BRAGA
De acuerdo a lo señalado por la presidenta de la Sociedad Chilena de Endocrinología y Ginecológica (SOCHEG) y gineco-obstetra de la Clínica Alemana, Paula Vanhauwaert, cada paciente puede reaccionar de forma distinta a un método determinado, por tal razón, la principal recomendación es consultar con expertas/os de salud para evaluar qué dispositivo será el más efectivo.
Actualmente, existen diversas opciones anticonceptivas a la cual se pueden acceder según las necesidades, contexto y comodidad de cada una. En ese sentido, a la hora de iniciar o pasar de un método a otro, es necesario un acompañamiento médico para aclarar cómo el dispositivo reaccionará en nuestro cuerpo.
Según indica la presidenta de la Sociedad Chilena de Endocrinología Ginecológica (SOCHEG) y gineco-obstetra de la Clínica Alemana, Paula Vanhauwaert, “lo más importante es que si una paciente está con un anticonceptivo que le hace bien y le permite estar cómoda, no hay que cambiarlo. Si es que se decide a modificar el método, siempre debe ser supervisado por un médico tratante, ya que obviamente es necesario identificar qué le molesta”.
La supervisión médica es crucial debido a las diversas reacciones que pueden provocar los distintos métodos en el cuerpo. Por ejemplo, el uso de anticonceptivos hormonales mejora el estado de ánimo, disminuye la retención de líquido y reduce los dolores asociados a la menstruación.
Sin embargo, la experta asegura que tales reacciones pueden variar según la individua que utilice el método, ya que se deben considerar diversos factores, como las características de cada paciente, antecedentes médicos, entre otros.
En la misma línea, la especialista sostiene que, una vez escogido un método, es recomendable realizar controles periódicos con la o el médico tratante, y así realizar un seguimiento de su efectividad.
Cabe señalar que todo lo anterior constituye un derecho asegurado por las Normas Nacionales sobre Regulación de la Fertilidad del Ministerio de Salud (Minsal) en el Programa Nacional Salud de la Mujer. Por lo cual, cualquier paciente puede solicitar orientación y acompañamiento durante el inicio o cambio de un método anticonceptivo.
