CULTURA
La alternativa académica que pone en valor la disciplina orfebre, textil y las artesanías patrimoniales en el concierto de la educación superior chilena, “fomenta el arte como una manifestación cultural que se resignifica y genera un nuevo patrimonio a través de una lectura respetuosa de lo que ya había”, dice el artista plástico Alejandro «Mono» González sobre este innovador programa.
El histórico muralista y fundador de la Brigada Ramona Parra, Alejandro “Mono” González, ha compartido con diversas generaciones de artistas a lo largo de otras diversas décadas de políticas culturales (“o la ausencia de ellas”, dice), como para describir el impacto de una carrera como Artes y Oficios en la Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC).
La alternativa académica que pone en valor la disciplina orfebre, textil y las artesanías patrimoniales en el concierto de la educación superior chilena, “fomenta el arte como una manifestación cultural que se resignifica y genera un nuevo patrimonio a través de una lectura respetuosa de lo que ya había”, dice el artista plástico sobre este innovador programa.
Tras la severa crisis que representó la emergencia sanitaria de los últimos dos años, esta relectura del arte y la artesanía actual que hace el docente de la carrera, adopta una nueva forma en la institucionalidad.
Desde los creadores ligados a piezas simbólicas de la cosmovisión mapuche, aymara y otras, hasta el cruce económico y turístico del arte en Pomaire, artesanía del crin en rari y la loza policromada de Talagante, entre otros tesoros humanos vivos; las Artes y los Oficios que actualiza la UAHC se basan en distintas materialidades propuestas en una malla curricular donde la historia del arte, la gestión cultural y la tradición artística se trenzan con la producción contemporánea de artefactos culturales.
La profesora de la carrera de Artes y Oficios, la reconocida ceramista Juana Malpartida, agrega que el plan de estudios combina lo mejor de ambos mundos: la suma del ayer y del hoy, de saberes precolombinos con técnicas actuales que considera muy relevantes para los artesanos/as que desean actualizar conocimientos y habilidades.
“Siempre les digo a los/as alumnos/as que el campo del oficio de la cerámica es muy extenso. Pueden ser gestores/as culturales que aporten a la comunidad, pueden ser artesanos/as que trabajen para un diseñador o pueden ser artistas o maestros/as en el oficio en las áreas que finalmente elijan”.
Una conciencia del oficio y el hacer que fortalece la profundidad teórica y el “lugar en la historia y en el presente que cada uno/a de ellos/as tiene”, agrega la artista.
“Hay muchos ramos de historia del arte que se dedican específicamente a lo que eran las técnicas que se utilizaban en el pasado, pero también se busca un equilibrio entre el origen y la identidad hasta llegar el día de hoy con un concepto contemporáneo donde se suman esas dos alternativas. Creo que eso es muy interesante”, agrega.
“La apuesta por este tipo de carreras, tan necesarias en un país que tiene un contexto relacionado con el turismo, te habilita para ser parte de un montón de nichos, posibilidades, proyectos y empleabilidad”, sugiere.
También a favor de hacer esta curatoría institucional del arte fuera de los museos y las galerías, la jefa de la carrera de Artes y Oficios, Catalina Gelcich, señala que uno de los fundamentos de este programa exclusivo que desarrolla la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, es el de una formación multidisciplinaria pensada desde un enfoque comunitario participativo no solo a nivel nacional, sino barrial y latinoamericano en una relación permanente con la tradición, el patrimonio y la cultura contemporánea.
“En general, todas las carreras de artes visuales que se imparten en Chile provienen del ámbito de las bellas artes, algo que se contrapone a las artes aplicadas. Nosotros en la Academia aportamos un sello latinoamericano a las Artes y Oficios, pero también acercamos la relación entre las bellas artes y la artesanía”, explica la magíster en Artes Visuales.
Por otra parte, el profesor y muralista, “Mono” González cree que las disciplinas artísticas se ven favorecidas por la tecnología y los nuevos procesos, pero que estas propuestas y sus plataformas avanzan a la velocidad de la innovación, lo que hace necesario la actualización de estos conocimientos a través de programas como los que ofrece la carrera de Artes y Oficios. También llama a reflexionar sobre cómo lidiamos con el excedente de información y los nuevos medios de expresión artística que hoy están disponibles.
“A veces estamos muy invadidos y no tenemos un cedazo para poder filtrar y elegir lo que realmente nos conviene. En el fondo lo que está en juego es nuestro control de la tecnología para poder elaborar un producto o una obra creadora. Utilicemos las herramientas para sacarles provecho y no como fetiches que nos obliguen a hacer cosas”, cree.
“Desde mi ámbito de desempeño, el del muralismo urbano, hay mucha información en la calle, donde cada uno prácticamente está compitiendo por ella. Entonces tenemos que utilizar todas las herramientas a nuestra disposición. En este momento yo, por ejemplo, me manejo mucho más con Instagram porque a nivel internacional todos los grafiteros, muralistas y artistas urbanos lo usan como un libro que reemplaza el antiguo portafolio de lo que uno va haciendo”, opina el artista plástico y muralista.
Conoce más sobre la carrera de Artes y Oficios: http://www.academia.cl/artes/artesyoficios
Carrera de Artes y Oficios en palabras de la ceramista Juana Malpartida
https://youtu.be/YxoVA5cKLOU
