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Hinchazón abdominal, sangrado irregular o presencia de bultos en las mamas son algunas de los síntomas que podrían ayudar a la detección temprana de cáncer de mama, de ovarios o de endometrio. Conocer las alertas son una herramienta fundamental para tratar la patología con anticipación, lo que muchas veces significa resultados más positivos en la calidad de vida.
Diversos estudios de salud han señalado que una de las medidas más efectivas para el tratamiento de cáncer es la detección temprana, esto principalmente gracias al reconocimiento de los síntomas. Sin embargo, muchas veces las alertas tempranas son pasadas por alto.
Según un estudio elaborado por la organización Cancer Research UK, más de la mitad de las personas han sufrido alguna vez uno de los síntomas que podrían indicar la presencia de un cáncer, pero solamente el 2% pensaron que podían padecer la enfermedad y más de un tercio ignoraron por completo las alarmas y no acudieron al médico.
Para las mujeres, estar pendiente e informadas sobre las señales de alerta, es algo crucial. Especialmente considerando que según un estudio de la Revista Chilena de Obstetricia y Ginecología en relación con la mortalidad general por cáncer en la población chilena, el cáncer de mama constituye la tercera causa de muerte, detrás del cáncer de estómago y el cáncer de próstata.
Conoce a continuación los principales síntomas de cáncer que afectan a las mujeres.
La hinchazón abdominal es una situación que puede ocurrir de vez en cuando. Pero cuando este malestar se presenta todos los días y, además, se mantiene como algo constante por semanas, es necesario consultar con un especialista de salud, ya que, podría indicar la presencia de cáncer de ovarios.
La hinchazón puede estar acompañada con dolor pélvico, problemas digestivos o sensación de estar satisfecha sin ingerir muchos alimentos.
Por otro lado, entre los principales factores de riesgo de esta patología, se encuentra la edad avanzada, las alteraciones genéticas hereditarias, antecedentes familiares de cáncer de ovario e irregularidad en el comienzo de la menstruación.
Entre los principales síntomas de esta patología, se encuentra la presencia de un bulto o engrosamiento en la mama que se siente diferente del tejido que la rodea. Por otro lado, el cambio de tamaño, forma o aspecto de un pecho.
A lo anterior se puede sumar, cambios en la piel que se encuentra sobre la mama, como formación de hoyuelos, la inversión reciente del pezón, la descamación o desprendimiento de la piel, enrojecimiento o pequeños orificios en la piel que se encuentra sobre la mama, como la piel de una naranja.
Los principales factores de riesgo se agrupan en: edad avanzada, antecedentes personales de enfermedades mamarias (por ejemplo, si has tenido una biopsia de mama que detectó carcinoma lobulillar localizado o hiperplasia atípica de la mama), exposición a la radiación y comenzar a menstruar de forma temprana.
El cáncer endometrial se puede detectar en una etapa temprana porque con frecuencia produce sangrado vaginal anormal. Si esta patología se descubre con anticipación, la extirpación quirúrgica del útero con frecuencia lo cura.
Entre los principales síntomas se encuentran: el sangrado vaginal después de la menopausia, sangrado entre períodos menstruales y dolor pélvico.
