativa y capacidad innovadora. “Aumentar la calidad y pertinencia de la educación, aprovechando la inteligencia artificial” y “fomentar la investigación y desarrollo mediante proyectos conjuntos entre universidades, empresas y el sector público” fueron señalados como ejes clave para mantener y mejorar la competitividad en los próximos años.
El panorama global
El ranking 2025 fue encabezado por Suiza, Singapur y Hong Kong. Dinamarca, que estuvo en el podio el año anterior, descendió al cuarto puesto. En tanto, Estados Unidos y China ocuparon las posiciones 13 y 16, respectivamente, reflejando un escenario de competencia geopolítica sostenida.
Chile, pese a sus desafíos internos, logró recuperar terreno y mantenerse como referente regional. La pregunta que queda abierta es si el país será capaz de sostener esta mejora en un contexto global dinámico y de alta incertidumbre.