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Con río de libros en plena plaza Baquedano se lanza nueva convocatoria de “Santiago en 100 palabras” Este año se espera que los textos recibidos superen los 40 mil cuentos

Con río de libros en plena plaza Baquedano se lanza nueva convocatoria de “Santiago en 100 palabras”

Un río literario con cientos de libros se sintió correr en Plaza Italia, desembocando en la estación de Metro Baquedano en este jueves 29 de diciembre. Componiendo el ‘agua’ de la corriente de palabras estaban ejemplares de los Mejores 100 Cuentos de este año del concurso «Santiago en 100 Palabras» donde santiaguinos expresaron en historias su cariño por la ciudad.


En 16 años de historia, el clásico el concurso de micro cuentos lanzó una nueva convocatoria con la intervención urbana “Río de Palabras” para invitar a los ciudadanos santiaguinos a escribir cuentos cortos con miradas personales sobre los diversos escenarios y rincones que construyen la capital y que enriquecen anécdotas e historias urbanas.

La iniciativa presentada por Minera Escondida, Metro de Santiago y Fundación Plagio, abrió su convocatoria que se extenderá hasta el 10 de marzo de 2017. A la fecha el concurso ya ha recibido más de medio millón de cuentos, por lo que la masiva participación del público evidencia que el certamen se ha convertido en una instancia de expresión ciudadana en la que la ciudad es el principal foco de inspiración.

“Es una invitación a reflexionar y pensar sobre la ciudad de manera creativa y a través de este proyecto hemos logrado conocer y rescatar la identidad de una ciudad compleja y llena de diversidad como Santiago. A través de los cuentos que sus habitantes escriben, la identidad santiaguina se hace más conocida y más nuestra”, señala Carmen García, Directora Ejecutiva de Fundación Plagio y idealizadora del Santiago en 100 Palabras.

Los cuentos también forman, de una cierta manera, una especie de registro histórico de la ciudad desde una mirada cotidiana de los habitantes. El proyecto se ha exportado a otras latitudes y hoy existen versiones en Europa y México. García reafirma el potencial que tiene el proyecto mediante una iniciativa muy simple, transversal y democrática que es escribir un cuento de lo máximo de 100 palabras acerca del lugar donde uno habita y de ahí esperar a que emane una caja de sorpresas.

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“El potencial de las 100 palabras da para mucho, yo digo que toda ciudad merece sus 100 palabras, es posible rescatar la identidad de los lugares y evidenciar aquello que nos distinguen y nos hace único como ciudadanos. Fueron distintos intentos de hacer el proyecto fuera y finalmente nos resultó llevar a Puebla y Budapest y esas primeras experiencias afuera hicieron que el concurso se exportara a Praga, Bratislava y Varsovia”.

El contenido presente en la colección de cuentos es muy variado por la diversidad social de sus autores. Es posible encontrar en el libro cuentos de niños desde 5 años hasta los adultos mayores. Entre los temas, muchas veces se puede encontrar relatos que ponen en discusión asuntos, incluso, de la agenda política.

“Con el tiempo los cuentos se van haciendo cargo de los temas que están sucediendo, el año pasado hubo un cuento sobre el aborto que coincidió justamente con lo que se discutía en ese momento en el Senado, entonces de esa forma creo que la gente se ha empoderado con esta instancia de participación y ha logrado conocer y dar una voz a sus opiniones y expresiones, y eso, sin dud,a es algo innovador que se necesita espacios así cada vez más”, añade García.

Además de la divulgación y publicación de los cuentos ganadores, el concurso premia las tres mejores historias con premios en dinero. Arelis Uribe es la autora de Lionel, el cuento ganador de este año. Según ella, Santiago en 100 palabras tiene un carácter ciudadano y masivo que permite que la gente exprese su cariño por la ciudad. A la joven periodista siempre le ha encantado la literatura pero nunca había pensado en inscribir su trabajo en concursos.

“Como muchos mandé un cuento sin mucha expectativa, pensaba en quedar dentro de los 100 mejores para ser publicada en el libro y gané inesperadamente. Una vez le preguntaron a Ernest Hemingway qué podían hacer por los escritores jóvenes y la gente que quisiera empezar a escribir y el dijo ‘Denles plata y muestren su trabajo’, y este concurso hace eso, además del premio en dinero, exponen tu trabajo en las estaciones de metro donde pasa mucha gente. Es de verdad algo muy bello por dar la posibilidad que las personas conozcan tu historia que te da ánimo para seguir trabajando. Yo lancé mi libro de cuentos que se llama ‘Kiltras’ y siento que iniciativas como Santiago en 100 palabras son un espaldarazo para quienes escribimos”.

La Gerente de Clientes y Sostenibilidad del Metro de Santiago, María Irene Soto, declaró ser un orgullo recibir trabajos de calidad, los cuales muchos son inspirados por las viajes cotidianas que hacen los pasajeros de la red de transporte público.

“Es uno de los más exitosos concursos de cuentos del país por la cantidad de textos que llegan todos los años. El año pasado superamos los 40 mil, y esperamos que este año se supere esta cifra. Es maravilloso leer un libro con los mejores cuentos del año pasado; la idea de la intervención urbana es muy creativa y nos integra a la ciudad y el Metro de Santiago apoya eso. Una historia que me gustó mucho y que leí hace poco fue de una persona que sale del Metro Cal y Canto y va a la Vega y, ahí, describe con detalles sus acciones en el lugar, o sea estas historias tan cotidianas de los pasajeros que usan el Metro y salen a la ciudad, son visiones que nos llenan de orgullo y nos lleva a conocer qué pasa en la vida y cómo vivimos por las estaciones que pasamos”, declara.

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