La posición del parlamentario representante de la Octava Región generó la indignación no sólo de sus pares de la DC, sino que también la del resto de los senadores de la oposición, que insistían en que rompió un acuerdo y dejó automáticamente sin efecto la débil mayoría que tenía el bloque en la Cámara alta. Y también estiman que su voto frustró gran parte de los esfuerzos para terminar la huelga de hambre que mantienen 34 presos mapuches. «Estamos igual que al comienzo», graficó un senador del PS.
Tras un largo y tenso debate en la sala de la Cámara alta, se terminó aprobando dl miércoles la ley corta presentada por el Ejecutivo para modificar la Ley Antiterrorista, lo que finalmente produjo un quiebre al interior de la Democracia Cristiana debido a que el senador Hosaín Sabag rompió el acuerdo de su bancada y votó, al igual que el oficialismo, en contra de la indicación presentada por la oposición que eliminaba el delito de incendio de la actual normativa.
La mencionada indicación establecía que «sólo constituirán delitos de terrorismo aquellos que afecten la vida, la integridad física, la libertad y la salud de las personas». Y a continuación planteaba que «tratándose de atentados contra la propiedad, tales como incendios y estragos (…) se juzgarán y sancionarán conforme a esta ley sólo cuando se tratare de lugares de uso público, redes de transporte público, o instalaciones de infraestructura, entendiéndose por estas últimas toda propiedad pública o privada que se utilice para prestar o distribuir servicios al público, tales como de abastecimiento de agua, alcantarillado, energía, combustible o comunicaciones, y concurriere además la finalidad de causar muerte o lesiones graves o una destrucción significativa, todo ello de conformidad con el Convenio para la represión de Atentados Terroristas cometidos con bombas».
Esta indicación terminó siendo rechazada por 19 votos contra 18 con el voto del cuestionado senador Sabag, quien posteriormente, en defensa de su postura, argumentó que no se lo puede obligar a votar con el partido, pues él se debe a su electorado.
La posición adoptada por el parlamentario representante de la Octava Región generó la indignación no sólo de sus pares de la DC, sino que también del resto de los senadores de la Concertación, que insistían en que Sabag rompió un acuerdo dejando automáticamente sin efecto para el futuro la débil mayoría que tenía la oposición en la Cámara alta.
EL senador Ignacio Walker, presidente de la Democracia Cristiana, manifestó su malestar por la actuación de Sabag, y fue él mismo quien advirtió que el legislador causó la pérdida de la mayoría opositora en el Senado, pero también el doblaje histórico que tenía la Concertación en la circunscripción de la Octava Región norte.
[cita]Si bien esto puede ser tomado como un triunfo del Ejecutivo, en la Concertación se mostraron molestos por el hecho que el gobierno haya llamado al Congreso a participar en la búsqueda de una solución a la huelga de hambre, pero sin escuchar las principales propuestas del bloque opositor.[/cita]
Otros senadores opositores fueron tanto o más duros que Walker a la hora de sancionar la actitud asumida por el parlamentario falangista en la votación de este proyecto. Incluso varios de ellos exigieron que la Democracia Cristiana tome medidas disciplinarias en su contra, recordando que no es la primera vez que Sabag se desmarca de la coalición en una votación importante.
En este sentido el senador del PPD Jaime Quintana señaló que «Sabag ya estaba con tarjeta amarilla y esta correspondería a una tarjeta roja. A Adolfo Zaldívar lo expulsaron de partido por menos que esto». En el PPD plantean incluso que no están dispuestos a senatarse a la mesa con la Democracia Cristiana en el Senado si participa el legislador.
Si bien el clima en la oposición es de molestia generalizada, otros parlamentarios plantean que una postura tan radical, como la de condicionar la ausencia del senador DC de las reuniones con ese partido, es demasiado. Y plantean que es la propia Democracia Cristiana la que debe decidir si sancionará al senador y cómo lo hará. «Ese es un problema de la DC y son ellos los llamados a resolverlo», dicen.
Por su parte el oficialismo celebraba la actuación de Sabag, puesto que gracias a que impidió con su voto que se eliminara el delito de incendio de la Ley Antiterrorista, el proyecto del Ejecutivo fue aprobado prácticamente igual a cómo ingresó, por lo que el propio Ignacio Walker adelantó que esta iniciativa no contribuirá a la solución del problema que se busca resolver, que es lograr que los 34 comuneros mapuches en huelga de hambre desde hace más de dos meses a la fecha, depongan su ayuno.
La UDI festejó como un triunfo el hecho que se mantuviera el » incendio» como delito terrorista, aún cuando la Concertación consiguió eliminar de la normativa vigente el de «amenaza terrorista».
Por su parte, el abogado de ocho de los comuneros en huelga, Manuel Montiel, señaló que se retiraba del Congreso «profundamente desilusionado», pues considera que el proyecto aprobado en la Cámara alta es «un profundo retroceso» que no contribuirá a levantar la huelga de hambre, por lo que el Congreso y el gobierno deberán asumir la responsabilidad política de lo que suceda en los próximos días, aludiendo, a la posibilidad que pudiera morir alguno de los huelguistas.
Si bien esto puede ser tomado como un triunfo del Ejecutivo, en la Concertación se mostraron molestos por el hecho que el gobierno haya llamado al Congreso a participar en la búsqueda de una solución a la huelga de hambre, pero sin escuchar las principales propuestas del bloque opositor.
En ese sentido estiman que luego de una semana de arduo trabajo legislativo, «estamos igual que al comienzo», graficaba un senador socialista.
El proyecto será discutido a partir de las 10:30 horas de este jueves, en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, donde continuará su tramitación, lo que podría generar que los legisladores deban sesionar hasta el viernes inclusive.
