Ocho personas han sido formalizadas hoy por la muerte de la niña Lissette Villa en un centro del Sename el año pasado. El fallecimiento de la menor de 11 años ocurrido en el Centro de Reparación Especializada de Administración Directa (Cread) Galvarino, dio origen al Caso Sename.
Entre los imputados figuran, en calidad de autoras, las educadoras de trato directo Conne Fritz Castillo y Thiare Oyarce García, a quienes la Fiscalía acusa de haber asfixiado a Lissette hasta la muerte en un intento de contenerla en medio de un ataque de ira.
Los otros imputados son la directora del Cread Galvarino, Mónica Monje, y la auxiliar de párvulos Jessica Figueroa en calidad de encubridoras; el coordinador de turnos del recinto, Leonardo Lefián, quien habría realizado apremios a Lissette con anterioridad a su muerte, y otros tres educadores de trato directo.
El abogado querellante, Sebastián Lafauriee, incluso quiere imputar a la ex directora del Sename Marcela Labraña. La ex cabeza de la institución de menores «no está en calidad de imputada en la formalización, pero nosotros queremos llevar el debate en la audiencia. A nuestro juicio es responsable, en calidad de encubridora, de este delito», dijo Lafaurie a
Radio Cooperativa.»Buscamos es que se haga justicia con la muerte de Lissette Villa y que nunca más se diga que los niños mueren de pena para esconder crímenes atroces y amparar violaciones a los derechos humanos», agregó el jurista.
