El Tercer Tribunal Oral en lo Penal de Santiago resolvió este jueves condenar a cuatro miembros de la antigua banda del menor Cristóbal C.M., conocido como el «Cisarro», por delitos de robo en bienes nacionales de uso público, robo con fuerza en lugar destinado a la habitación y por porte de armas cortantes o punzantes.
Los jóvenes condenados son Jerson D. M., alias el Chino; Franco R.M., conocido como Franco El Gorila, Diego A. M., llamado por sus compañeros como «El Loquín», e Israel G. I., cuyo apodo es «El Isra».
La decisión fue adoptada por las magistradas Eleonora Domínguez, Olga Fernández y Mariela Jorquera y la lectura de sentencia quedó fijada para el próximo 18 de octubre a las 16:00 horas.
Según los antecedentes de la investigación de la Fiscalía Metropolitana Oriente, el primer hecho ocurrió el 16 de abril de 2010, entre las 20:00 y las 21:30 horas, cuando los imputados Jerson D.M. y Diego A.M., forzaron la chapa del vehículo placa patente única TH.8152, estacionado en la vía pública frente al N° 5409 de la calle Beethoven, comuna de Ñuñoa, mediante el uso de una llave adaptada para tal efecto, apropiándose del vehículo.
Aunque se presumía que en el hecho participaron todos los miembros de la banda, el tribunal sólo llegó a la convicción de la participación culpable del «Chino» y «El Loquín».
Ese mismo día, según la imputación del Ministerio Público, los cuatro jóvenes, aproximadamente a las 22:30 horas, luego de movilizarse en el vehículo robado, llegaron a la comuna de La Reina y escalaron la reja exterior divisoria de un inmueble ubicado en calle Álvaro Casanova, que se encontraba con sus ocupantes en el interior, ingresando a éste y luego forzando la puerta de una bodega interna, con el objeto de apropiarse de especies de su interior. Por este hecho fueron condenados los cuatro menores.
Acto seguido, al ver que había personas en el domicilio y que funcionarios de Carabineros los seguían, ingresaron a otra casa del sector, portando dos de los menores imputados, Franco el Gorila y «El Loquín», cuchillos con hojas de ocho y nueve centímetros. Ambos fueron declarados culpables de porte ilegal de arma cortante.
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