BRAGA
Créditos foto: kindel me en Pexels
Se acerca navidad y este año se han dejado ver las nuevas tendencias para celebrar estas fiestas. Se trata de un cambio de mirada frente al consumo que viene acompañado por una serie de transformaciones sociales, especialmente en torno a los roles de género y que se reflejan en la forma en que escogemos regalos para nuestros seres queridos, sobre todo cuando esa elección incluye a las infancias. El Mostrador Braga conversó con la académica, coordinadora de Publifem de la escuela de publicidad Diego Portales, Cecilia Tapia, sobre estereotipos de género, mensajes publicitarios y regalos de navidad, quien aconsejó “no ser tan permeable a los mensajes publicitarios que muchas veces se enfocan en el estereotipo o en el rol de género para direccionar las elecciones específicamente en estas fechas donde hay mucho consumo”.
Tecnología, sustentabilidad, experiencias, creatividad, fomento a la lectura y derribar estereotipos de género, fueron las nuevas tendencias a la hora de escoger regalos de navidad, sobre todo cuando se trata de los más pequeños. “Creo que hoy en día se está abriendo un cambio cultural sobre cómo escoger un regalo, generalmente se elegían desde la perspectiva sexo genérica, pero eso ya no se aplica como antes, es decir que ya no se identifica tanto a los infantes con los roles de género que tenían asignados socialmente”, expresa la publicista Cecilia Tapia en entrevista con El Mostrador Braga.
Respecto a las tendencias actuales, Tapia opina que, “la tecnología es hoy uno de los principales regalos que la sociedad está considerando para todas las edades, cada vez son más los niños, niñas, niñes y adolescentes que a una edad muy temprana tienen acceso a un dispositivo”.
Otras de las opciones de moda son las más amigables con el planeta, la elección de productos sustentables o experiencias que desarrollen la creatividad e inteligencia en la primera infancia, lo cual “pasa por un cambio que hay que hacer de manera progresiva accesible para todas las personas desde los hábitos más básicos hasta la elección de un regalo”, opina la publicista.
De la mano con el desarrollo de la creatividad, regalar libros fue otra de las opciones que destacaron en este mes navideño. Los municipios de Cerro Navia y Maipú decidieron innovar y apostar por entregar libros a las y los niños de su comuna, opción que la académica catalogó como replicable para todas las comunas y como “puerta de entrada para abrirse al aprendizaje de una manera orgánica y natural”.
Pese al cambio de mirada que ha se ha generado en los últimos años, la experta asegura que los mensajes publicitarios aún no exponen esta realidad completamente, “si miras las publicidades que existen para infancias en general se muestra a niñas representando roles que antes eran asignados para niños, pero no vemos a los niños en tareas de cuidados o en roles de la esfera privada que es donde las mujeres siempre hemos sido situadas en la comunicación”.
Por el contrario, “la elección de un regalo no tiene que ver con su sexo biológico sino con sus intereses, con lo que ellos les gusta, que va más allá de la identidad de género que puedan manifestar”, asegura Tapia.
“Las niñas hoy pueden hacer deporte, puede jugar con autos, con camiones, soñar con que quieren ser astronautas y los niños también pueden demostrar que les gustan cosas como la cocina, que le gusta tener roles de cuidadores”, ejemplifica y sugiere que, “desde esa perspectiva es importante romper un poco ese paradigma y entender que, si a tu hijo le gusta cocinar, regalarle un libro de cocina no lo va a hacer menos hombre -como podría pensar una persona quizás antiguamente- si no que tiene que ver con que está apuntando a sus intereses”.
Cecilia Tapia, publicista, académica y coordinadora del proyecto Publifem de la universidad Diego Portales
En este sentido, “hacer transversal la mirada de género en la infancia es un trabajo que de acuerdo con su forma de ver se encuentra incompleto, “hay un ámbito del cual la publicidad no se ha hecho cargo, porque ponemos a las niñas a desarrollar otras actividades, pero a los niños los tenemos dentro de la misma esfera sólo que les sumamos una cuota de color, entonces ahí el trabajo lo estamos haciendo a medias, es necesario incorporar ambas dimensiones a ambos géneros y también unificar conceptos a niñas, niños y niñes”, propone.
Con respecto a esto, la académica aclara que, “siempre se piensa que cuando uno habla de perspectiva de género solo alude al sexo femenino y en realidad este término alude a todas las identidades y a todos los sexos y tiene que ver con la manera en que se representa a cada uno de ellos en la sociedad”.
