
La retórica y políticas de Trump reducen el turismo en EEUU
“Es la consecuencia evidente de una combinación de políticas y declaraciones de la Administración Trump que han cambiado el sentimiento y suscitado preocupación entre muchos potenciales viajeros”, dice analista.
Las políticas del presidente estadounidense, Donald Trump, entre las que se incluyen sus medidas antimigración y aranceles generalizados, empiezan a hacer mella en el turismo. Según la firma de análisis Tourism Economics, que contabiliza sus datos hasta julio, los viajes a Estados Unidos desde el extranjero han descendido un 3,9 % en lo que va de año.
Además, solo en julio las visitas internacionales se redujeron en un 3,1 %, sin contar con los datos de Canadá y México.
Las preocupaciones geopolíticas y una “retórica dura” por parte del Gobierno han contribuido a la “imprevisibilidad” y a un “sentimiento negativo global hacia los viajes a Estados Unidos” que han lastrado las visitas internacionales, indica la entidad.
Aran Ryan, director de Estudios Industriales en Tourism Economics, indicó que el descenso de las llegadas a EEUU es “la consecuencia evidente de una combinación de políticas y declaraciones de la Administración Trump que han cambiado el sentimiento y suscitado preocupación entre muchos potenciales viajeros”.
En este sentido, puso como ejemplo las “negociaciones comerciales adversas”, las medidas de inmigración y seguridad fronteriza y, en el caso de Canadá, las declaraciones que desafían la soberanía nacional de ese país.
Un destino diferente
Las restricciones de viaje a 19 países impuestas por Trump el pasado junio contribuirán a la percepción de Estados Unidos “como un destino menos predecible y acogedor”, agregó además Ryan.
En cuanto a la industria hotelera, la tasa de ocupación de hoteles en EEUU se sitúa en lo que va de año -contando hasta julio- en el 63,1 %, en comparación con el 63,5 % del año anterior, según datos preliminares de Costar, proveedor de análisis y datos sobre el sector inmobiliario.
En concreto, la estancia en hoteles estadounidenses se redujo levemente durante todos los meses de verano: en junio fue un 68,5 %, frente al 69,7 % de un año atrás; en julio, de un 66,4 %, frente al 67,2 %, y en agosto fue del 66,4 %, frente al 67,2 %.
En mayo, el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) pronosticó que Estados Unidos perdería 12.500 millones de dólares en gasto de viajeros internacionales este año, un descenso del 22,5 % interanual.
La presidenta y directora ejecutiva del WTTC, Julia Simpson, advirtió entonces de que, mientras otros países despliegan “la alfombra de bienvenida”, Estados Unidos coloca “el cartel de cerrado”.
El caso más drástico es el de Canadá. Los aranceles exigidos y la insistencia de Trump de convertirla en el estado número 51 de EEUU han alimentado la reticencia de los canadienses a viajar a su país vecino.
Así, las visitas de Canadá a EEUU “siguen cayendo en picado”, con un desplome del 20,3 % en lo que va de año y del 25,2 % solo en julio, según datos de Tourism Economics.