Los Springboks derrotaron en la “final de consuelo” a los Pumas y se quedaron con el tercer lugar de la Copa del Mundo Inglaterra 2015.
No, no pudo ser. Argentina tenía el sueño de repetir su histórico tercer puesto del Mundial 2007, pero no pudo ser para estos Pumas. Argentina cayó 24-13 ante Sudáfrica y quedó cuarta en el Mundial de Inglaterra. Por sus propios errores más que por aciertos del rival; por sus múltiples suplencias más que por el juego asociado de los Springboks.
El de hoy debe haber sido el peor partido de los Pumas en el campeonato, pero para los trasandinos fue un gran torneo y eso nadie puede arrebatárselos.
Es que Argentina se enfrentó a los tres equipos más fuertes del mundo y ante ninguno se vio desdibujado. Fue de frente y así ganó y perdió. Pero luchó siempre con buenas armas.
Hoy a los Pumas se les hizo muy difícil. Con muchos ausentes por lesión (Juan Martín Hernández, Inhoff, Creevy, Tuculet y Ayerza), no lograron atacar como acostumbran y, además, cometieron demasiados errores en la marca, casi no tuvieron la pelota y avanzaron muy poco. La tarjeta amarilla a Cubelli, a los cuatro minutos, evidenció la intranquilidad del quince y Sudáfrica, con mucha más experiencia y tranquilidad, golpeó rápido y mejor.
En ese período de 10 minutos con un jugador menos, Sudáfrica sacó una ventaja de 10-0.
Superados ampliamente en el primer tiempo con un parcial de 16-0, se recuperaron en el segundo con los cambios introducidos por el técnico Daniel Hourcade, pero no fue suficiente.
Ocho puntos del apertura Nicolás Sánchez (una conversión, un drop y un penal) permitieron que Argentina estrechara el marcador y que Sánchez siguiera como máximo anotador del campeonato, con 97.
“Estamos tristes por perder, pero podemos estar contentos por nuestro torneo y haber hecho crecer el interés por el rugby en Argentina”, declaró Sánchez.
Los Sprinbgoks marcaron dos tries, uno en el inicio de cada tiempo. Pietersen a los cinco minutos y Etzebeth a los dos del complemento. Luego sumó con la enorme precisión de Handre Pollard: cuatro penales y una conversión.
Por Argentina, Sánchez marcó ocho puntos y Orlandi apoyó un try en la última jugada. Pero esa, esta vez, no fue la guinda de la torta.
PORMENORES:
Partido por el tercer lugar.
Estadio: Olímpico de Londres.
Público: 54.000 espectadores, aproximadamente.
Árbitro: Johnny Lacey (Irlanda). Mostró tarjeta amarilla a Tomás Cubelli (4’), de Argentina.
Jueces de touch: Glen Jackson (Nueva ZelandIa), Chris Pollock (Nueva ZelandIa).
TMO: Graham Hughes (Inglaterra).
Sudáfrica (24): Le Roux (64’ Lambie), Pietersen, Kriel, De Allende, Habana (67’ Serfontein), Pollard, Pienaar (77’ Paige), Vermeulen, Burger (54’ Alberts), Louw (62’ Burger), Matfield (63’ De Jager), Etzebeth, Malherbe, Bismarck Du Plessis (49’ Strauss) y Mtawarira.
Argentina (13): Figallo (72’ Noguera), Montoya (77’ García Botta), Herrera (55’ Orlandi), Alemanno (47’ Petti), Lavanini, Fernández Lobbe (53’ Isa), Ortega Desio, Leguizamón; Cubelli (53’ Landajo), Sánchez, Cordero, De la Fuente (71’ González Iglesias), Moroni, Agulla (58’ Socino) y González Amorosino.
