A mediados de los años 80, el director y actor de teatro Andrés Pérez le pidió apoyo para un proyecto de teatro callejero, lo que fue el impulso para que dejara su carrera de periodista y se dedicara a la gestión cultural. Hoy, como directora ejecutiva de Fundación Teatro a Mil, ha producido por años uno de los eventos culturales más importantes de Chile: Santiago a Mil. Romero cuestionó la poca importancia que se le da en el país a la cultura y señaló que la producción cultural depende del impulso incondicional de los artistas, que sacrifican su estabilidad para producir sus trabajos. “Hacer arte y hacer cultura ha sido siempre muy heroico y ha estado siempre en manos de los grandes artistas, que han decidido tener salas de teatro. Les era muy difícil sostenerlas antes, ahora se les hace casi imposible. Se necesitan subvenciones que ayuden a mantener los costos básicos subvencionados”, recalcó.
