BRAGA
Una de las principales preocupaciones de la Asociación Chilena de Protección a la Familia (Aprofa), son los obstáculos sociales a los cuales las mujeres y cuerpos gestantes puedan acceder a la interrupción voluntaria del embarazo, razón por la cual lanzaron esta recopilación con el fin de promover la lucha por el aborto libre.
Muchas de las emociones negativas que viven las mujeres y disidencias al momento de interrumpir un embarazo vienen dadas desde el estigma social. El aborto, no es una práctica que ocurra solamente a nivel físico y emocional, también impacta como es percibido por algunos sectores de la sociedad. La lucha de las mujeres en favor a una Ley de Aborto Libre muchas veces es mal vista y estigmatizada por la sociedad Chilena, lo que dificulta el proceso.
Bajo esa lucha es la Asociación Chilena de Protección a la Familia (Aprofa) lanzó el libro “Mi aborto, una historia”, trabajo literario que agrupa 39 cuentos breves sobre el aborto. Este fue realizado con el objetivo de remover el estigma social sobre la interrupción voluntaria del embarazo y potenciar la lucha por el aborto libre. La publicación, incluye las versiones de diversas vivencias narradas por las mismas personas gestantes de todo el país, como también desde parejas, familiares, amigas y amigos.
Es por esto por lo que surge la relevancia de buscar relatos como los reunidos en este material literario, en el cual buscan ser una herramienta para sacar del tabú la interrupción del embarazo y verlo como un proceso que forma parte de la vida reproductiva de todas las personas, aportando así al debate de su legalización y comprendiendo que la maternidad debe ser deseada.
De acuerdo con datos del Observatorio Ciudadano, en su informe sobre el estado del aborto en Chile del año 2018, alrededor del 95% de las interrupciones del embarazo siguen siendo en situaciones de clandestinidad, propiciando los riesgos de abortos inseguros.
Por otro lado, Ipsos, refleja en la plataforma Global Advisor, en la que se determinó que un un 30% de la población en Chile sigue siendo contrario al aborto, en cualquier caso. Y, por último, según el Monitoreo Social de la ley IVE realizado el año 2020 por la Mesa de Acción por el Aborto en Chile, la estigmatización sigue siendo uno de los principales obstáculos para que las mujeres puedan acceder a la interrupción voluntaria del embarazo, especialmente cuando se manifiesta desde los y las profesionales de la salud.
Es por ello por lo que la organización -que aboga por la promoción de iniciativas, leyes y políticas en materias de salud y educación sexual y reproductiva-, considera fundamental que la penalización social contribuye a que el aborto sea un proceso doloroso, culposo y vivido en soledad, ya que esto favorece a que mujeres se expongan a situaciones riesgosas para su salud, como es el aborto clandestino.
Junto con el libro, los cinco mejores relatos fueron convertidos en videos como parte de la campaña por la despenalización social del aborto, los cuales se podrán ver en las Redes Sociales de Aprofa y en la página web www.tienesopciones.cl