En ese sentido cambiar la forma en que lo masculino es apreciado juega un rol relevante puesto que, “los niños crecen con un concepto de masculinidad, bajo unos roles de género que sienten que tienen que ir desarrollando a lo largo del tiempo, es ahí cuando hay que perder el miedo y entender que la perspectiva de género incluye a las infancias en todas sus dimensiones”, expresa la académica de la UDP.
Dejando un poco las brechas de género, Tapia aborda la elección del momento. “Creo que la irrupción de la tecnología en la vida de las personas ha modificado la manera en que las infancias y adolescencias se mueven en torno al mundo de los regalos”, propone y explique que, “la tecnología ha roto las barreras de la edad y cada vez son más los niños, niñas, niñes y adolescentes a una edad muy temprana tienen acceso a un dispositivo. En casos de niños sobre ocho años lo más probable es que los papás estén pensando en regalarles su primer celular”, asegura.
“Lo bueno es que la tecnología es universal, no es una cosa de hombres o mujeres, lo pueden utilizar todas las personas”, puntualiza sobre esta elección.
Otra de las tendencias más bulladas en el 2022 ha sido la preferencia por la sustentabilidad u otras experiencias sensibles que fomenten el aprendizaje y la creatividad. En este aspecto, la académica opina que, “en vez de regalar cosas materiales es mejor regalar experiencias, muchas veces las experiencias vienen arraigadas con la cultura, con la cognición, con el desarrollo del pensamiento crítico, del pensamiento creativo, en ese sentido, en vez de gastar mucho dinero en un juguete de plástico puedes utilizar ese mismo dinero y hacerlo vivir una experiencia, regalarle un curso de algo o llevarlo al cine, a una exposición”.
“Creo que la sustentabilidad no solamente se trata de crear o elegir productos que el impacto que producen a largo plazo sea el mínimo, sino de elegir situaciones o experiencias que sean duraderas en el tiempo, la diferencia es el impacto que puedas lograr a largo plazo es mucho más grande”, explica y rescata que, además, “al elegir regalos sustentables les enseñas valores y la importancia de ser consumidores responsables y ese es un paso pequeño que tienen que dar los papás en un primer inicio”.
Sin embargo, este enfoque cultural aún no es una visión transversal en la sociedad, “yo apunto a que lo sea, pero creo que es algo que se va a dar a largo plazo porque ser sustentable y tener un estilo de vida de ese tipo no es algo a lo que todas las personas puedan acceder, ser sustentable es caro y requiere de un poder adquisitivo para acceder a ciertas cosas que generen menor impacto medio ambiental y no todas las personas tienen acceso a eso”, agrega.
“Además, la vorágine de navidad que implica que tengas que tener un regalo sí o sí, muchas veces no son decisiones muy a conciencia, sino que son decisiones más apresuradas por el tener que cumplir con un regalo o si tu hijo quiere un regalo en específico no le vas a decir que no porque no es sustentable”, en esta línea para la académica una visión de este tipo requiere tiempo y esfuerzo y se podría generar en el largo plazo.
En el contexto de la Región Metropolitana, los municipios de Maipú y Cerro Navia optaron por romper esquemas y regalar libros esta navidad para las y los niños de su comuna apostando por el fomento lector. Sobre esta elección, la académica opina que “todo lo que estimule la educación, cultura, aprendizaje y creatividad siempre va a ser una excelente opción, puesto que es una de las falencias que tienen las y los adolescentes e incluso los adultos jóvenes de hoy en día”.
Según Tapia, la tecnología ha reemplazado a los libros, “la transmedialidad del contenido a abierto puertas para que los jóvenes sientan que se comunican mejor, pero eso parte de una base que es la lectura. Nunca va a ser malo regalarle un libro a un niño, al contrario, estoy muy de acuerdo con esa elección, creo que debería ser replicable a todas las comunas”.
Para finalizar esta entrevista, la publicista concluye que “lo principal es hacer regalos pensando en los verdaderos intereses de quienes lo van a recibir y no basándose en su rol de género, no porque sea un hombre el regalo debe ser azul o enfocado a una tarea masculina y/o no porque sea una mujer el regalo tiene que ser rosado, un objeto doméstico. Hacer regalos con sentido, que cubra una necesidad de bienestar o emocional y no dejarse llevar por lo que la misma publicidad indica que deberías regalarle a una persona”.
