Presidenta del Senado no descarta la posibilidad de ser carta presidencial
Isabel Allende se cree el cuento: «Hay gente en la calle que me dice, cómo nos gustaría que llegara un Allende a La Moneda»
«Me preguntaron si me daba cuenta de que tenía el apellido Allende, y dije sí, un poco lo mismo que sentí con la presidencia del Senado, porque mucha gente recordó que Salvador Allende también lo fue tres años», precisó la legisladora socialista.
La presidenta del Senado, Isabel Allende, dice que a pesar que es inoportuno adelantar la carrera presidencial, no descarta la posibilidad de ser una carta para la próxima campaña y sostiene que «hay gente en la calle que me dice, cómo nos gustaría que llegara un Allende a La Moneda».
Así lo manifiesta en entrevista a El Mercurio, en donde explica su aparición en la encuesta CEP como tercera mejor evaluación y mencionada como eventual candidata para la carrera presidencial.
«El resultado de la encuesta fue una sorpresa total, nunca me habían medido y me siento muy agradecida de esa valoración positiva. Al fin y al cabo, son cuatro períodos como diputada, la mitad del tiempo como senadora, y ahora presidenta de la Cámara Alta. Entonces, más allá de la sorpresa y lo gratificante, uno tampoco tiene derecho a cerrar definitivamente la puerta, pero tampoco es algo que haya estado en mi diseño», explicó.
Además, precisa que adelantar la carrera presidencial le parece inoportuno, «porque tenemos muchos desafíos con la reforma educacional, el binominal, la cuota de género o la reforma laboral».
Y agrega que «es legítimo que una persona diga que está dispuesta, pero otra cosa es que el PS esté hoy en plena selección de candidaturas. Hoy, el PS ni siquiera ha puesto el tema en la mesa. Es exagerado adelantarlo. Veremos en el momento oportuno».
«Me preguntaron si me daba cuenta de que tenía el apellido Allende, y dije sí, un poco lo mismo que sentí con la presidencia del Senado, porque mucha gente recordó que Salvador Allende también lo fue tres años. Entonces, creo que hay un círculo ahí, de eso estábamos hablando. No niego que hay gente en la calle que me para, que me dice «qué emoción, cómo nos gustaría, debería llegar un Allende a La Moneda», es un sentimiento espontáneo y natural de un cierto sector que así lo vive. Mi reacción aquí es decir: ‘Bueno, el tiempo dirá qué es lo que sucede’. Lo peor de estas cosas es marearse , precipitarse, y creo que la gente también percibe eso, y el tema presidencial no está a la orden del día para mí», expresó la senadora socialista.
Ni ME-O ni Andrés Velasco
La presidenta del Senado también se refiere a que su colectividad debe tener una carta presidencial para las próximas elecciones, cerrándole la puerta a la posibilidad que Marco Enríquez-Ominami o Andrés Velasco sean la apuesta de la Nueva Mayoría.
«Es muy simple y hay que decirlo con claridad: ni Marco Enríquez-Ominami ni Andrés Velasco son la Nueva Mayoría. Y creo que como Nueva Mayoría no podemos a abdicar de tener nuestras candidaturas, y nuestro mundo tiene que estar presente», dijo.
Allende añade que «el PS debe llevar un candidato. Ni Marco Enríquez-Ominami es el candidato del PS ni Andrés Velasco tampoco. Yo creo que la Nueva Mayoría tiene que sacar sus propias candidaturas que sean de su propio mundo. Y ni lo uno ni lo otro lo son. Entonces, no comparto lo que dijo un destacado dirigente, como Gutenberg Martínez, que le puso fecha de término».
Menciona en tal sentido que «sigo creyendo en que nosotros debemos seguir como coalición de centroizquierda, y no creo que tengamos ninguna viabilidad ni tiene ningún sentido una candidatura que pretenda ser la izquierda-izquierda».
No a Escalona
La senadora también rechazó la posibilidad de apoyar a Camilo Escalona para llegar a la presidencia del Partido Socialista, ya que en el período en que fue el timonel de la tienda se perdieron las confianzas.
«Ha costado en estos cuatro años restablecer las confianzas, los diálogos, sentarnos todos en la mesa, sentirnos parte de una gran mayoría dentro del PS y me gustaría que eso no se perdiera bajo ningún concepto. Cualquier dirección tiene que ser producto de un gran acuerdo, muy consensuado, con mucho apoyo», sostuvo.
En ese sentido, explicó que no le brindaría su apoyo a una eventual candidatura de Escalona, ya que «yo conviví (con su conducción) y vi exactamente lo que estoy diciendo. Sentí direcciones que no fueron inclusivas, que no fueron respetuosas con las minorías. Se polarizó mucho y creo que lo que menos necesitamos en el partido es polarización».