El aparato pertenecía a la Misión de las Naciones Unidas en el país y volvía a Katmandú desde un campamento maoísta situado en Sindhuli.
Las víctimas del accidente de helicóptero de la ONU ocurrido el lunes último en el este de Nepal ya son doce, entre ellas siete extranjeros, indicó este martes el Gobierno nepalí en un comunicado.
«Los equipos de rescate de la Policía encontraron los cadáveres de diez de los doce viajeros con las caras quemadas», informó el Ministerio nepalí de Interior.
El helicóptero pertenecía a la Misión de las Naciones Unidas en Nepal (UNMIN) y volvía a Katmandú desde un campamento maoísta situado en Sindhuli, en el este del país, cuando dejó de emitir señales de contacto en torno a las 16.00 horas del lunes (10.15 GMT).
En un comunicado, la UNMIN aseguró que los fallecidos eran diez, desveló las identidades de tres nepalíes y precisó que, de los extranjeros muertos, tres eran tripulantes del helicóptero (dos rusos y un bielorruso) y cuatro eran supervisores de armas (un gambiano, un indonesio, un coreano y un sueco).
«Murieron trabajando por la paz en Nepal y la UNMIN continuará en medio de esta tragedia con sus mejores esfuerzos con ese propósito», dijo en el comunicado el representante en Nepal del secretario general de la ONU, Ian Martin.
En Nepal hay 186 supervisores -procedentes de 41 países- encargados de la supervisión de las armas y campamentos de los maoístas, un elemento clave del proceso de paz que cuenta con un mandato del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
EFE
